Opinión

C’EST LA VIE

Por: Fernando Zambrano

Analista Político

A través de la historia, el “anti voto” ha puesto en riesgo la estabilidad política del país en dos momentos históricos. Como diría V.R. Haya de la Torre, en dos espacios tiempo históricos. En ambos casos, generados a través de “discursos de odio”.

El primero, a inicios de la década de los treinta, con el “antiaprismo” que duró algunas décadas. El “antiaprismo” apareció casi en simultáneo con la fundación del “Partido Aprista Peruano” y llevó al país a escenarios de persecución política, insurrección y asesinatos políticos.

El segundo momento es el del “antifujimorismo”, más conocido en la actualidad como el “NoaKeiko”. Este discurso de odio es inflamado por una decadente neo izquierda comunista que pretende, ilusoriamente, levantarse como el socialismo del siglo XXI – auspiciado por el “Foro de Sao Paulo” – y que utiliza convenientemente la careta de “progresistas”.

En ambos casos, afiebrados personajes de izquierda anunciaban y anuncian la extinción de ambas colectividades políticas. Pese a ello, el “Partido Aprista Peruano” llegó a la presidencia de la Asamblea Constituyente con su líder histórico “V.R. Haya de la Torre” y a la presidencia de la República en dos oportunidades con “Alan García Pérez”.

En el segundo caso, el de Fuerza Popular, contra todos los anuncios apocalípticos de los “antis”, el “fujimorismo” llegó a la presidencia con su líder histórico, obtuvo mayoría absoluta en el “Congreso de la República”, su actual lideresa “Keiko Fujimori” ha pasado a segunda vuelta en las tres últimas elecciones y el partido político “Fuerza Popular” se ha erigido hoy en día como la primera fuerza política del país.

Algo que caracteriza a ambas colectividades políticas, es que el “Partido Aprista Peruano” tiene una larga historia de lucha contra el comunismo, desde sus orígenes, allá por los años treinta. Mientras que, en el caso del “fujimorismo”, coincidentemente, su efectividad en el combate contra el comunismo en su más sanguinaria versión, “Sendero Luminoso” y el “MRTA”, radicalizó desde una alicaída izquierda comunista el mismo discurso de odio.

Dos colectividades políticas con una marcada defensa del modelo democrático. Dos fuerzas políticas que se han levantado como el más serio bloque de contención a los avances de la izquierda radical durante las últimas décadas, y una colectividad política de izquierda que, desde sus estertores, continúa utilizando un desgastado discurso comunista de odio.

Así las cosas, aunque les incomode a algunos y atemorice a otros, esta es la realidad y, al parecer, estos sectores de “izquierda reciclada” tendrán que volver a “tragarse el sapo” cuando el “Partido Aprista Peruano” regrese al ruedo y “Keiko Fujimori” vuelva a postular en las próximas elecciones.