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REORGANIZACIÓN TOTAL

La Copa Perú

A propósito de las declaraciones del presidente de la SAFAP, Roberto Silva, que fustigó duramente a la Copa Perú, pues  no debe tener acceso a la Liga 1,  porque hay equipos como el Deportivo Llacuabamba.

Silva puede tener razón, pero él no conoce como es el ambiente de la Copa Perú. El Deportivo Llacuabamba es un accidente, pues es el producto de una industria informal como es la minería, en la zona de Pataz, donde es evidente que el dinero informal, por llamarlo así, es lo que predomina.

Puede un equipo cualquiera de la Copa Perú,  gastar un promedio de 200 mil soles mensuales?. Por supuesto que no. Bueno, así llegó Llacuabamba, al fútbol profesional. Sus gastos bordeaban y sobrepasaban esos números que fueron proporcionados por sus propios dirigentes, cuando en el año 2019 avanzó raudo por la Copa Perú y pasó como una aplanadora por nuestra ciudad.

Un equipo de esa naturaleza, cuyos dirigentes no sabían dónde estaban parados y solo gastaban porque tenían la plata en la mano, no puede ser barómetro de nada. En todas las etapas coperas del 2019 avanzó por su poder económico.

Es más el título copero se lo quitan en la mesa y al final el campeón fue Carlos Stein y los patacinos llegaron clasificándose en el cuadrangular con Atlético Grau. Claro esa parte de la historia no tiene nada que ver con el fondo del tema.

Llacuabamba llegó al fútbol profesional, jugó y se fue en solo un año. Se fue tal cómo había llegado. Sin pena y sin gloria. Por eso al aparecer ahora las declaraciones de Silva, quizás lo entendamos, pero ocurre que Llacuabamba solo fue un globo,  producto de la informalidad, de la forma como se maneja el dinero en las alturas de Pataz.

Es cierto también, que ellos manejaron las etapas coperas iniciales como les dio la gana pues siempre contaron con la venia pusilánime de la Liga Departamental. Jugaron la Distrital, es más de repente ni  la jugaron, pues no dejan ni rastros, con tres equipos. La provincial de igual manera. Recién en la departamental aparecieron los rivales gruesos. Lo demás es conocido pues hacen sentir la fuerza económica.

El hecho, es que Deportivo Llacuabamba sea producto de la informalidad y el poder económico, no quiere decir que en la Copa Perú, esas circunstancias sean predominantes, no por el contrario también hay de los otros de clubes que cuentan con mecenas y que sufren para llegar.

Es cierto, también, que la Copa Perú necesita de manera urgente sincerar sus instituciones, por allí deben empezar las reorganizaciones, sobre todo ahora que ya serán dos años que no se jugará por el maldito virus de por medio. Sino lo hacen, ahora, no lo harán nunca. Todo dependerá de la FPF, pero tal como están cosas,  será difícil que eso ocurra. (El Editor)