El día de ayer martes se ha puesto en marcha la maquinaria judicial para someter a juicio oral a los acusados por el alevoso crimen del ex consejero regional Ezequiel Nolasco Campos, hecho ocurrido el 14 de marzo del 2014 den el interior de un restaurante de la localidad de Huacho, donde el occiso y sus acompañantes se habían detenido a merendar durante un viaje de retorno de la capital de la república a Chimbote.
Obviamente, todos los ojos de los ancashinos se encuentran concentrados en este proceso penal en el que se investiga y se busca sancionar a losa autores mediatos e inmediatos de uno de los crímenes políticos que cambió el rumbo de la historia de nuestra región y representó lo que en el parlamento Nacional se calificó como la red de corrupción de Ancash, sin embargo, a solo una semana de ponerse en marcha este juicio público, Fiorella Nolasco Blas, la hija del asesinado ex consejero regional, quien se encuentra apersonada en este proceso como parte civil, ha denunciado públicamente las amenazas de muerte que viene recibiendo uno de los colaboradores eficaces que tiene este proceso penal y es uno de los principales sostenes de la imputación que se ha formulado contra el ex presidente regional César Álvarez Aguilar y contra ex funcionarios de su entorno y sicarios que, en su momento, reconocieron plenamente la autoría de los hechos.
La hija del fallecido ex consejero no ha ocultado su preocupación por estas amenazas que buscan alejar al colaborador de la secuela de este proceso, que tratan de influenciar en su participación y el fortalecimiento de evidencias con la finalidad que no concurra mas a este juicio y de esta manera los magistrados puedan desestimar esta prueba que, por su propia naturaleza, tiene una especial relevancia en el proceso penal.
Los temores de la joven son realmente fundados en la medida que no es el primer caso en el que un testigo sea público o en reserva o una persona que está en condiciones de corroborar la responsabilidad de un procesado en delitos de homicidio, reciben amenazas de muerte y trata de amedrentarlos con la finalidad no solo que se aparre del proceso sino para que se retracte y cambie la versión que ha proporcionado ante las mismas autoridades policiales y judiciales.
Por ello es que ha demandado que la Unidad especializada del Ministerio Público en el tratamiento de los colaboradores eficaces, extremen las medidas de seguridad y protejan a esta persona para los efectos que de una buena vez deje de primar la impunidad ante los delitos de violencia política en nuestro país.
Frente a ello, la abogada del ex presidente regional, principal acusado de este proceso, ha restado importancia a las revelaciones de la joven agraviada en este proceso y ha señalado que si es que cuenta con alguna evidencia de estas amenazas que las haga llegar a la fiscalía Provincial de turno pues es esa la instancia a la que corresponde investigar hechos de esta naturaleza y bien podrían levantar el secreto de las comunicaciones para establecer de donde salen esas supuestas llamadas amenazantes.
Por ello es que la defensora no ha tenido reparos en repetir una y otra vez a lo largo de estos tres años de pesquisas que su patrocinado es inocente, que no existen pruebas que lo incriminen y, curiosamente, ha restado importancia a los testimonios de colaboradores eficaces que forman parte del sustento acusatorio del representante del Ministerio Público.
La referida abogada no ha tenido reparos en calificar como “colaboradores truchos” a quienes han decidido entregar pruebas y evidencias de la comisión del delito y que involucran directamente a su patrocinado, una actitud hostil que se concilia con las presiones que ahora se han acentuado contra estos colaboradores y que se traducen en cobardes amenazas anónimas por la vía telefónica contra la integridad de cada uno de ellos.
La abogada ha señalado muy suelta de huesos que los sicarios que en su momento sindicaron César Álvarez como la persona que autorizó el atentado criminal contra Nolasco se han retractado y han desmentido a través de escritos y documentos hechos llegar al Juez respecto a esta grave imputación.
Seguramente eso es cierto pues tiene el mismo sesgo descalificador que se pretende con los colaboradores eficaces y decimos ello porque todo el país ha seguido por las imágenes de la televisión la descarnada confesión del joven asesino Christian Pereda Cruzate (a) “Colombiano” cuando la Policía lo detuvo a pocas semanas de perpetrado el crimen en la localidad de Huacho.
La abogada olvida que fue gracias a ese testimonio que se pudo develar el misterio del este sonado crimen, el sicario describió con asombrosa coincidencias los desplazamientos que hizo, la manera como mató al ex consejero regional, señaló a cuantos lo acompañaban en la mesa y la forma como pudo huir de la escena del crimen.
De la misma manera describió como se concibió este atentado criminal, fue este sic ario quien puso en conocimiento de la Policía que el alevoso asesinato fue producto de una lamentable coincidencia, cuando se encontraban en Huacho al mando del “Chino Malca”, un conocido hampón de nuest4ra ciudad, con la finalidad de realizar “un trabajo” de asesinar a potreas personas y se toparon con el agraviado Nolasco Campos.
Fue el “Chino Malca” quien reconoció a Nolasco y llamó a Rubén Moreno Olivo (a) Goro para preguntarle si la cabeza de Nolasco seguía con recompensa y que si les interesaba aun su eliminación porque lo tenía en la mira y con los sicarios a la orden.
¿Cómo podría saber todo esto un asesino por encargo que no es de Chimbote y que en su vida habría escuchado nombres como de Nolasco, Álvarez y Goro? ¿Cómo podría haber descrito el criminal con tanta precisión la manera cómo ocurrieron los hechos? ‘¿Cómo podría coincidir tanto el relato de un desconocido con la realidad de nuestra región y las intenciones de los enemigos políticos del fallecido consejero regional?
La respuesta es evidente, detrás de este atentado estuvo la confabulación de todo un aparato criminal que suele actuar de esta manera asesinando y amenazando a quienes se colocan en su camino. Si esto no fuera así, si es que es cierto lo que dice la abogada de César Álvarez en el sentido que nada tienen que ver, entonces cual es el temor de la mafia, porque tratan de diezmar la intervención del colaborador eficaz. No hay que se run intonso para no comprender algo que está realmente claro.