Una gran experiencia fue lo que vivieron los niños, el último domingo en el estadio San Bartolo donde participaron del I Concurso Paraecuestre de dominio de riendas de caballo peruano de paso para personas con habilidades especiales, que vivieron una verdadera fiesta.
A esta competencia participaron siete jinetes, quienes vivieron una grata experiencia, de compartir con otras personas con las mismas habilidades que llegaron desde otras ciudades como Lima y Arequipa, que le dieron brillo a esta actividad.
La profesora e instructora, Verónica Lozano Alvarez Martorell explicó que este fue el primer concurso que se realizó en nuestro país y tuvo lugar en nuestra provincia con la importante participación de diferentes centros ecuestres del Perú.
Indicó que gracias al trabajo que desarrollaron con los niños desde hace un mes, la performance de los chicos fue excelente, porque demostraron mucha habilidad para el manejo del caballo, indicó la profesora que aseguró tener más de cinco años de experiencia en el trabajo con niños con habilidades especiales.
Esta competencia tuvo como objetivo la inclusión a este deporte de las personas con síndrome de down, algo tan importante que se necesita tanto en nuestra sociedad, y quedo demostrado que el respeto y la admiración hacia los competidores fue la mejor por parte de los asistentes, por lo bien que se desenvuelven.
Tal como indicaron los instructores, la conexión con el caballo abre el corazón y la mente a las personas, y en el caso de los niños con habilidades especiales, hay un trabajo neural, de ritmo, de secuencia muy importantes, donde el niño trabaja la mente, la parte emocional y en lo físico también, por lo que los beneficios de estas actividades son inmensos para los niños, y eso se notó en la participación de estas personas.
Al final, todos fueron premiados, ya que los organizadores tuvieron como consigna que, todos son ganadores, y como tal premió y reconoció el esfuerzo y el talento de todos los participantes, siendo uno de los más destacados, el chimbotano Jesús Núñez Urbina.