FRANCOTIRADOR
Consciente que le quedan pocos días como consejero regional, el díscolo representante huaracino Ángel Duran León ha decidido prender el ventilador y lanzar barro a todo quien le caiga. Por lo menos parece que ha sacado a relucir eso de que “me voy pero no lo haré solo”. Por ello es que en la última sesión de consejo regional ha denunciado que un primo de la consejera regional por Aija, Magaly Roldán, ha sido ventajosamente contratado en la red de salud Huaylas Norte, señalando que se trata de José Luis Camones Carrera. Pero no es todo, el experto en intrigas y mañoserías, ha dicho que ésta sería una de las poderosas razones por las cuales la consejera no cumple con su rol de oposición que le indica su posición política y se muestra complaciente con la gestión del gobernador regional Waldo Ríos Salcedo, junto a otros ocho consejeros. En realidad la denuncia es bastante grave, más aun cuando la misma consejera en la mentada sesión ha respondido que en efecto el odontólogo es su pariente pero negó que haya intercedido para que lo favorezcan en una contratación en la dependencia del gobierno regional. Bueno, eso tendrá que investigarse, hay que tener en cuenta que el delito de nepotismo ya no se configura únicamente cuando el funcionario público contrata directamente a un familiar, sino cuando ejerce influencia para favorecer en la contratación de su familiar. Siendo esto así, la figura encajaría en la consejera regional de Aija, por mucho que ella alegue que no tiene nada que ver, peor aún si es que se confirma que en efecto su actuación en el consejo regional se ha visto sesgada por algún motivo. Esto se hace más suspicaz aun cuando la consejera, para responderle a Ángel Durán, reveló que un primo hermano de Durán León fue contratado en la Unidad de gestión Educativa local de Aija y en ese caso no dijo absolutamente nada. Bueno, en todo caso ella fue la que se quedó callada y no denunció el hecho en su momento, expresarlo a estas alturas es algo así como “mal de muchos consuelo de tontos”.
LISTA
“Cuando el río suena es porque piedras trae” reza un conocido adagio popular y se refiere a la existencia de rumores que confirman determinada especie que se suelta en la calle o en determinado lugar. En esta oportunidad, el río suena en los predios políticos del partido aprista desde hace dos o tres días atrás y con relación a la renovada lista que se estaría inscribiendo el próximo miércoles ante el Jurado Electoral Especial de Huaraz con los candidatos al congreso por Áncash por la alianza popular que une al partido aprista con el PPC en estos comicios. Y, es que desde que se conoció la lista aprobada por el congreso de delegados en Lima, durante la famosa democracia interna, se advirtió que esa no sería la lista definitiva, comenzando por el hecho mismo que por extrañísimas razones se había incluido en la misma a la militante caudalosa Paola Huamán Vela que en realidad “no tenía vela en ese entierro”. Por ello en la nueva lista no solo no aparece ella sino tampoco el ex regidor Pedro Villón Macedo, quien habría sido relegado por sus antecedentes en la función pública. Ahora encabeza la lista Ronald Contreras Álvarez, seguido de la representante por el PPC Mélida Rosales Sarmiento, en el tercer lugar permanece inamovible el invitado de “Renovación Ancashina” Arturo Espinoza Cerrón, en el cuarto lugar aparece sorpresivamente Flor de María Trujillo y en quinto lugar el candidato más resistido al mismo interior del Apra como es Wilder Calderón Castro. Esta sería la lista final que llegará al jurado electoral, salvo que en estos días que faltan sucedan muchas cosas que, tratándose del Apra, es posible.
PRACTICANTES
Hace algunos días se hizo pública la incomodidad de algunos padres de familia por el trato que estaban recibiendo sus hijos que realizaban prácticas en el hospital docente de Huaral, hasta donde fueron enviados en virtud al convenio que tiene ese nosocomio con la Universidad Privada San Pedro en donde estudian los jóvenes. Lo que padecían estos jóvenes, que son solo practicantes, es una descarada explotación al mantenerlos en los pasillos muchas horas más de las exigidas para sus estudios, en otras palabras los estaban haciendo trabajar seguramente a cuenta de quienes tienen esa obligación, por ello los padres de familia reclamaban. Esperemos que las autoridades de esta casa universitaria tomen medidas al respecto, no se puede dejar a su suerte a jóvenes que, en su afán no solo de cumplir con los requerimientos de su ficha académica, sino en busca de superarse y mejorar sus conocimientos, acuden a los centros hospitalarios y no reciben un buen trato.