Editorial

::: LOS DUEÑOS DE LA CALLE :::

Un problema antiguo y de nunca acabar:

De no haber sido por la protesta que hace unos días realizaron los vecinos de la urbanización El Trapecio, es posible que no se hubiera recordado la existencia de un antiguo problema que tiene que ver con el desarrollo urbano de Chimbote, como es la ocupación ilegal de la vía pública. Desde hace más de sesenta años, dos cuadras  de la avenida Brea y Pariñas se mantienen ocupadas ilegalmente por  la empresa pública Petroperú sin que jamás se haya hecho algo por corregir esta situación.

No sin razón, antiguos residentes de esa parte de la ciudad han reclamado al alcalde Roberto Briceño para que la obra de remodelación que viene ejecutando en ese lugar la Municipalidad Provincial del Santa, incluya estas dos cuadras. Pues conforme se puede observar en el plano de desarrollo urbano de Chimbote, el trazo de la avenida Brea y Pariñas comienza en su intersección con la avenida Enrique Meiggs frente al estadio Centenario y termina en la prolongación del Malecón Grau donde está proyectada la construcción de la avenida Costanera.

Hace más de sesenta años, con la excusa de brindar seguridad a sus oficinas y de facilitar la circulación de los carros cisternas que recogen combustible en sus instalaciones, la empresa del Estado invadió este espacio colocando como “puerta principal” un cerco de fierro y cemento en plena vía pública. Es obvio que los alcaldes de la época no se preocuparon para nada por esta ilegal ocupación y permitieron que las cosas continuaran como si nada estuviera pasando.

Al amparo de este silencio de autoridad, la misma suerte correrían otras arterias de la ciudad luego del terremoto de 1970 como es entre otros  el caso de las cuadras 8 y 9 de los jirones Leoncio Prado, Ladislao Espinar y Alfonso Ugarte. Las familias damnificadas que inicialmente levantaron sus carpas en plena vía pública, finalmente levantaron en el mismo lugar construcciones de ladrillo y cemento, sin que en ese momento nadie se los prohibiera. Corregir esta situación le ha costado al Municipalidad Provincial del Santa más de 40 años de demandas y contrademandas en el Poder Judicial.

Como bien lo han sostenido los vecinos de El Trapecio, hubiera sido preferible que antes de iniciar la remodelación de la avenida Brea y Pariñas, la Municipalidad Provincial del Santa hubiera solucionado el problema creado por Petroperú. No haberlo hecho en su debida oportunidad significa el riego de que se esté dando por oleada y sacramentada la ocupación ilegal de ésta y otras vías de uso público por parte de empresas, personas e instituciones que se consideran dueños de la calle. Una verdadera bomba de tiempo para las futuras gestiones municipales.

FE DE ERRATAS.- En nuestro comentario editorial de ayer martes, incurrimos en un lapsus calami involuntario al mencionar el nombre del congresista Darwin Espinoza Vargas  como la persona que fue nombrada en el cargo de director regional de Transportes durante la gestión del ex gobernador  Waldo Ríos Salcedo. En realidad quien ocupó ese cargo fue su hermano Yuri Espinoza Vargas, quien al igual que en aquel entonces, continúa siendo uno de las personas visibles del comité provincial del partido Acción Popular.