Opinión

EL TOUR EUROPEO DEL CINISMO

Por: ALEJANDRO ARESTEGUI (*)

Mentiras: Es lo más lógico y probable que se puede esperar de un político. Sobre todo cuando éste presenta una suerte de patología constante de mentir de una forma cínica y muy repetitiva (mitomanía). En este caso los protagonistas de esta historia han decidido llevar toda su red de mentiras y discursos tendenciosos al otro lado del charco, para exponer en el viejo continente sus sesgadas apreciaciones y comentarios tendenciosos No solamente a partidos políticos que piensan como ellos, sino también a desinformar a cualquier incauto ciudadano europeo que esté dispuesto a escucharlos.

Comencemos por nuestra compatriota Verónika Mendoza. La que hasta hace no mucho era la lideresa de nuevo Perú y referente de la nueva izquierda del siglo XXI, ha sido portada y titular en diferentes medios (sobre todo en los peruanos), debido a sus desmesuradas palabras en un discurso que brindó hace menos de un mes en el grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas del Europarlamento. Mendoza fue miembro del segundo panel denominado “Nuevas voces progresistas marcando la agenda en Europa y América Latina” (rocambolesco título que bien podría llamarse agenda a tratar para cómo dominar políticamente a los países latinoamericanos por varios lustros).

Al parecer la señora Mendoza tiene una visión sesgada y totalmente alterada de la realidad, su estrambótica percepción le hace afirmar de que en el Perú existe un “régimen cívico militar”, adicionando que la presidente Dina Boluarte es “la careta de una coalición autoritaria, conservadora y mafiosa en la que funcionan casi de manera armoniosa una ultraderecha afincada en el Parlamento, aliada con el oligopolio mediático, poder económico, grandes grupos de poder económicos y nuevas mafias además de las FF.AA. y PNP” (este disparatado discurso empleado como un modus operandi por este tipo de políticos podría calzar con cualquier país latinoamericano que no esté gobernado por la izquierda tan solo cambiando el apellido de la actual presidente interina). También acotó que en caso de que se realicen elecciones generales en 2026 (o antes), “nada garantiza que esas próximas elecciones sean libres y democráticas”.

Ante esto tenemos contundentes respuestas por parte de numerosos políticos, periodistas y gente pensante que no necesita ahondar para saber de estos disparates son 1000 propaganda política de izquierda típica de la señora Mendoza, entre las destacadas voces qué se alzaron en contra de las declaraciones de Mendoza tenemos al exviceministro de Relaciones Exteriores del Perú Claudio de la Puente, el cual consideró que las declaraciones de Mendoza están “fuera de la realidad”. En ese sentido, indicó que el gobierno de Boluarte “puede gustar o no, pero es un gobierno legalmente constituido con base en una sucesión constitucional”, “Es una campaña de quienes perdieron cuotas de poder y que apoyaron de manera incondicional un régimen absolutamente corrupto y golpista como el del expresidente Castillo. No sé con qué cara pueden ir a hacer este tipo de denuncias al exterior para desacreditar al país”, concluyó.

El segundo ejemplo lo tenemos con el actual presidente colombiano Gustavo Petro, el cual realizó un discurso en la capital alemana frente a un reducido auditorio perteneciente al think-tank del partido socialdemócrata alemán: La Friedrich-Ebert-Stiftung, en ella el mandatario colombiano dio a relucir todo su odio y resentimiento hacia un determinado grupo político, así como hacia las personas de toda una ciudad y un país. Tan solo días después de haber sido condecorado en el Congreso de los Diputados del gobierno español el mandatario colombiano expresó lo siguiente: “Después de una gran noche neoliberal como la llamamos nosotros, neoconservadora le dicen otros, que por décadas, tres o cuatro décadas, ha dominado al mundo, fundamentalmente a partir precisamente de ese lugar geográfico y del derribo del muro de Berlín, que trajo un debilitamiento formidable y una pérdida entonces de valor de la izquierda” (fijémonos cuidadosamente en las palabras nefastas de este triste intento de estadista, está llamando a la nostalgia de un episodio trágico que enlutó, entristeció y empobreció a miles de alemanes y encima en salsa la nefasta creación del muro de Berlín, completamente deplorable). Pero la historia no termina aquí, el grueso y más abyecto de los comentarios proferidos por Petro recién comienza.

Inmediatamente después de sus primeras frases, Petro denunció haber sido víctima de racismo, discriminación y de afrentas llenas de odio: “Hoy también tenemos una izquierda europea que no sabe exactamente qué hacer y el fascismo sí está avanzando. Lo vi en las calles de Madrid. Lo vi organizarse contra mí, por latinoamericano, por mi piel café con leche, por ser de izquierda”. Estas son palabras mayores, ya que el tema del racismo, la discriminación, la xenofobia y sobre todo el fascismo son temas tabús y que son muy delicados en la sociedad alemana actual, que de alguna u otra forma ha sabido sobrellevar estos oscuros episodios de su historia y que no pueden ser tratados con tanta ligereza por un político extranjero y de un discurso claramente disociador.

Afortunadamente las nefastas palabras del mandatario colombiano fueron totalmente desmentidas gracias a un video ilustrativo grabado por el profesor español Juan Ramón Rallo, el cual analizó detenidamente las declaraciones de Petro, también dedicó tiempo a recabar información, filmaciones y testimonios para confirmar si lo mencionado por el mandatario colombiano era cierto o no; y vaya sorpresa que se llevó. Todo era completamente sesgado y falso. Para empezar “las llamadas oleadas de fascismo que presenció en Madrid, no eran sino menos de un centenar de personas, entre ellas muchas latinoamericanas con banderas de países como Colombia y Perú que se estaban pronunciando enérgicamente en contra de la presencia de Petro en España; y que encima iba a ser condecorado por los grupos parlamentarios socialistas que actualmente presiden en el gobierno peninsular), estas personas inocentes y ciudadanos completamente en su derecho de protesta fueron acusados de ser “violentistas de ultraderecha fascista” y que muchos al ser migrantes ni siquiera pueden ser militantes o votantes de partidos como Vox, precisamente el segundo desaire que recibió Petro y que seguramente le dolió mucho, fue la retirada de este grupo parlamentario derechista en el congreso de diputados, los cuales al ver al nefasto líder colombiano procedieron a retirarse del hemiciclo, lo cual fue un desplante y un desaire pero que no obstante están en su legítimo derecho de objeción de conciencia. Sin embargo, vemos la coincidencia de los discursos de Mendoza y Petro, quienes no dudan en acusar a partidos como Vox de fascistas. La magistral cerrada de boca por parte de uno de los parlamentarios de Vox fue magistral, ya que él, así como todos los ciudadanos que estaban protestando afuera del hemiciclo estaban expresando de una manera alterada y educada el descontento con la presencia de alguien que avala la dictadura chavista de Venezuela y que pretende extender la idea socialista por toda América latina, tachando de extremista, neoliberal, ultraconservador e incluso fascista a todo aquel que no comparte sus ideas políticas y es aquí donde el profesor Rallo se pregunta ¿cómo puede Petro acusar a los ciudadanos que protestaban y al grupo parlamentario de Vox ser xenófobos y racistas si aquellas gentes que protestaban eran en su mayoría latinoamericanos residentes en España y abiertamente el grupo parlamentario Vox está en constante comunicación con líderes de partidos latinoamericanos con el fin de unir a Iberoamérica en contra de las nefastas ideas de la izquierda más rancia y radical? Pues la respuesta es un categórico no. Petro no sufrió ataques racistas ni xenófobos, ni mucho menos pudo ser testigo de la expansión del “fascismo” en las calles de Madrid.

De lo extraído de la propia boca de ambos políticos sudamericanos, llegamos a la conclusión de que estos sujetos además de tener pretensiones nefastas y unas declaraciones verdaderamente impresentables, son en gran parte culpables de la mala imagen que se está publicitando a nuestros países en toda Europa, no solamente de nuestro gobiernos, sino de mucha gente que actualmente reside en Europa y tuvo que escapar por mera necesidad económica, ya que los gobiernos anteriores (incluyendo a muchos de la nueva izquierda) han causado un profundo deterioro de las instituciones unas políticas nefastas que han causado una crisis económica que obliga a muchos a emigrar buscando mayores oportunidades. También podemos observar como moraleja que la izquierda se comporta de la misma forma en todas partes del mundo; y aunque en Europa la izquierda abrace la bandera de la moderación y de la sensatez, es capaz de avalar los discursos más radicales de líderes de otras partes del mundo e incluso pueden apoyar financiando campañas electorales y movimientos políticos del corte más ligado al castrochavismo que a una socialdemocracia moderada. Felizmente estimados lectores, podemos estar en presencia del decaimiento y destrona acción de la izquierda del poder, tanto en España como en Alemania, pues aún en estos países desarrollados sus nefastas políticas los están llevando a ganarse el descontento de la población y que estas terminen eligiendo los comicios a otras opciones con visiones completamente distintas dentro de sus marcos locales e internacionales.

(*) Publicado en el Montonero

(www.elmontonero.pe)