PTAR II:
Después de un periodo de tres años en el que se realizaron estudios técnicos y gestiones del más alto nivel, el último de los cuales se ha llevado a cabo en medio de una lucha contra el tiempo, anteayer se aprobó el contrato de endeudamiento externo entre el gobierno peruano y el banco alemán KfW que permitirá financiar la ejecución del proyecto Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Chimbote y Nuevo Chimbote, PTAR II; un proyecto de saneamiento de singular connotación que beneficiará a los habitantes de estos dos populosos distritos.
El cronograma del proyecto señala que a partir de este momento quedan por delante las etapas de contratación del consultor, elaboración del expediente técnico y finalmente la ejecución de la obra. Estos pasos están programados para desarrollarse en un plazo máximo de cuatro años, lo que quiere decir que el PTAR II estaría entrando en funcionamiento a más tardar el año 2027.
Con una población actual de 384 mil habitantes, se estima que, para cuando este proyecto entre en funcionamiento, los distritos de Chimbote y Nuevo Chimbote tendrán en conjunto una población de 415 mil habitantes. Esto nos da una idea muy reveladora del universo al que va a beneficiar la ejecución del PTAR II, el mismo que a su vez significa la solución de un antiguo y ya insostenible problema de saneamiento y contaminación ambiental.
Actualmente el volumen de los desagües que se generan en Chimbote y Nuevo Chimbote está estimado en 560 litros por segundo. Este volumen es descargado directamente al mar a través de 14 bombas de impulsión instaladas a todo lo largo de la bahía, desde la zona de La Caleta hasta el pueblo joven Villa María.
Como todo el mundo sabe, esta situación no solamente genera una severa contaminación sino también ofrece un lamentable espectáculo que afecta la imagen de Chimbote como ciudad. Para el año 2027, el volumen de los desagües se habrá incrementado a 750 litros por segundo; razón más que suficiente para recibir con justificado beneplácito el anuncio respecto a la aprobación del contrato de endeudamiento.
El PTAR II tiene previsto captar todo este volumen de aguas servidas a través de una red de colectores de 33.3 kilómetros y seis estaciones de bombeo además de dos plantas de tratamiento. Luego de ser procesadas, las aguas sobrantes serán evacuadas al mar a través de un emisor submarino instalado en el cerro Península. Es de esperar asimismo que el abono orgánico y el gas natural que resulten de este proceso, sean objeto del más óptimo aprovechamiento.
No está demás señalar que el plazo de ejecución del P-TAR II coincide con el periodo de la gestión municipal que iniciará sus funciones el próximo 1° de enero, esperándose en tal sentido que las bases para la puesta en marcha del proyecto, se consoliden de la mejor manera en los próximos cuatro años.
Por lo pronto, a más tardar el 15 del presente mes se estará firmando el contrato entre los representantes del gobierno peruano y del banco KfW, por lo que se puede decir que, ahora sí, el PTAR II es un sueño hecho realidad.