Por: WALTER MIGUEL QUITO REVELLO (*)
Entre semana se publicó una noticia, en los medios locales de San Jacinto en el distrito de Nepeña, en donde, un fiscal realiza una intervención en la Calle Campo Marte, en San Jacinto. Lugar que ha sido tomado por comerciantes muchos años y que por motivos de la pandemia fueron evacuados al Estadio de San Jacinto y al pasar el tiempo han retornado a sus antiguos puestos a la fuerza. Ante el descontento de los vecinos. Con la finalidad de analizar la conducta fiscal, policial, autoridades ediles y comerciantes.
En el video se aprecia a personas pertenecientes a la fiscalía, policías, funcionarios de la municipalidad distrital de Nepeña y según refiere la conductora, personal de CODISEC, y se escucha, al Fiscal: “El día de hoy mi presencia se debe a otro motivo a otra diligencia” Un ciudadano le dice: “Me permite el documento para verlo, un documento que tiene que ver” Responde el fiscal: “Que le tengo que permitir mi documento” Responde el ciudadano: “Estoy con exitosa ahorita”. Responde el fiscal: “Usted es un ciudadano o un comerciante o periodista” Responde el ciudadano: “Comerciante” Responde el fiscal: “Es comerciante correcto. Mi nombre es Renzo Milla, fiscal de prevención del delito. Grávenme. A ver personal policial. A ver quién está a cargo cercado. Que identifiquen al caballero ya” Responde el ciudadano: “Por mí no hay problema” Los comerciantes se alborotan y le dicen no vengan a sorprendernos señor fiscal y con quien polemizaba le dice al fiscal: “No tiene ningún membrete. No tiene el fiscal nada” Responde el fiscal: “Ya hay que identificar al caballero y le hacemos un control de legalidad, un control de identidad y lo llevamos a la dependencia policial ahí me voy a identificar conforme procede” y mientras hablaba el fiscal el ciudadano entrega su DNI al policía y comienza un alboroto y se ve que la policía se acerca hacia el comerciante que polemizaba y la periodista informa: “Que se va a proceder a detener al comerciante por faltarle el respeto a la autoridad”
La primera pregunta que nos hacemos es ¿Que hacia el fiscal? Fue a dar una charla. A conversar. A ser mediador ¿A que fue? La verdad que no sabemos. Pero si sabemos que existió a nuestro entender una pésima intervención que demuestra la falta de métodos para resolver un conflicto de forma asertiva y efectiva de parte del fiscal y demás autoridades.
Cuando uno llega a una diligencia fiscal, a veces, no sabemos quién es fiscal o chofer de la fiscalía. Como el caso que nos ocupa, ya que los choferes de la fiscalia tienen la misma casaca color y modelo que portaba el fiscal. Pues debería existir un protocolo de actuación fiscal en donde, el ciudadano pueda diferenciar a un fiscal. Ya es muy común, que los fiscales en nuestra provincia realicen sus actuaciones, no respetando la formalidad de su investidura y el cargo al que representan. Se puede entender que los fiscales para sus constataciones u otras diligencias estén con ropa deportiva, ropa de calle, con gorra, para que puedan realizar con comodidad su trabajo. A veces hay que ir a los cerros, a la playa, a lugares de difícil acceso. Pero portar un distintivo como carnet, o su chaleco en donde dice fiscal de la nación. Marcaria la diferencia.
Por otro lado, se puede entender la ignorancia de un comerciante, su duda, hasta la falta de educación. Qué, no debe ser aceptado en una sociedad, pero no es motivo para ordenar “Su detención” o control de identidad. Es más, se denota arrogancia al fiscal cuando dice: “(…) y lo llevamos a la dependencia policial ahí me voy a identificar conforme procede” Que, de acuerdo a la teoría de la neurosis de Karen Horney, la arrogancia o ser arrogante es el producto de la compensación que ocurre en el ego (egocéntrico, egocentrismo) por tener una autoimagen inflada. Por lo tanto, la persona pretende ejercer los derechos que cree tener por la importancia que se atribuye a sí misma, basada en su autoimagen; mientras que los demás lo ven y reconocen por lo que es.
Si bien es cierto, el Nuevo Código Procesal Penal, en su artículo 205° facultad al policía realizar un control de identidad esta debe realizarse cuando considere que resulta necesario para prevenir un delito u obtener información útil para la averiguación de un hecho punible y se realizará en el lugar en que la persona se encontrare, por medio del correspondiente documento de identidad. Si el ciudadano ya se había identificado ¿Para que llevarlo a la dependencia policial? ¿Había un delito flagrante? ¿Se había negado a identificarse? Karen Horney en el año 1945 ya había estudiado la conducta del fiscal, que es la mayoría de la conducta de las autoridades que tienen el ego inflado por el poder que tienen, en su teoría de la neurosis.
Por otro lado, el policía no está obligado a obedecer a un fiscal, si su mandato está al margen de la Ley. Si no había flagrancia y el ciudadano no se había negado a identificarse. ¿Para que llevarlo a la dependencia policial? Prácticamente hubiera sido una violación al derecho constitucional a la libertad. Es como si el policía aceptara la orden ilegal de matar o pegar por parte del fiscal.
El Decreto Supremo, Nº 008-2021-PCM, en su Artículo 8.- Uso de espacios públicos, refiere que los gobiernos locales, en el marco de sus competencias, facilitan el uso de los espacios públicos y se consideran espacios públicos a las avenidas, jirones, calles, pasajes, malecones, etc. Sin embargo, la presencia de CODISEC, obedece a que en una reunión habían aprobado el desalojo o conversado. ¿CODISEC Nepeña impulsando o acordando un desalojo? Es evidente que a sus integrantes les falta charlas de cuáles son sus funciones. Lo que debería hacer el fiscal de prevención del delito es: 1. Investigar si esa reunión de CODISEC se ha dado con ese fin para denunciarlos a todos por el delito de abuso de autoridad. 2. Pedir información a la municipalidad de Nepeña si han implementado su plan o protocolo de seguridad conforme al decreto en mención. 3. Guiarse por la Ley. Solo así hubiera sido más fructífera su vanidad a San Jacinto que de casualidad no tiene nada.
Si bien es cierto, el problema de comerciantes que toman las calles, en San Jacinto, es de muchos años porque sus autoridades permitieron y que no debería ser así, al ser vía pública. La actual autoridad edil tuvo casi 20 meses en cuanto a pandemia y 3 años de gestión para resolverlo y su negligencia no debería solucionarse con fiscales y policías que cuando le preguntan su cargo o identificación ordenan e intentan detener. A todas luces actuaciones arbitrarias. Lo que debió hacer el fiscal es preguntarles a los funcionarios de CODISEC. ¿Si la municipalidad ya implemento un plan o protocolo de seguridad en su distrito para mercados y toma de vías públicas? Controlar las actuaciones de otros funcionaros que conforman CODISEC Nepeña afín de que no exista en la mente de los ciudadanos que otorongo no come otorongo.
Nepeña 13 de noviembre del 2021
(*) Abogado – CAS 2748
DNI 32950023
Cel 944998355