Opinión

PERMANECER EN EL DÍA, HORA Y LUGAR EQUIVOCADO

Dr. Edhín Campos Barranzuela

Mucha preocupación viene causando en la ciudadanía, el inesperado incremento de la ola delictiva en todas las regiones del país y esta difícil situación de la espiral de violencia, ha puesto sobre el tapete nuevamente el tema de la grave inseguridad ciudadana.

No cabe duda, que estamos tocando fondo, pues a aparte de los problemas sanitarios por la terrible tercera ola y la situación económico, social y política, se suma otro de los principales problemas que tenemos, que  es la grave situación de la ola delictiva.

Al mes ocurren un promedio de 36,000 delitos y de acuerdo a la Dirección de Tecnología de la Información y Comunicación de la Policía Nacional, cerca de 50 personas son víctimas de la comisión de varios delitos cada hora.

Eso significa que en cada minuto, se estarían produciendo diferentes hechos punibles en el país, lo cual es preocupante y en consecuencia urge implementar severas medidas legislativas.

Las cifras de la criminalidad, se han disparado en los últimos años, al parecer producto de la migración venezolana y consigo también han venido integrantes de presuntas bandas y organizaciones criminales extranjeras.

La mayor cantidad de hechos punibles, se perpetran en una moto lineal o mototaxi y normalmente se ha podido advertir que los facinerosos actúan en pareja, a mano armada y están dispuestos a todo, si se opone resistencia a sus ilícitas actividades.

Durante estos últimos días, ha aparecido una nueva modalidad delictiva, esto es que los facinerosos cometen delitos contra el patrimonio en manada, es decir un grupo de hampones en la calle que roban todo lo que encuentren a su paso, es algo así como las barras bravas, que aprovechándose de la cantidad de personas, arrebatan a sus víctimas celulares, carteras, cartucheras, dinero, tarjetas de crédito, ropa, etc.

Esta nueva modalidad, se realiza en cualquier hora y se aprovechan del tumulto y de la rapidez de sus actos para cometer sus fechorías, de tal manera que cuando llegan los efectivos del serenazgo o la Policía Nacional ya no se encuentran y solo se puede contar, si es que hubiere con el registro fílmico.

De la misma forma, no debemos perder de vista, que según, fuentes de la Policía Nacional, la migración venezolana, ha traído consigo delincuentes de alto vuelo y por su forma, modo y ejecución de sus actos ilícitos, estos son muy violentos.

Según, se ha tomado conocimiento, los presuntos delincuentes extranjeros realizan todo un trabajo de reglaje en el aeropuerto, en lugares exclusivos, también realizan vigilancia y seguimiento a turistas y  empresarios, con la finalidad de sustraer joyas y relojes de cotizada marca, como un reloj rolex, que puede llegar a costar entre veinte hasta cien mil dólares.

De la misma forma, se da cuenta que se han incrementado a plena luz del día los arrebatos, pululan los raqueteros al paso, existe robo de celulares por doquier, han aumentado los carteristas, los robos de autopartes de vehículos, asaltos y robos en las viviendas y centros comerciales y peligrosos atracos, en suma delitos contra el patrimonio en sus diversas modalidades.

Estos inesperados atracos obedecen que hay gente con amplio prontuariado policial y judicial,  que precisamente acaban de purgar su condena y en consecuencia han salido en libertad y ahora se están agrupando con sus compiches, para retomar sus anteriores y peligrosos  atracos.

Por lo que urge,  intervenir a las bandas y organizaciones criminales que hoy pululan por toda la ciudad y a decir de los diversos estudios jurisprudenciales realizados por el magistrado Víctor Prado Saldarriaga, las organizaciones criminales tienen las siguientes características:

– Tienen una estructura de configuración piramidal.

– Tienen un mando central con capacidad decisoria.

– Presentan un complejo grado de organización.

– Existe estabilidad y permanencia.

– Su objetivo central es el beneficio económico.

Qué duda cabe, que una de las mayores demandas que solicita la sociedad peruana de los órganos encargados de impartir justicia y a todas las instituciones que tienen que ver con la investigación y juzgamiento de los delitos, es la conclusión y celeridad de sus procesos judiciales.

Es decir, todos los justiciables demandan del Ministerio Público y del Poder Judicial que sus causas penales, se desarrollen dentro de la garantía constitucional del plazo razonable, esto significa que se tome conocimiento cuando empieza su proceso y además cuando concluye el mismo y no se prolongue de manera ad infinitum.

En consecuencia, urge replantear políticas de Estado, para controlar la delincuencia en todas sus modalidades y que se verifique los antecedentes penales, policiales y judiciales de cada extranjero que ingresa al país, pues así como se le ha dado la oportunidad de cristalizar un proyecto de vida y se afinquen inclusive con su familia en diferentes regiones del Perú, también se exige respeto en país ajeno, bajo apercibimiento de aplicar las normas de migración, que también incluyen la expulsión inmediata del país.