PRECEDENTE
En la lucha contra la delincuencia se debe echar mano a todos los recursos, y, cuando se trata de la Policía los mecanismos son de enfrentamiento porque deben perseguir a avezados delincuentes que no escatiman en hacer uso de las armas para conseguir sus protervos objetivos. En ese trance, el año 2010, el coronel ® Elidio Espinoza debió hacer frente a una escalada de crimenes en la ciudad de Trujillo, en donde existen zonas liberadas por la delincuencia como Florencia de Mora, El Porvenir y otros. Así como la delincuencia generó muchos muertos, la Policía llegó a abatir a varios maleantes y esto es parte del doloroso saldo que se debería asumir para frenar a una delincuencia que no se detiene ante nada. Por ello sorprendió sobremanera que la justicia de Trujillo iniciara una investigación judicial al mentado coronel y nueve oficiales de la Policía de Trujillo por la muerte de cuatro delincuentes. Si es que los Policías van a tener que afrontar juicios por cumplir su labor, entonces nadie querrá asumir ese reto, por ello se entiende que el ex oficial, quien fuera jefe de la División Policial de Chimbote el año 2011, haya sido absuelto hasta en tres oportunidades de los cargos que se formularon en su contra. Sin embargo, las instancias superiores se empreñaron en anular esos fallos y han conseguido que una sala Penal de La Libertad, haya condenado a 30 años de prisión a Elidio Espinoza, un hecho que nos sorprende y nos desalienta a todos. Es poner en jaque a la lucha contra la delincuencia organizada, cierto es que no sabemos que pruebas pueden haber llevado a los magistrados a tomar esta decisión, sin embargo, se espera que la instancia superior deje sin efecto este fallo porque compromete la seguridad de la sociedad.
DESIDIA
Muladar en pleno corazón de Nuevo Chimbote.
El muladar que se aprecia en la fotografía no es un botadero de la zona periférica de Chimbote y menos un asentamiento humano al que no llegan usualmente los carros recolectores de basura. Se trata nada más y nada menos que del corazón de la capital del distrito, es decir, de la urbanización Buenos Aires, en donde la desidia de las personas y la delincuencial costumbre de los recicladores, han convertido el lado lateral del Colegio “Inmaculado Corazón” en un verdadero muladar. Tal como se aprecia en la imagen, hay inescrupulosos que han comenzado a utilizar esta franja como un botadero de basura. Si hasta han arrojado un colchón, ya se imaginarán de qué son capaces de arrojar en una zona urbanizada. Lo curioso es que en la gestión anterior de Valentín Fernández, la Municipalidad de Nuevo Chimbote desalojó los juegos y áreas verdes que había levantado allí el colegio “Inmaculado Corazón” pues se trataba de un área pública y ellos se encargarían de ejecutar un boulevard. Pero no hicieron nada, la franja quedó convertida en un arenal en donde los recicladores no solo lo han convertido en un botadero sino que por las noches se reúnen jovenzuelos a libar licor. El área de limpieza de la municipalidad de Nuevo Chimbote debería indicar, por lo menos, a los servidores de limpieza que se lleven los restos que allí arrojan los irresponsables.
CHACAL
Otro de los que no pudo sostener una evasión de las autoridades judiciales que habían ordenado su captura es uno de los llamados “Chacales del Desierto”, la mafia esa que se lucró con los terrenos de los asentamientos de Nuevo Chimbote. Se trata de Marcos Morales Matienzo, un sujeto que estaba incluido en la lista de los delincuentes más buscados del país y que tuvo su delator cuando se ocultaba ni más ni menos que en el A.H. 10 de setiembre. Morales ya no toleraba el encierro voluntario dentro de una vivienda y decidió salir a estirar las piernas, fue entonces que lo reconocieron y un delator se opuso en contacto con la Policía a la que informó que el sujeto estaba en la manzana Ñ del citado asentamiento y proporcionó las características de su vestimenta. La Policía se movilizó rápidamente y encontró al sujeto confundido entre otros transeúntes, por lo que lo capturó y lo ha enviado al Penal de Cambio Puente en donde permanecerá los próximos 36 meses que le dictaron de prisión preventiva. Con este desenlace, el capturado se reunió con su padre Manuel Morales del Aguila y su hermano Miguel Ángel Morales Matienzo que están detenidos por este mismo caso. Morales del Águila es quien se ufanaba de ser Presidente de la comunidad Indígena y en nombre de ella se quedó con muchos terrenos que los vendió al mejor postor. Ahora paga esa osadía con la prisión.