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MUJER ATACADA POR PITBULL AÚN SIGUE HOSPITALIZADA

Perdió dedos del pie, nariz, entre otros:

Una mujer de nacionalidad venezolana se encuentra muy delicada de salud, tras ser atacada por un perro pitbull quien le arrancó su nariz y cinco dedos del pie, sin embargó los propietarios del animal no querrían asumir con toda la recuperación de la mujer.

El pasado primero de junio, la madre de familia, Rosa Navas Laya de 56 años, se encontraba laborando al cuidado de una adulta mayor identificada como Fredesvinda Vera Ascate de 77 años, en su vivienda de la Av. Brasil, Mz. B lote 9 de la Urb. Santa Rosa, cuando de pronto fue atacada por uno de los perros pitbull que viven en la vivienda.

Los fuertes gritos alertaron a los vecinos, quienes de inmediato pidieron el apoyo a los serenos de Nuevo Chimbote y a los agentes policiales, encontrando a la mujer inconsciente en el piso en medio de mucha sangre, siendo trasladada rápidamente al hospital regional.

En el nosocomio sureño, los médicos pudieron dar a conocer a los familiares que el animal había desgarrado cinco dedos del pie, la nariz, parte del labio y generado profundas heridas en manos y brazos, siendo sometida a intervenciones quirúrgicas.

Los médicos han pedido de urgencia la compra de dos aparatos, uno para poder respirar y otro llamado sistema de cierre de herida asistido por presión, para evitar que pierda los dedos del otro pie.

Debido a esta situación su hija, Omary Navas, denuncio que lamentablemente los propietarios del perro pitbull, solo se han hecho cargo de algunos medicamentos; sin embargo, han dicho que ya no van a cubrir la compra de esos dos equipos.

“Yo no pido más que mi mama salga recuperada de este hospital, somos cristianos no nos gusta estar en estas situaciones, pero ellos tienen que asumir toda su recuperación, pero encima de forma mala nos dicen que no, que ya no tienen dinero, señores ellos tienen que asumir la responsabilidad son sus perros y mi mama solo trabajaba en esa casa”, indicó.

Precisó que esta es la segunda vez que su madre fue atacada por el mismo perro pitbull. En aquella ocasión les pidió a los familiares de la adulta mayor, la colocación de un bozal a los dos canes que viven en el domicilio, pero hicieron caso omiso a su pedido.

“Mi madre trabajaba hace siete meses en esa vivienda, cuidaba a la abuelita, pero ahora le quieren dar la espalda, ahora está mal, no ha mirado su rostro aun, llora y cuando escucha un perro grita, esta emocionalmente mal, necesitamos ayuda, estamos solos acá”, precisó su hija.