Opinión

¿LA GENERACIÓN DE ABUELAS TERRORISTAS?

Por: Nicole Peláez Solis (*)

En los últimos días ha rebotado una noticia alarmante y que llama la atención; sobre todo, a quienes somos mujeres. Hablo de las declaraciones que dio la candidata a la primera vicepresidencia; Neldy Mendoza; quien forma parte del partido “Renovación Popular”; del candidato Rafael López Aliaga.

No es la primera vez que el candidato López Aliaga da que hablar en la prensa, pero hoy nos vamos a enfocar en su candidata colega Neldy Mendoza y sus expresiones con respecto al rol de la mujer en la sociedad.

Sabemos que aún vivimos en un país machista; aún existen hombres que creen que la mujer solo sirve para quedarse en casa, realizar quehaceres y hacerse cargo de los hijos; ideología que existe desde hace muchos años y algunos lo practican. Sin embargo, con el paso del tiempo, las mujeres han sabido llevar su rol a otro nivel, pues han demostrado que pueden ser independientes, profesionales sin depender de alguien.

Lamentablemente la señora Mendoza; no piensa así. Es un pensamiento que ella puede tener y se respeta pero; el hecho de que ella quiera imponer esa ideología sobre las mujeres peruanas en pleno siglo 21; es lo que causa revuelo e indignación en nosotras.

Dichos videos que se difundieron compromete a Neldy Mendoza asegurando que la toma de pastillas anticonceptivas es lo que provoca violencia familiar. En mi opinión, un comentario fuera de lugar y que da paso a una expresión realmente muy conservadora. “…La anticoncepción ha venido a destruir a la mujer.” Este comentario desatinado solo demuestra ignorancia por parte de la señora; pues es cada mujer quien decide como cuidarse porque es algo muy personal. La mujer que quiera o no tener hijos, es una decisión propia y se respeta.

Parece poco creíble como a estas fechas, aun existen personas con esos pensamientos, pero eso no es lo único que opinó la candidata por Renovación Popular. Ella, además también dice y cito textualmente: “Si usted enseña que lo que menos importa es ser madre, si no mas bien ser profesional y ganar plata y nunca lavar platos, usted se estará convirtiendo en una abuela terrorista de sus nietos”. Ella quiere decir que ¿todas las mujeres que cuentan con una carrera profesional al día de hoy o quienes se encuentran cursando una; somos terroristas?. Al parecer para ella, que una quiera generar ingresos para su casa o para ella misma, está mal, que quiera contar con un titulo profesional que me permita abrirme a otros campos laborales también lo esta; y porque no quiero quedarme a lavar platos en casa; es peor.

Respeto la opinión de otros, pero que dicha candidata quiera pretender e imponerme no querer sobresalir por quedarme en casa cuidando de mis hijos; no es aceptable.

Otro extracto que soltó la candidata a primera vicepresidencia pues dijo que sería culpa de nosotras; las mujeres, el que seamos golpeadas, maltratadas y abusadas: “porque no nos hemos relacionado bien con el hombre y hemos hecho que salga lo peor de él”. Comentario desatinado y muy impropio. Nadie, absolutamente nadie tiene derecho a tocar a una mujer; así como las mujeres tampoco se pueden permitir aprovecharse de su condición para soltar golpes contra los hombres. En general, todo término de violencia esta prohibido pero que dicha señora muestre que; tal vez estar en desacuerdo con la pareja le da derecho a éste a que nos maltrate; definitivamente es grave.

Estudio para ser una profesional, para realizarme como comunicadora social en lo profesional, así como muchas mujeres tienen otras carreras o están en proceso de terminar una. No quiero quedarme en mi casa lavando platos, tenga hijos o no; y si esa señora piensa que por ello; me estoy convirtiendo en una “Abuela Terrorista”; pues claramente lo soy y seré. Estas líneas, para mí es demostrar que no comparto los ideales de la candidata de López Aliaga, y quienes crean que la señora está en lo correcto está bien. Sólo pensemos y veamos quienes son los que nos gobernarán, las elecciones ya están próximas y volver a una misma situación, ya sería culpa de nosotros, pues todo está en nuestras manos.

(*) Estudiante de Ciencias de la Comunicación.