Editorial

::: PAZ QUE CONSIGUES, PAZ QUE CONSTRUYES :::

La firma de un pacto de no agresión entre los gremios de construcción civil, que permita respetar la paz laboral y brindar tranquilidad a la población de la provincia del Santa,  es a no dudarlo una de las noticias más alentadoras que podemos haber recibido en los últimos tiempos.

La suscripción de este importante y prometedor acuerdo  fue promovida por la denominada Mesa Técnica para la Prevención de Conflictos, conformada por representantes de organismos e instituciones directamente relacionados con el rubro de la construcción civil. Ellos son la Municipalidad Provincial del Santa, Ministerio de Trabajo, Policía Nacional, Ministerio Público, Defensoría del Pueblo, Sunafil,  Poder Judicial, Subprefectura y los gremios laborales legalmente acreditados.

A decir verdad, muy pocas veces hemos asistido en la provincia del Santa a una convocatoria tan representativa como necesaria, cuyos  metas prometen desde ya un cambio laboral que va a repercutir  en la población.  Se puede advertir en la firma de este pacto una demostración de  firme compromiso e indeclinable voluntad  por cambiar el orden de las cosas. Si no nos equivocamos, creemos estar asistiendo a uno de esos  pasajes decisivos que marcan un antes y un después.

Otra de las decisiones  asumidas por los firmantes del acuerdo de no agresión, consiste en erradicar el sistema de cupos de trabajo, que tanta violencia y tan malos recuerdos  ha dejado en la provincia del Santa. En su lugar se dará fiel cumplimiento a una bolsa de trabajo, que es la mejor garantía para evitar cualquier asomo de violencia.  Esa  es la demostración más palpable del compromiso y de la voluntad que se está asumiendo.

Los dirigentes de construcción civil han sido los primeros en expresar su total  conformidad con la firma de este acuerdo. No más violencia. Si de verdad se quiere cambiar la historia, eso conlleva la necesidad de cerrar una página y abrir una nueva.

Y qué bien que para lograr este caro objetivo, se haya optado, sin dudas ni vacilaciones, por el camino correcto del diálogo alturado. Ninguna otra herramienta, de las tantas que tenemos al alcance de las manos, podrá ser más eficaz que el diálogo para construir con bases sólidas un nuevo orden institucional; un cambio positivo que todos deseamos para el gremio de construcción civil. En más de una ocasión, la historia nos ha demostrado que la paz que se obtiene mediante el diálogo, es una paz mucho más  legítima, más constructiva y más duradera.

En este momento, los gremios de construcción civil de la provincia del Santa representan una fuerza laboral conformada por más de 20 mil trabajadores. La cifra habla por sí sola de la implicancia que tiene este sector laboral a la hora de evaluar su impacto en la población económicamente activa de esta parte del país.

Desde esta perspectiva,  la bolsa de trabajo del sector construcción civil deberá manejarse ahora bajo estricta aplicación de las normas laborales, inspiradas a su vez en el más noble espíritu de justicia. Para eso, la Mesa de Técnica de Prevención de Conflictos  dispondrá a su debido tiempo de toda la información relacionada con los paquetes de obras a cargo del gobierno regional y municipalidades. Con el derecho al trabajo tiene que mantenerse por encima de otros intereses.

No será una tarea fácil de sobrellevar, pero  tampoco imposible de darle fiel cumplimiento.