Editorial

Editorial: ::: MALES PARA REFLEXIONAR :::

Hoy se conmemora en el mundo católico y cristiano el viernes santo, la fecha central de las celebraciones de la semana santa que se iniciaron con el domingo de ramos, recordando aquel pasaje de la historia en el que Jesús de Nazareth hizo su ingreso a Jerusalén en donde era esperado por muchos fieles que habían escuchado y ansiaban conocer la palabra de Dios.

La Semana Santa es la conmemoración anual cristiana que nos recuerda la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, el hijo de Dios, nuestro Salvador a quien Dios padre envió a la tierra en busca de la salvación, de allí que implica una intensa actividad litúrgica dentro de las diversas confesiones cristianas. 

Es la fecha trascendental dentro del calendario religioso en el que los católicos hacemos un acto de contrición, nos recogemos y reflexionamos sobre nuestra actividad en particular, sobre el desempeño de nuestras familias y sobre nuestro rol como hijos de Dios.

Es una fecha propicia para poder retroceder sobre nuestros mismos pasos y poder advertir lo bueno y lo malo que hemos hecho, poder reflexionar sobre las enseñanzas del señor que nos envió a su hijo y lo sacrificó para salvar nuestras vidas.

Por ello es importante que en estos días hagamos una reflexión sobre lo que sucede en nuestra comunidad, específicamente en nuestra región ahora que se viene enfrentado situaciones realmente difíciles en el campo de la salud, cuando comienzan a arreciar males que pueden ser sumamente peligrosos y hasta mortales, a los cuales se tiene que hacer frente con esfuerzo, capacidad y, esencialmente, con la fe puesta en que Dios nos dará una mano.

Nos estamos refiriendo a las emergencias sanitarias que se ciernen sobre las principales ciudades de Áncash, quien sabe la más difícil y complicada es la que nos amenaza a solo unos kilómetros de Chimbote, nos referimos al Dengue que se ha establecido como un mal endémico en la vecina provincia de Casma.

Al iniciarse esta semana el Gobierno se ha visto precisado a declarar una emergencia sanitaria en Casma debido al preocupante aumento de pacientes afectados con el Dengue, y, especialmente por haberse registrado casos de este mal de su especie más peligrosa como es el dengue hemorrágico que puede acabar con la vida si es que no se trata a tiempo.

La medida del gobierno busca inyectar una partida presupuestal de emergencia a efectos de afianzar las acciones preventivas propias de esta enfermedad, como son la abatización y la fumigación pues cuando se ha detectado la presencia del mosquito vector existe la necesidad de eliminarlo a efectos que pueda propagar este mal en cadena.

Son hasta el momento 57 personas las que han sido detectadas con este mal y existe casi tres centenares de pobladores casmeños cuyas muestras están en evaluación en la medida que presentan los típicos síntomas que deja esta enfermedad.

Lo malo es que en casma existe una deficiencia en cuanto a recurso humano, los gremios médicos han protestado por la presencia de un Director en el Hospital de Casma que no solo no reúne los requisitos para ostentar ese cargo sino que ha puesto de manifiesto que no está en capacidad de poder liderar una emergencia de este tipo, tanto así que ni siquiera concurre a las reuniones de coordinación de las autoridades para adoptar medidas contra este mal.

Pero así como el Dengue, en estos días se ha dado cuenta de otras amenazas que vienen padeciendo otros pueblos de la región como el caso de Cochaconchucos, en la provincia de Pallasca, en donde se ha detectado un brote de Uta que ha atacado a más de dos centenares de personas. Entre ellos muchos niños que presentan enormes llagas que los dejarán marcados para toda la vida.

Ha sido el agente municipal de ese poblado quien ha formulado un público y dramático llamado para que las autoridades del sector salud se hagan presente en la medida que carecen de las medicinas y los tratamientos adecuados, además que es necesario eliminar el foco infeccioso de este mal.

Sin embargo, pese a la evidente emergencia que se registra en esa zona, el Director de la Red Pacífico Norte, Dr. Johnny Cano Suárez ha manifestado públicamente que tenían conocimiento de este caso desde el pasado 02 de Marzo, por ello pusieron en marcha un plan de atención para fumigar la zona y estarán en ella el próximo 07 de abril.

Esto ha generado la airada y justificada reacción de la Defensoría del Pueblo cuya comisionada Dra. Rosslyn Villanueva Ramírez ha llamado la atención a estos funcionarios porque, a pesar que se encuentran frente a una emergencia y que las imágenes demuestran que los pobladores de esa zona están padeciendo de este mal, la autoridad de salud no puede tomarse más de un mes para responder el llamado de asistencia, por lo que los ha exhortado a que agilicen sus procedimientos y puedan llegar a la zona lo más rápido posible.

Pero no solo el Dengue y la UTA están afectando a sectores de la población ancashina, recientemente se ha podido conocer a través de cifras oficiales que la tuberculosis es otro de los males que acecha y amenaza a la población y, en este caso específico, es la ciudad de Chimbote una de las más afectadas.

Esta delicada situación la dio a conocer la Licenciada Leonarda Quispe Salazar, Coordinadora regional de Prevención y Control de la TBC, quien manifestó que a nivel de estadística nacional, Ancash se ubica como la sexta región con más altos niveles de TBC en todo el país y de esta estadística es en Chimbote en donde se concentra el 90% de los pacientes que está sujetos a tratamiento.

Por ejemplo, especificó que, en lo que va del año, en Chimbote se han registrado 61 nuevos casos y en Nuevo Chimbote 27, cifras que no son nada alentadoras en la lucha contra este mal en la medida que ni siquiera se asoman a las proyecciones que se establecieron como metas de reducción del número de pacientes con esta enfermedad.

De allí que se señaló que para poder mejorar estas inquietantes cifras existe la necesidad de modificar las políticas sanitarias a nivel de la región,  se requiere con urgencia fortalecer la capacitación de prevención y tratamiento a personal de salud como enfermeros, tecnólogos médicos, nutricionistas porque se tiene que atacar de diversas maneras y además en la región tenemos solo dos neumólogos, lo que para la especialistas es una grave falencia en la necesidad de reducir las cifras de la TBC.

En realidad son varios males los que están perjudicando seriamente a la población y se requiere que las autoridades reaccionen ante el avance de las mismas, lamentablemente la política de salud ya no está en manos del estado sino que ha pasado a los predios del gobierno regional y todos saben en Áncash lo mal que se encuentra la Región, la presencia de autoridades nulas y deficientes que son las que permiten que las campañas de lucha contra estas enfermedades no den resultados, por ello la queja y la protesta de los gremios médicos en el caso del dengue y de la defensoría en el caso de la UTA.

Esperemos que esta fecha de recogimiento y reflexión de la semana santa ilumine el accionar de los responsables de estas campañas y les permitan afianzarse para impedir que esta plaga siga perjudicando a la población y se erradiquen de manera definitiva. Ojalá hagan algo.