INFORME – IPE:
Según el reporte “Victimización en el Perú 2017” publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INEI), Áncash fue la región con mayor reducción de la tasa de victimización. Asimismo, el número de hechos delictivos con armas de fuego también cayó el último año. Estas mejoras repercutieron en una notable mejora de la percepción de inseguridad. En este contexto, resulta relevante analizar la evolución de los indicadores de seguridad ciudadana en la región.
Victimización y homicidios
El porcentaje de población víctima de algún hecho delictivo pasó de 31.4% en el 2016 a 23% en el 2017, lo cual significa una reducción de 8.4 puntos porcentuales (pp.). Este resultado es el mayor entre las 24 regiones y ampliamente superior al promedio nacional (-2.4 p.p.). Buen parte de esta mejora se explica por la mejora del indicador en Chimbote. La tasa de victimización se redujo en 6 pp., al pasar de 31.6% en 2016 a 25.6% en el 2017.
Por su parte, la tasa de homicidios en la región cayó ligeramente de 7.6 por cada 100 mil habitantes en el 2015 a 7.4 en el 2016. Pese a la mejora, Áncash aún no logra alcanzar el nivel alcanzado en 2011 (5.7 homicidios por cada 100 mil habitantes). Nuevamente, esta mejora concuerda con la disminución del indicador en Chimbote: de 7.6% en el 2016 a 6.4% en el 2017.
Adicionalmente, el porcentaje de víctimas de algún delito cometido con armas de fuego también se redujo ligeramente de 5.8% en el 2016 a 5.0% en el 2017. Estas cifras colocan a la región por debajo del promedio nacional del 2017 (9.2%), que registró un incremento respecto al año anterior (8.9%).
Comisarías y efectivos policiales
El estado de las comisarías mejoró significativamente durante el último año. Para el año 2017, el 77.4% de las contaban con los servicios básicos adecuados. Ello resulta una mejora de 16.4 p.p. respecto al 2016 (61%). Dicho incremento contrasta con los resultados de los cuatro años previos, en los que, en promedio, dicho indicador promedio 60.5%. Con esto, Áncash es la quinta región con mayor porcentaje de comisarias con servicios básicos.
Las mejoras en la infraestructura de las comisarías, sin embargo, no ha sido acompañada con el incremento de efectivos policiales. Según cifras del INEI para el 2016, cada policía de Áncash debe resguardar a 607 habitantes. En 2015, en tanto, cada efectivo debía atender a 599 ancashinos. De esta manera, la región se mantiene por debajo del promedio nacional (755 habitantes por cada policía) y del óptimo recomendado por la Oficina para Drogas y el Delito de Organización de las Naciones Unidas (333 habitantes por cada policía).
Percepción
En línea con los recientes resultados, la percepción de la inseguridad ciudadana, aproximada a partir de aquellos que creen que podrían ser víctimas de algún hecho delictivo en los próximos doce meses posteriores a la entrevista, se ha reducido sustancialmente. Así, Ancash es la región con menor índice de percepción de inseguridad. Dicho indicador pasó de ser 74.3% en el 2016 a ser 64% en el 2017. Como resultado, Áncash fue la tercera región que más redujo su percepción de inseguridad y solo fue superada por Ayacucho (-11.4 p.p.) y Apurímac (-12 p.p.).