Emotivo final ayer en Polideportivo de Bruce:
En una emocionante definición por penales, Unión Juventud clasificó a la Etapa Departamental de la Copa Perú tras igualar 1 a 1 en los noventa minutos, y en la tanda de penales fue un 3 a 0 holgado, teniendo como figura a Joel Moore.
Apenas en el primer tiempo, los visitantes tomaron la iniciativa y fueron ganando terreno, con los pelotazos para Orihuela quien era el que comandaba el ataque en el cuadro tamborrealino, como lo hicieron en Santa, ayer en el César Cueto hicieron casi lo mismo, aunque ahora fueron más atrevidos porque Mayme ordenó que los laterales pasen mucho más, quizás animado por el conocimiento que ya tenía de su rival.
Pero ni siquiera habían pasado quince minutos, y a los 8’, de un lateral se gestó el gol de Tambo Real, luego de un pelotazo Gonzales incomodó a Orihuela, luego el balón nadie lo pudo despejar, el rebote le queda para la izquierda de Sebastián, quien no dudó y la mando a guardar decretando el 1 a 0, y todo parecía acomodarse para los celestes.
Unión se vio obligado a salir más, adelantar sus líneas y a jugarse el todo por el todo, no podía dejar que el partido se le vaya de las manos, pero los visitantes se refugiaron bien atrás, con Rengifo como protagonista, rechazando y alejando el peligro de su área, además Silvestre se ocupó de Castro a quien lo incomodó y no le dio libertad para hacer su juego, tanto así que los hermanos Rojas tuvieron que retroceder un poco su posición para poder tomar el balón, y de rato en rato desbordar.
El partido ya fue otro para Unión, Salas tuvo que tener mayor recaudo en la defensa y no trepó mucho, e intentaron por el medio y por la zona de Orbegozo quien se complementó bien con Ignacio y Matos, pero no había claridad.
Luego de varios intentos, ninguna clara, hasta que José Rojas recibe un pase de un lateral, supera fácilmente a Cruz, se interna en el área, y Rengifo salió a buscarlo y le cometió penal, en la última jugada de la primera mitad.
El penal fue marcado por Fabio Rojas a los 45’, y en la celebración le hizo un gesto a la hinchada visitante, quienes le lanzaron botellas y se generó una trifulca, por lo que Chung decidió expulsar al autor del empate, y decretó el final de la primera etapa.
Para Unión era preocupante porque debió afrontar los segundos 45’ en desventaja, cuando estaba más obligado a ganar el partido, pero si el gol en contra le habían cambiado los plantes, esta expulsión cambió casi todo lo que tenía planeado Falconi.
Ahora Unión tuvo que hacer de tripas corazón y salir a buscar el partido, el ingreso de Lindo le dio manejo en el mediocampo, aunque por momentos parecía algo frío el volante, pero poco a poco se fue metiendo al partido, luego ingreso Huiza y apoyó bastante no solo en ataque sino en defensa, pero los tamborrealinos se la creyeron y fueron en busca de la diferencia, pero no estuvieron tan finos, generaron hasta dos ocasiones claras que pudo haber cambiado la historia del juego, pero no lo hicieron, porque se encontraron con un Moore acertado, le dio confianza a sus compañeros en cada intervención, apenas soltó un balón, pero fue por estar estorbando por un rival, pero fue lejos, el mejor del partido, reivindicándose de la actuación de la semana pasada.
Los minutos fueron pasando, Unión le puso más que corazón, soportaron hasta el final, incluso pudieron hacer la diferencia, pero los remates de Huiza y Rojas se fueron desviados, y se tuvo que definir en la tanda de penales.
Los primeros en patear fueron los santeños, Silvestre se paró frente a Moore, y la mando por arriba, luego vino Víctor Dávila y anotó como lo hizo en los ensayos del sábado, al mismo lado y con la misma potencia, ventaja verdelimón, enseguida llegó Sebastian Orihuela, el estandarte tamborrealino, el capitán, y se equivocó feo, pateó al medio y Moore le adivinó y segundo penal atajado, y fue más tranquilidad para el cuadro de la avenida Aviación.
En eso se paró, José Rojas y fue igual como lo practicó el sábado, y ya estaban 2 a 0 arriba en esta definición, y la tribuna ya celebraba, justo cuando vino Juan Rojas, quien parecía caminar con una mochila muy pesada y toda la presión encima, se perfiló mal, Moore otra vez puso las manos para bloquear ese remate y la clasificación estaba servida, mientras que Aramis Velásquez con total confianza caminó hasta el área, tomó el balón, pensando seguro en aquella definición ante Gálvez, y como lo hizo en la práctica sabatina, no dudó y la puso fuerte abajo, venciendo las manos de Sagastegui que solo alcanzó a tocarla pero la pelota se fue al fondo, y la clasificación estaba definida para Unión Juventud.