MESA DIRECTIVA
La elección que se realizará esta mañana en el Congreso de la República para elegir a la Mesa Directiva del año en curso 2022-2023 nos muestra esa fragmentación en la cual nos encontramos involucrados, en la política en nuestro país. Son cuatro listas que reflejan el divisionismo de nuestra sociedad, y lógicamente impedirá que se logren resultados en la primera vuelta. El oficial mayor del Congreso dijo ayer que si no se logran los 66 votos, habrá una segunda votación donde participarán las dos listas más votadas. Esta elección toma interés en nuestro ámbito porque está de por medio la candidatura de la congresista por nuestra región, Lady Mercedes Camones Soriano, quien ha ejercido el cargo de primera vicepresidenta del Congreso en el periodo que termina; y de acuerdo a como se han estado moviendo los intereses de las distintas corrientes políticas, ella tiene opciones de ganar esta elección. Si bien es cierto que la oposición está dividida, las otras fuerzas políticas no tienen el volumen necesario de votos para poder señalar a estas alturas alguna otra posibilidad. El asunto es lo que pueda ocurrir de llegar a esa segunda vuelta, que se realizaría de manera inmediata, y donde las discusiones y divergencias estarán a la orden del día con lanzamientos de dardos y acusaciones de todo calibre. Seguramente observaremos, quizás hechos que no quisiéramos, pero reflejan el actual estatus de nuestra sociedad. Aquellos que señalan que el Congreso debe ser cerrado, se olvidan o ignoran políticamente que fuimos todos los peruanos los que elegimos este Congreso y es el reflejo de nuestra sociedad.
FALTA DE AUTORIDAD
Los hechos producidos el último fin de semana en una discoteca del Malecón Grau nos muestra la falta de autoridad que tenemos en nuestra ciudad. Aquí en esta esquina hemos tratado en varias oportunidades este asunto, porque es evidente que no solo se trata de esta gestión, la Municipalidad Provincial del Santa, sino también de las anteriores que han emitido las licencias especiales para este tipo de establecimientos que pululan en el Malecón Grau y en especial en la primera cuadra del Jr. Enrique Palacios a solo 150 metros del Palacio Municipal. Solo el día que exista la decisión política para tomar acciones frente a estos negocios nocturnos y sea respaldada por el pleno de regidores, tendremos la posibilidad que retorne el ejercicio de la autoridad que se ha perdido en el centro de la ciudad. Desde hace más de dos décadas, eso no existe y por eso, la zona de las discotecas es tierra de nadie; y así exista funcionarios municipales con la mejor intención de imponer la autoridad, no será posible si es que tenemos normas tan débiles mediante las cuales funcionan estos negocios, donde no les interesa el vecindario, donde no les interesa la tranquilidad pública y donde prevalece la matonería ante la legalidad. Ahora que nos encontramos en plena campaña electoral y donde diversos candidatos ofrecen promesas de manera pública, no hay ninguno que toque estos temas tan delicados. Aún faltan un par de meses más para las elecciones de octubre y tenemos la ligera esperanza que alguno de ellos se ocupará del tema.
DESBORDE
La zona donde se encuentra el astillero Sima Chimbote, el Muelle Municipal y la Base Naval ha sufrido el aniego proveniente de aguas del río Lacramarca, cuya desembocadura se encuentra muy cerca del lugar. Es cierto que desde hace mucho tiempo no ha existido trabajo de descolmatación de dicho río, y por eso no llama la atención que las aguas se hayan desbordado. Esa zona es pantanosa y lógicamente las filtraciones están a la orden del día, pues son casi permanentes y ahora, que las aguas han salido, debemos tener en cuenta que debe haber una mayor vigilancia y cuidado para que no vuelvan a suceder desbordes como el ocurrido.