Multitudinaria movilización en la capital pidiendo la renuncia del Presidente de la República:
- Protestas en provincias crecen y en Lima, población protestó y se enfrentó a la Policía, mientras Gobierno busca solucionar problemas.
- Primer mandatario en su hora más difícil luego de disponer inmovilización social en Lima para después dar marcha atrás.
A pesar que el mandatario dejó sin efecto el toque de queda que se había impuesto para este martes hasta las 23:59 horas, los ciudadanos que salieron a marchar hacia el Congreso contra Castillo han dañado los frontis del Poder Judicial, Ministerio Público y JNE.
Precisamente, algunos ciudadanos que se sumaron a la protesta sacaron adoquines de la berma principal y rompieron los vidrios de la fachada de la institución judicial y usaron su puerta principal como urinario. La Policía Nacional había implementado un cerco en la intersección de la avenida Abancay con Nicolás de Piérola para evitar que manifestantes llegaran al Congreso.
Sin embargo, con el fin de acceder a esta zona del centro de la capital, un grupo de personas decidió rodear la Corte y buscar un jirón que conecte con la avenida Abancay y esté sin resguardo policial. Así, varias personas se acercaron al portón de la parte posterior e hicieron fuerza común con palos, lanzas y piedras para forzar las cerraduras.
Después de haber empujado y golpeado, lograron abrir el portón e ingresar a la propiedad pública. Al darse cuenta de esta irrupción, la Policía Nacional lanzó gas lacrimógeno para sacarlos de allí. Diversas personas salieron, algunas cargando sillas de oficina y extintores. Todos ellos, no obstante, continúan congregados en el Parque Universitario.
Desde horas de la tarde miles de personas salieron a protestar contra las medidas que había adoptado el presidente Pedro Castillo. Estas se reunieron en la avenida Abancay y en la plaza San Martín.
Hasta cerca de la avenida Abancay también llegaron manifestantes con fuegos artificiales, cantando el himno nacional y agitando las banderas. Hubo algunos que aparecieron enmascarados y en motocicletas, haciendo piruetas provocativas para llamar la atención de la Policía Nacional.
Otro punto del Centro de Lima en el que se reportaron enfrentamientos fue el jirón Apurímac, cerca del Parque Universitario. Hasta allí hubo un grupo de ciudadanos que se resistían a retirarse y empezaron a lanzar piedras contra la Policía.
En respuesta, los oficiales dispararon bombas lacrimógenas. Dos cordones, ademas, se habían colocado en este jirón para evitar que los manifestantes lleguen a la avenida Abancay por ese flanco. Los ánimos continuaban tensos en medio de una marcha que, según adelantó el ministro del Interior, ya va dejando cuatro policías heridos.