BANQUILLO
La llegada del Premier Fernando Zavala fue oportuna en la medida que las desgracias arrecian en todo el país y era imprescindible que se disponga de recursos y ayuda para mucha gente que ha sido afectada por los desbordes y las lluvias, otros que habían quedado atrapados entre los bloqueos de la carretera y muchas familias que comienzan a padecer las consecuencias de la escasez. Pero lo más importante de su llegada es el hecho que los pueblos de Ancash se habían quedado sin autoridad, el gobierno regional ha demostrado una vez mas que es una lagrima, una tremenda decepción, todos los ofrecimientos de su titular, el chef Enrique Vargas Barrenechea, cayeron en saco roto y los alcaldes virtualmente ya no sabían que hacer porque su logística representaba una nulidad ante la dimensión que adquiría la emergencia. Pero lo más grave es que mientras las principales autoridades se enterraban en medio del lodo tratando de ayudar a los damnificados, mientras recibían al Premier y lo acompañaban en la inspección de los pueblos afectados, el Gobernador regional apareció en el banquillo de los acusados del Juzgado Penal Unipersonal de Huaraz, respondiendo los cargos formulados por el Ministerio Público por delito contra la Fe Publica en la modalidad de falsedad genérica al haber mentido en su hoja de vida que presentó al postular a la vice gobernación de Ancash señalando que había estudiado en un prestigioso centro de gastronomía de Chile cuando por esos lares no existe dicha institución. Lo delicado de todo este asunto es que el gobernador regional debió presentarse obligado por las circunstancias pues pese al cargo y la investidura que ostenta permitió que el Juez a cargo de este proceso expida una orden de contumacia y ordenó su captura para ponerlo a disposición del Juzgado, como si se tratara de uno de los tantos delincuentes que rehúyen a la justicia en nuestro país. Seguramente se podrá alegar que debido a la alta carga de trabajo el Gobernador no puede estar atento a las notificaciones que le hacen llegar, sin embargo, para eso tiene asesores, para eso cuenta con abogados que están a cargo de este juicio y deben haberle advertido que no presentarse al mismo le generaría serias consecuencias como una orden de captura. Es una pena que mientras Ancash se destruye por efecto de los fenómenos de la naturaleza, la máxima autoridad que debería estar al frente de los trabajos de ayuda y asistencia se encuentre en un banquillo de los acusados. Ni al más imaginativo escritor se le pudo ocurrir una trama de este tipo para una novela.
CHISMOSO
Ha sido necesaria la reacción del Director Regional de Trabajo y sus principales funcionarios ante las denuncias públicas y ligeras que hizo el congresista Ricardo Narváez Soto, endilgando hasta calificativos agraviantes para quienes dirigen esta importante dependencia pública. Ello porque el congresista, amparado en su inmunidad parlamentaria, acusó supuestos hechos de corrupción sin formular precisiones de ninguna clase, señaló de supuestos trabajadores fantasmas y otras denuncias que, todo indica, las recibió de alguna persona que tiene interés en descalificar a los funcionarios de turno pero sin investigar absolutamente nada. Por ello es que con documentos en manos y con pruebas, el Director desmintió al congresista y le pidió que antes de lanzar denuncias de manera temeraria por lo menos pregunte a los funcionarios cuan ciertas son ellas. Al parecer, el congresista recibió algunas denuncias y de inmediato las tomó como ciertas, lanzando públicamente cargos que ni siquiera había verificado, lo cual es irresponsable en la medida que un parlamentario cuenta con asesores que fácilmente pueden darse el trabajo de corroborarlas. Sino lo hace el legislador queda como las viejitas que salen al parque para estirarse pero que en realidad lo único que buscan es intercambiar chismes con la vecina.
EMERGENCIA
El consejero regional de la provincia del Santa Luis Gamarra Alor se sorprendió cuando escuchó al Gobernador Regional que estaban trabajando para declarar en emergencia del hospital Regional de Chimbote, cuando el hospital que necesita atención es La caleta cuyo proyecto de rehabilitación se mantiene estancado por culpa de la Región. Justamente, la semana pasada, el Director del hospital regional, Dr. Luis Johhanson Arias, al ser interrogado por la prensa, confirmó que en este nosocomio nadie había solicitado que lo declaren en emergencia, cierto es que tiene algunas necesidades como toda entidad pública pero nadie ha formulado un pedido de esas características porque no corresponde. Esto quiere decir que el Gobernador Enrique Vargas es muy audaz, crea esta clase de situaciones para desviar la atención sobre otros casos que sí requieren la atención de su despacho como el hospital La caleta y la propia emergencia que demandaban los alcaldes. Al parecer el Chef también sabe hacer psicosociales al más puro estilo montesinista de los 90.