Por: Ricardo Sevillano Valderrama (*)
Queridos amigos:
• SOCIOPATÍA:
La sociopatía es un trastorno de la personalidad donde se pierde la noción de la importancia de las normas sociales como leyes y derechos universales.
Los sociópatas escapan de las normas o no pueden adaptarse a ellas, porque además extremadamente tienen la apariencia de ser muy correctos, jamás titubean y encuentran justificación a todo aquello que se le cuestiona. Ejemplo: “La Bestia” (Alvarez)
“El Ladrón” (Arroyo)
“El Pastor” (Hanguto Raüls)
• PECADOS DE LA LENGUA:
Si alguien no peca con su lengua, es un hombre perfecto, capaz de dominar toda su persona. A los caballos les ponemos un freno en el hocico para dominarlos, con el freno sometemos todo su cuerpo. Lo mismo los barcos: por grandes que sean y estén impulsados por fuertes vientos, el piloto los maneja con un pequeño timón. Del mismo modo, la lengua es algo pequeño, pero puede mucho.
Basta una llama pequeña para incendiar un bosque inmenso. La lengua, también es fuego. Es un mundo de maldad nuestra lengua; mancha a toda la persona y comunica al fuego del infierno a toda nuestra vida. Animales salvajes y pájaros, reptiles y animales marinos de toda clase son y han sido dominados por el hombre.
La lengua, por el contrario, nadie puede dominarla; es un látigo incansable, lleno de mortal veneno. Con ella bendecimos a Dios Padre, y con ella maldecimos a los hombres hechos a imagen de Dios. De la misma boca, salen la bendición y la maldición.
Hermanos, no puede ser así.
¿Puede brotar de la misma fuente agua dulce y agua amarga?
¿Puede una higuera producir aceitunas o la vid higos?
Tampoco el mar puede dar agua dulce. (La Biblia.- Santiago 3)
• HARINA DE LÚCUMA:
La harina de lúcuma es recomendada contra la depresión, por su alto contenido de niacina o vitamina B3, que facilita el metabolismo de las proteínas y el proceso de producir energía. La lúcuma es el fruto de la Alegría.- Pruébalo… ya!
• J.L.: La mujer que tiene los “glúteos” más perfectos y hermosos del mundo, están asegurados por varios miles de dólares U.S.A. Un admirador le obsequió un inodoro con incrustaciones en brillantes y otros. Amigos, “el que tira tira y el que no, mira”
El Sr. Carlos Ostolaza Arrichy, el Lic. Luis Vergaray Izaguirre y el Sr. Marco De Paz Sime, preguntaron: Háblanos sobre “El Bien y el Mal”
Gibran Jalil Gibran(**), respondió:
“Puedo hablaros el bien que hay en vosotros, no del mal.
Porque, ¿qué es el mal sino el bien torturado por su propia sed?
En verdad que cuando el bien tiene hambre busca alimento incluso en oscuras cavernas, y cuando siente sed bebe hasta en aguas estancadas.
Sois buenos cuando no sois uno con vosotros mismos.
Pero cuando no sois uno con vosotros mismos sois malos.
Porque una casa dividida no es una cueva de ladrones; es sólo una casa dividida.
Y una nave sin timón para navegar sin rumbo entre escollos peligrosos, sin hundirse.
Sois buenos cuando os esforzáis por dar de vosotros mismos.
Pero sois malos, cuando buscáis provecho para vosotros mismos.
Porque cuando lucháis por obtener provecho no sois más que una raíz que se aferra a la tierra y succiona de su seno.
La fruta no puede decir a la raíz: “Sé como yo, madura y plena, dando siempre de tu abundancia. Porque para el fruto, dar es una necesidad, de igual modo que recibir lo es para la raíz.
Sois buenos cuando estáis completamente conscientes de vuestras palabras.
Mas no sois malos cuando estáis dormidos y vuestra lengua tartamudea sin propósito.
E incluso un hablar vacilante puede fortalecer una lengua débil.
Sois buenos cuando vais hacia vuestra meta con paso firme y audaz.
Pero no sois malos cuando os dirigís a ella cojeando,
Ni siquiera los que cojean retroceden.
Pero vosotros, fuertes y veloces, procurad no cojear delante de los lisiados con intención de mostrar delicadeza.
Sois buenos de muchas maneras, pero no sois malos cuando no sois buenos.
Sois en ese momento perezosos, indefensos.
Lástima que los ciervos no puedan enseñar su velocidad a las tortugas.
En vuestro anhelo por un yo superior descansa vuestro bien, y ese anhelo está en todo vosotros.
Pero, en algunos, tal anhelo en un torrente que se precipita con fuerza hacia el mar, arrastrando los secretos de las colinas y las canciones del bosque.
En otros es un débil indolente arroyuelo que se pierde en meandros consumiéndose antes de llegar al estuario.
Pero que quien mucho anhela no diga a quien poco desea: “Por qué eres lento y te paras tanto?
Porque el que es verdaderamente bueno no pregunta al desnudo: “¿Dónde está tu ropa”, ni al vagabundo “¿qué le ha pasado a tu casa?”.
Queridos amigos:
• El hábito de la persistencia es el hábito de la victoria. (RSV)
• Los corruptos nos roban a todos. Y no sólo dinero. Nos roban esperanza y decencia. (RSV)
• Los corruptos sonríen desde el fango, como todo eso no apestara. (RSV)
** Escritor Libanés-Cristiano (1883-1931). Obra: “El Profeta”.
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