DONACIONES
La alcaldesa provincial Victoria Espinoza ha puesto el dedo en la llaga al cuestionar que el gobierno regional no ha dado cuenta al Centro de Operaciones de Emergencia de la ayuda humanitaria que ha entregado a damnificados de la provincia del Santa, hecho que habría dado lugar a que la entrega de las donaciones se dupliquen. En realidad el tema del manejo de las donaciones es muy delicado, cuando no se hace conforme a ley, sino que se usa y aprovecha del mismo generan responsabilidades penales gravísimas. Ayer mismo los portales de Huaraz daban cuenta de las denuncias en redes sociales que advierten del mal uso de las donaciones por parte del gobernador regional de Ancash, quien habría dejado parte de la ayuda para los damnificados en manos de su entorno político con la finalidad que lo distribuyan en los sectores marginales y de esta manera consoliden una portátil de apoyo a su persona el próximo lunes 10 cuando tenga que concurrir a una nueva audiencia del juicio oral en el que está incurso por haber mentido en su hoja de vida señalando haber realizado estudios superiores de gastronomía en Chile cuando el Instituto que indica no existe. De acuerdo a las denuncias en Huaraz, se trataría de salir al frente de la marcha que ha convocado el comité cívico anticorrupción para esa fecha. No sabemos qué es lo que tiene que ver la ayuda para los damnificados con los problemas judiciales que tiene el gobernador regional, empero, si lo que dicen es cierto debe intervenir el Ministerio Público, como lo ha hecho en Ocros, en el distrito de San Cristóbal de Raján donde han incautado vivires, agua y herramientas destinada a los damnificados que se ocultaba en una vivienda. La fiscalía tiene que poner mano dura porque no solo se trata de un acto de aprovechamiento de las donaciones para sectores afectados, sino de un miserable atentado contra las necesidades de tanta gente que lo ha perdido todo ante la furia de la naturaleza. Es momento de poner mano dura.
PRESUPUESTO
Como ha ocurrido en Nuevo Chimbote, el Municipio Provincial ha debido intervenir en la fumigación de los colegios públicos ad portas de reiniciarse las labores escolares tras las lluvias y desbordes. La alcaldesa ha debido gestionar la presencia del Grupo Silvestre que es una organización altruista de Lima, pero lo extraño es que las redes de salud no hagan esta tarea cuando tienen el presupuesto reservado para ello. Esto lo ha señalado ayer el ex director de la Red Pacifico Norte, Johnny Cano Suarez, precisando que en el presupuesto de apertura que se les asigna a todas las redes se incluye un presupuesto para hacer frente a esta clase de enfermedades propias del verano. Entonces la pregunta que se cae de madura es ¿si las redes de salud tienen este presupuesto porque no hacen nada y esperan que otras entidades como los municipios realicen esta tarea? Lamentablemente. En las entidades públicas suelen tomar los rubros que generalmente no se utilizan para cubrir otros forados. Mucho cuidado con eso porque es malversación.
VIDA PRIVADA
El Director de la UGEL Santa, Robert Iturria Huamán se mostró sumamente contrariado ayer por un comentario aparecido el ultimo lunes en esta misma columna, en el cual se da cuenta de la extenuante jornada que había cumplido el pasado sábado con los directores de los colegios particulares y su necesario relajamiento en un establecimiento de comida china de la avenida pacífico al cual llegó con una secretaria de la misma entidad. El director no recusa el relato, no lo desmiente, lo que rechaza es que se metan en la vida privada, incluso, está dispuesto a presentar una denuncia por ello. Lamentablemente, nuestro aparato estatal está tan mal porque llegan a puestos de vanguardia esta clase de profesionales que no tiene la más mínima idea de lo que implica un cargo público. Pero habría que decirle al Director de la UGEL, por si no lo sabe, que un funcionario público no tiene vida privada, el hecho de no hallarse en su oficina no deja de ser un funcionario y cualquier acto que realice está sujeto al comentario público, esto lo ha establecido la propia jurisprudencia. Para que tenga una idea mas precisa, habría que recordarle que la prensa de los Estados Unidos describió con pelos y señales las encerronas del ex presidente Bill Clinton con una practicante de la Casa Blanca, aquellos entuertos en la Sala Oval, inclusive hasta describieron las manchas en la ropa de la muchacha, y, en esa oportunidad nadie se atrevió a cuestionar que se trata de su vida privada. Si los encuentros del ex presidente con la practicante se hubieran realizado en cualquier otro lugar, igualmente la prensa tenía derecho a difundirlo porque se trata del primer funcionario público de un país y su exposición pública es similar a la del empleado público del más bajo nivel. Más claro ni el agua.