Editorial

TENEMOS BUEN FÚTBOL PERO NO BUEN ESTADIO

Ironías del deporte:

Ironías del deporte chimbotano. Como resultado de una excelente y grata performance, el Club Deportivo Municipal  de Villa María ganó la etapa provincial de la Copa  Perú, adjudicándose por tanto la representación de la provincia del Santa en la etapa Departamental de este tradicional certamen deportivo.

Pero no todo ha sido motivo de alegría. El equipo representativo de la provincia del Santa tendrá que jugar sus partidos como local en el estadio San Pedro, un escenario sobre el cual recaen serias y  fundadas observaciones  respecto a un factor fundamental y sumamente delicado como es la seguridad. Luego de una minuciosa inspección al entorno de este escenario deportivo, el Sistema Nacional de Defensa Civil ha concluido que la presencia de un talud de arena a escasos metros del estadio, representa un alto riesgo para el público asistente.

La inminencia de este riesgo es de pleno conocimiento, tanto de las autoridades municipales como deportivas. Sin embargo éstas se han visto en la obligación de utilizar este escenario por la sencilla razón que, tanto en Chimbote como en Nuevo Chimbote, no existe por ahora otro estadio que reúna las condiciones reglamentarias para eventos de este nivel competitivo. Así de simple.

Cierto. El estado en el cual se encuentra el estadio Centenario Manuel Rivera Sánchez, llamado a ser la sede oficial de esta etapa departamental, en este momento es un desastre. A tan solo dieciséis años de su inauguración y puesta en servicio, el campo de gras artificial y el alambrado perimétrico, ya no existen. En el centro de lo que fue el gramado, ahora ha quedado una construcción de material noble abandonada. La rehabilitación de las tribunas y la construcción de más palcos, es una obra que no se termina pues no ha sido entregada aún.

Pero, no  solamente es el Estadio Centenario lo que le hace falta al fútbol de Chimbote y la provincia del Santa, sino la falta de otros escenarios deportivos para el deporte oficial.  De alguna manera, también se hace alusión al estadio Manuel Gómez Arellano, ahora convertido en una parada de comerciantes informales y, en la misma medida, hace falta el estadio  El Polvorín, cuya construcción quedo en palabras y más palabras, por la anterior gestión municipal y la actual hasta ahora no se ha pronunciado al respecto.

En nuevo Chimbote el único escenario para el fútbol como es el estadio César Cueto Villa en el Polideportivo de Bruces está siendo rehabilitado por el Municipio local y se espera en el tiempo que quede en condiciones de ser utilizado.

Mientras que las autoridades municipales y deportivas no se preocupen en atender esta necesidad, los equipos de fútbol que representen a la provincia del Santa, como es el caso del Club Deportivo Municipal,  no van a poder  ejercer a plenitud su condición de local y, lo que es peor, no van a contar con el aliento pleno de su hinchada. ¿De qué vale que tangamos fútbol, si no tenemos un buen estadio?.