Opinión

Al cierre de 2023, ¿cómo se está enfrentando la inseguridad ciudadana? (*)

Como expusimos en el Semanario 1175, la inseguridad ciudadana en el Perú se ha convertido en un asunto de preocupación constante. Las cifras alarmantes de delitos, la sensación de vulnerabilidad en comunidades urbanas y rurales, así como la constante presencia de actos delictivos en el día a día, generan un clima de incertidumbre en la sociedad. Los ciudadanos enfrentan diariamente el temor a ser víctimas de robos, asaltos o violencia, lo que impacta no solo en su seguridad física, sino también en su bienestar emocional y su calidad de vida.

En los últimos diez años, según cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), más del 80% de la población vive con una constante percepción de inseguridad, la cual se define como la sensación de estar en riesgo de sufrir algún acto delictivo o situación que ponga en peligro su seguridad, bienestar físico o moral, afecte sus derechos y la ponga en una posición vulnerable, expuesta a daños o riesgos. Dicho contexto evidencia la urgente necesidad de medidas efectivas que garanticen la protección y tranquilidad de todos los habitantes, y promuevan un ambiente seguro y pacífico para el desarrollo integral del país.

En esa línea, en 2018, el Ministerio del Interior (Mininter) presentó el Plan Nacional de Seguridad Ciudadana 2019-2023 con el objetivo de orientar la implementación de políticas públicas para fortalecer la seguridad nacional. El plan estableció territorios de intervención prioritaria en donde se buscó aumentar el patrullaje policial, el fortalecimiento de las entidades policiales y la implementación de equipos policiales. En ese marco, se establecieron objetivos estratégicos alrededor de indicadores de seguridad ciudadana, como la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes, el porcentaje de población víctima de robo y la tasa de muertes por accidentes de tránsito por cada 100,000 habitantes.

Sin embargo, existe una diferencia marcada entre la línea base de algunos indicadores y las metas consideradas en el plan. Si este busca reducciones constantes en variables como el porcentaje de la población que es víctima de robos, el verdadero valor se comporta con subidas y bajadas que dependen más de la coyuntura del país que de verdaderas mejoras en la seguridad. Esta diferencia entre la realidad y el seguimiento de los indicadores propuestos muestra la necesidad de una evaluación más rigurosa y contextualizada de los avances en seguridad ciudadana, a fin de comprender con precisión la efectividad de las políticas implementadas.

No obstante, incluso con avances en algunos indicadores, la realidad es que la inseguridad persiste, por lo que también se deben reevaluar las estrategias implementadas y pensar en algún “giro”. Por ejemplo, uno de los grandes proyectos que el Mininter ha implementado desde 2020 es el Mejoramiento de los servicios de prevención del delito en la población más vulnerable al crimen y la violencia en el Perú, el cual se ejecuta en colaboración con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este proyecto se desarrolla en los 103 distritos que presentan la mayor concentración de crimen y violencia del Perú. Asimismo, cuenta con tres componentes: i) mejorar la efectividad policial en la prevención del delito, ii) mejorar la efectividad de la inteligencia policial y iii) mejorar la prevención comunitaria. La meta es elevar la eficiencia de los servicios de prevención del delito proporcionados por el Mininter a la población urbana más expuesta a la delincuencia y la violencia. Asimismo, se enmarca en la Estrategia Multisectorial Barrio Seguro, la cual se caracteriza por su enfoque preventivo, su alcance multisectorial y su atención específica a áreas vulnerables.

En los últimos años, el proyecto logró que la Escuela de Formación Continua de la Policía Nacional del Perú (PNP) cuente con equipos informáticos, se implementen computadoras en las Escuelas Superiores Técnicos Profesionales de la PNP, se complete la adquisición de drones para las fuerzas policiales y que los efectivos de la Dirección de Inteligencia de la PNP (DIRIN PNP) puedan realizar pasantías en el Cuartel General del FBI. Sin embargo, en materia de ejecución presupuestal, el proyecto tuvo complicaciones en su arranque en 2020, debido a la crisis sanitaria y, en lo que va de 2023, solo se ha ejecutado alrededor de la mitad del presupuesto asignado.

El proyecto es importante en dos aspectos esenciales: recopila datos vitales para la unificación de políticas en el Mininter y fortalece a una policía capacitada en el enfoque comunitario[1]. Esta capacitación es esencial para mejorar la relación entre la fuerza policial y la comunidad. Además, al establecer un sistema de información eficiente, se sienta la base para una mejora considerable en la seguridad ciudadana.

Este tipo de estrategias han resultado efectivas en nuestros países vecinos, como Colombia. Según el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, el enfoque comunitario desarrollado en la policía colombiana logró reducir en un 22% la incidencia de homicidios, los robos en viviendas y las peleas callejeras. Esto se debe a que los policías se sentían más identificados con la situación de la comunidad bajo su jurisdicción. Asimismo, según el Centre for Economic Performance de la London School of Economics, las mejoras en la información e investigación de las fuerzas policías pueden reducir el número de robos en un 5%.

La inseguridad persistente en el Perú demanda una revisión de estrategias efectivas. El proyecto de prevención del delito y fortalecimiento policial es prometedor, pero una evaluación constante es crucial para garantizar una mayor ejecución que resulte, finalmente, en una mayor seguridad. Se necesita un enfoque continuo y comunitario que proporcione un entorno más protegido para todos los ciudadanos, las familias y las empresas.

[1] El enfoque comunitario se centra en incorporar a los miembros de la comunidad en las intervenciones sociales para lograr la identificación con el funcionamiento de los proyectos y la participación en las medidas de intervención.

(*) Comexperu / Publicado en Diciembre 15, 2023 / Semanario 1190