PREVENCIÓN
El mes de agosto que se avecina será clave y crucial en el inicio de las obras de prevención para el Fenómeno de El Niño Global. Las transferencias ya se han realizado por parte del gobierno central y se ha informado con muchos detalles que, tanto la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y la Autoridad de Reconstrucción con Cambios (ARCC), harán los respectivos trabajos en la zona norte y centro de la costa peruana y; en lo que respecta a nosotros, esas entidades han señalado que se ocuparán de los ríos Lacramarca, Casma y Huarmey. Además, los municipios han recibido también presupuestos para este tipo de trabajos y al referirnos a municipios, nos referimos a todos sin excepciones. También debemos agregar al gobierno regional, que tiene para este rubro presupuestos considerables y en el caso nuestro, el gobierno regional tiene a la subregión Pacífico como la entidad ejecutora para empezar los trabajos, en nuestra zona. Este mes de agosto, que empieza el martes, debe marcar el inicio de un proceso de todos los trabajos destinados para la prevención como la descolmatación de los ríos y sus respectivas defensas, de tal manera que, en tres meses, deben quedar listos antes del inicio de las épocas de las lluvias.
VALLE DE NEPEÑA
No debemos olvidar que existe un pedido por parte de los alcaldes de los distritos que se encuentran en la cuenca del Valle de Nepeña, es decir, Moro; Jimbe; Nepeña y Samanco, cuyos alcaldes acudieron al mismo despacho presidencial en busca que incluyan al río de Nepeña dentro de estos trabajos de prevención de los organismos antes citados, es decir, ANA y ARCC o en todo caso del Ministerio de Agricultura. La respuesta que recibieron fue que tenían que tener los proyectos listos y presentados en el ministerio respectivo y que después volvieran a Palacio. Lo cierto es que estos municipios necesitan ese apoyo técnico y esperemos que lo hayan conseguido para que, en algún momento de los primeros quince días de agosto, retornen a Palacio de Gobierno. De acuerdo a los antecedentes de Niño Costero del 2017 y el Ciclón Yaku, las unidades ejecutoras, para realizar los trabajos en el río Nepeña, deben ser la Subregión Pacífico y la Municipalidad Provincial del Santa; es ahí donde los alcaldes deben incidir en estos días para conseguir que los trabajos se puedan realizar en los próximos cuatro meses. Recurrir a otras instancias, será como pedir peras al olmo.
TIEMPO NO PERDONA
No debemos olvidar que el tiempo es el peor enemigo porque avanza y no se detiene; mientras que las reparticiones públicas, el tiempo parece haberse detenido, pues los trámites caminan a paso de tortuga. En este sentido, respecto a los trabajos de prevención para el Fenómeno de El Niño Global, tienen que haberse empezado y como se trata de una emergencia nacional, cuentan con sus propias normas y que les va a permitir agilizar los trámites, pues el tiempo lo amerita. Es más, la Contraloría estará vigilante de todo lo que suceda en este periodo de emergencia. Se debe recordar que el gobierno ha transferido recursos económicos para todas aquellas zonas, donde va a incidir con mucha fuerza el Fenómeno de El Niño Global. Se ha informado que, tanto subregión Pacífico y la MPS, coordinan para estos trabajos, pero será ideal que también se sume a estas coordinaciones entidades como el ANA y ARCC, que tienen presupuestos para los ríos de la costa como: Lacramarca, Casma y Huarmey.
OLVIDADOS
No se debe olvidar, ahora que se planifica, la prevención para las emergencias, lo sucedido en determinadas zonas cuando pasó el Ciclón Yaku. Por ejemplo, en el mes de marzo cuando comenzaron las lluvias, se afectó la carretera que va hasta Santa Rosa Paquirca. Han pasado tres meses y medio, quizás cuatro y, recién la subregión Pacífico informó que llegaba con maquinaria pesada para que esos pueblos vuelvan a la normalidad, limpiando las trochas carrozables que estaban interrumpidas en aquella oportunidad. Los pobladores, para llegar a su destino, tenían que caminar. Es decir, han tenido que pasar aproximadamente cuatro meses para que el Estado se haga presente en esos lugares. Estamos refiriéndonos a pueblos cercanos a nosotros, dentro de nuestra provincia, dentro de nuestra jurisdicción. Lo cierto es que hay dinero, lo que no existe es capacidad para gestionar. En Macate hay pueblos que están olvidados por el Estado y lógicamente tienen razones para hacer sentir su protesta. El Ciclón Yaku pasó y recién en el mes de julio ellos han sentido que llegó la maquinaria para abrir el camino nuevamente y ha sido la propia subregión Pacifico la que ha informado sobre este accionar, incluso en estas páginas comentamos en el mes de mayo sobre este aislamiento de esos pueblos, alejados del distrito de Macate. Acá debemos recordar que ese municipio distrital de Macate es un tanto de la desesperanza, porque en inversión pública, recordemos que en seis meses no había invertido ni un sol. El alcalde, el gerente municipal y el gerente de infraestructura de ese municipio son un cero a la izquierda. Es triste, pero es la realidad.