Editorial

Editorial: ::: PLAYA PELIGROSA :::

Ha culminado la temporada de verano y el cuerpo de salvataje de la Policía Nacional dio a conocer que han terminado sus jornadas de protección en las playas de nuestro litoral, razón por la cual recomendaron prudencia a los bañistas en la medida que las altas temperaturas permanecen y la afluencia de los veraneantes se mantendrá.

Ello porque los salvavidas son conscientes que esta temporada ha dejado el trágico saldo de tres personas fallecidas a consecuencia de ahogamiento en el campamento Atahualpa, una de las playas preferidas por muchos bañistas por su fácil acceso desde Chimbote y en donde concurre mucha gente a pesar que es una playa abierta que se torna peligrosa.

Y es que aquel que ha acudido a esta playa y ha ingresado al mar debe haber experimentado que por allí fluyen corrientes submarinas que fácilmente arrastran a los bañistas al fondo del mar, se mezclan con peligrosos remolinos que hunden a los veraneantes y hay que temer mucha pericia para nadar y poder superar las contingencias que se encuentran en esas aguas.

Por ello es que tradicionalmente los cuerpos de salvatajes han puesto especial énfasis en la playa de Atahualpa y es allí en donde se ha registrado la mayor parte de emergencias durante una temporada de verano, allí se han registrado muchísimos rescates pero también se han presentado hechos trágicos cuando ya los salvavidas no pudieron llegar a tiempo.

Y este año no podía ser la excepción, tres familias ganaron el luto a causa de las fuertes corrientes, incluso, los dolidos familiares protagonizaron dramáticas escenas en la búsqueda de los cuerpos cuando es conocido que el mar devuelve un cadáver a los siete días de habérselo virtualmente devorado.

En los tres casos las circunstancias fueron las mismas, jóvenes que ingresaron con la finalidad de refrescarse, algunos con alimentos en el estómago, otros acicalados por bebidas alcohólicas y también de aquellos que solo buscaban recrearse en una ardiente tarde de verano, pero que no esperaban que las corrientes los arrastren tan fácilmente.

Lamentablemente, en muchos de estos casos los bañistas han ingresado a pesar que en la Playa se coloca la bandera roja, es decir, el símbolo de peligro que debería obligarlos a no ingresar al mar, sin embargo, muchos dejan de lado esta señal y se lanzan al mar desafiando virtualmente a la muerte.

De allí que si los bañistas no prestan mayor atención a las banderas de peligro, si hay promotores que organizan fiestas e incentivan a la ingesta de alcohol en las playas, si hay una marcada irresponsabilidad de las personas de ingerir alimentos en la orilla e inmediatamente ingresar al mar exponiéndose a un calambre, es evidente que hay quienes deben impedir que las personas se jueguen el pellejo de esta manera.

Hay que tener en cuenta que al margen de la disposición de las personas que toman la imprudente decisión de ingresar al mar cuando existe una señal de peligro, el mar es uno de los factores que genera las desgracias en Atahualpa, la existencia de fuertes corrientes submarinas que arrastran fácilmente a los veraneantes representan el factor principal de peligro y ello es imposible de revertir.

Allí estuvieron, allí están y allí permanecerán estas fuertes corrientes exponiendo la vida de los bañistas, de allí que si es que en realidad se quiere evitar que más familias lloren la muerte de sus seres queridos, la autoridad está llamada a restringir el acceso a este balneario. Atahualpa es un lugar ideal, allí los promotores de fiestas encontraron el lugar perfecto para lucrarse, es una playa hermosa para descansar pero tiene también un mar casi mortal, esto es lo que se tiene que poner en la balanza y medir hasta qué punto se puede anteponer el derecho a la libre recreación y el bienestar que genera un espacio de veraneo a la obligación de proteger a la vida de los demás.

Está más que probado que el campamento Atahualpa es una playa peligrosa, que es una verdadera trampa para quienes tienen poca experiencia en el mar y que en cualquier momento puede arrastrar a los bañistas y no devolverlos sino hasta después de siete días totalmente hinchados.

Si hay alguien que se encuentre en capacidad de prohibir el ingreso a esta balneario que lo haga, no hay otra manera de detener las muertes en esta playa, de lo contrario, seguiremos siendo los sepultureros de todos aquellos que siguen desafiando a la muerte bajo sus peligrosas corrientes.

                                                           REDES EN BANQUILLO

El Ministerio Publico ha iniciado sendas investigaciones en la dos redes de salud que existen en Chimbote y que manejan y administran los servicios asistenciales del hospital La Caleta y del hospital Regional “Eleazar Guzmán Barrón”, con sus respectivas postas y centros de salud diseminados en toda la jurisdicción.

En efecto, tanto el ex Director de la Red de Salud Pacífico Sur, Yonal Escalante Tarazona como el actual Director de la Red de Salud Pacífico Norte, Johnny Cano Suárez, han sido emplazados por la fiscalía anticorrupción a efectos que respondan por una serie de cargos relacionados con presuntos malos manejos aprovechando los presupuestos asignados a estas reparticiones.

En realidad, no debería extrañar que la fiscalía proceda de esta manera si se tiene en cuenta que los cuestionamientos a ambos funcionarios han sido públicos y nacen en denuncias que han proporcionado los propios servidores de estas entidades, los trabajadores que son estables y que advierten que la intromisión política hace mucho daño a sus centros de labores.

En ambos casos los directores serán investigados por una serie de hechos que tienen que ver con el manejo de los recursos públicos, con el aprovechamiento de los presupuestos que, se supone, deberían destinarse a los programa que beneficien a los pobres y, fundamentalmente, a prevenir e impedir que se proliferen los malos endémicos como lo fue el cólera en su momento y que ahora lo son el dengue, la chikunguya y la gripe AH1N1 que recientemente se ha detectado en la muerte de dos persona.

Esperemos que la Fiscalía cumpla su cometido y denuncie a quienes realmente metieron la mano, lo que no se quiere es que esta clase de pesquisas perturbe la marcha de la entidad porque de por medio se encuentra la administración del sector salud.