CARNIVORA
Ha sorprendido la información que llego ayer respecto a la intervención de una mujer de nacionalidad argentina, quien fue detenida en el marco de una riña en la cual le cercenó un dedo a una comerciante del mercado Miramar. Lo sorprendente de todo esto es que esto lo hizo de un mordisco, cuando la comerciante trataba de apartarla de una pelea que, junto a su pareja, sostenía con vigilantes y otros comerciantes del centro de abastos. La mujer le mordió el dedo y no se detuvo hasta arrancárselo, en una muestra de brutalidad que no habíamos visto sino en películas de ficción. Obviamente, tratándose de una lesión grave la mujer ha sido llevada detenida y seguramente la Fiscalía le pedirá prisión para que la internen en el penal de Cambio Puente. Seguramente, en el marco de una fricción y en el calor de un enfrentamiento, alguien puede recurrir a los medios de defensa que le da la naturaleza, entre ellos un mordisco tratándose de mujeres, lo cual ya es una muestra de violencia inaceptable, sin embargo, llegar a cercenarle un dedo a otra persona es una muestra de canibalismo repudiable. En este caso la ciudadana argentina debe haberle apretado los dientes de tal manera que le destrozó los tejidos y las articulaciones. Se supone que gente como la detenida son visitantes en nuestro país, se encuentran de paso o de visita, deberían evidenciar un mejor comportamiento y esta mujer no lo hizo. Pretendió ingresar a la fuerza a un centro de abasto sin someterse a los protocolos sanitarios, es decir, se negó a desinfectarse como lo hacen todos y como lo obliga la norma. No hay que olvidar que los mercados debieron adecuarse a los protocolos sanitarios para volver a funcionar y si alguien no quiere hacerlo entonces no ingresa, así de sencillo. Pero esta mujer, faltando a su condición de extranjera que debe responder a la atención que le otorgan en el país, se resistió y cuando la obligaron a retirarse comenzó una pelea que le hace mucho daño a la emergencia que vivimos, que genera encontronazos que no deben existir porque la norma de sanidad dice que debe promoverse el distanciamiento. Qué lamentable lo ocurrido en el mercado Miramar, esperemos que en futuro se eviten estas reyertas.
INDIFERENCIA
Justamente, lo que ha ocurrido en el mercado de Miramar debe llamar la atención no solo de las autoridades, sino esencialmente de los ciudadanos que somos los llamados a protegernos y cuidarnos. Hace solo unos días visitamos después de mucho tiempo el mercado Bueno Aires y encontramos los dispositivos de higiene en las puertas, los depósitos de alcohol con gel que parecen adornos. Como no existe un control de personal edil o del mercado, la gente ingresaba y ni siquiera los miraba. Fuimos pocos los que nos acercamos a desinfectarnos y eso es lo que debe cambiar. Cuando decíamos que han llegado nuevos tiempos de convivencia con el virus nos referimos, justamente, a las medidas de prevención que debemos adoptar para evitar el contagio y en los mercados se han colocado los dispensadores para ello, para que al ingresar dejemos de lado todo lo que traemos de la calle, inclusive, aun cuando alguien alegue que llega de su casa desinfectado. Eso es falso en el camino cualquier cosa que se coge puede estar contaminada y hay que desinfectarnos en todos los lugares que podamos, lo mejor es llevar un dispositivo pequeño con alcohol. Por ello nos llamó la atención que la gente ingrese al mercado como si nada, dejando los dispensadores como adornos, eso tiene que cambiar. No tenemos que esperar que alguien nos diga o recuerde lo que debemos hacer, tenemos que grabarnos de memoria las tres reglas de oro: uso de mascarillas, desinfección permanente de las manos y distanciamiento.
OPORTUNO
Hace unos días el Ministerio de Transportes dio a conocer que varios países de la Comunidad Andina de Naciones han decidido iniciar los trámites de eliminación de barreras en las comunicaciones y han decidido suprimir el cobro del roaming internacional. Este es un sobrecosto que existen en el rubro de las comunicaciones para las llamadas internacionales, una tasa que a estas alturas de la globalización y del crecimiento de las telecomunicaciones resulta realmente un absurdo, por ello ya Perú, Colombia, Bolivia y Ecuador, dieron los primeros pasos en este objetivo que involucra una serie de convenios para dejar sin efecto este roaming el año 2022. Esperemos que sean más expeditivos.