Escándalo en Pallasca:
Dos años después, que la nueva losa deportiva de Llocober en Cabana, capital de la provincia de Pallasca, colapsara, ésta no ha sido reparada, se encuentra en total abandono y continúa sin poder ser utilizada por la población.
La losa deportiva de uso múltiple llamada “Maracaná” tuvo un valor referencial que llegó a la suma de S/.510,736.22 Nuevos Soles fue adjudicada a la empresa “Consorcio Sautelo” en adjudicación directa selectiva Nº 06-2013-MPP-C/CE el 4 de diciembre de 2013, siendo alcalde José Carlos Sifuentes López.
En el año 2014, fue inaugurada y puesta en servicio, pero a los pocos meses, colapsó a consecuencia de la mala construcción. En enero del 2015 el flamante el alcalde provincial Manuel Hidalgo , denunció deficiencias en la cuestionada obra, sin embargo, en febrero de ese mismo año, el exalcalde José Carlos Sifuentes, salió a defender su obra y explicó: “La obra fue realizada por una empresa seria que tiene total garantía, esa obra es recuperable, las fallas detectadas ya son de conocimiento de la empresa y tengo entendido que ya se hicieron cargo para reparar las deficiencias, todo esto ya está en manos de la nueva autoridad, que es la encargada de hacer cumplir lo pendiente”, señaló el ex burgomaestre provincial pallasquino.
Días después, el regidor provincial Julio Díaz a través de su cuenta de Facebook, confirmó lo antes dicho por el ex alcalde provincial, “Nuestras denuncias comienzan a tener éxito. La empresa que construyó la losa deportiva de Llocober, tuvo un encuentro con nuestro Alcalde, quien nos informó que se comprometieron, bajo una carta notarial, levantar las observaciones, es más ya se han hecho presente en Cabana para iniciar los trabajos”, señaló.
Desde entonces, la actual administración municipal provincial, no ha informado sobre la obra, el recinto permanece cerrado y se sigue deteriorando aún más por el paso del tiempo.
Hacemos un llamado a nuestro alcalde, para que nos informe que ha pasado con esta obra y si es que va a solucionar, señalan los pobladores.
Todo indica que la diversión les duró muy poco tiempo a los niños y jóvenes deportistas cabanistas, que tendrán que seguir esperando para practicar su deporte favorito en ese recinto.