Editorial

UN PEDIDO PERTINENTE

Los secretarios técnicos de las 20 provincias que forman parte del Comité Regional de Seguridad Ciudadana (CORESEC) han solicitado una audiencia al Ministro de Interior a efectos de llevarle el acuerdo de este organismo mediante el cual se demanda se deje sin efecto la creación de la Macro Región Policial La Libertad Áncash.

Esto se pudo conocer en la sesión del CORESEC realizada la semana pasada en Huaraz, en donde se puso en debate el tema de la autonomía de la Policía Nacional y la necesidad de contar con un mando policial en nuestra zona, lo que no ocurre con el modelo puesto en marcha por el Ministerio del Interior a partir de este año.

Las estadísticas señalan que la delincuencia se ha afianzado y lejos de mejorar en política y estrategias de lucha contra la delincuencia, la Policía no parece dar muestras de una efectividad que haga frente a uno de los problemas más álgidos en los últimos tiempos como es el de la seguridad pública.

Sin embargo, una de las cartas bajo la manga que maneja el CORESEC es el ofrecimiento que hizo el Ministro del Interior, Carlos Basombrio, a las autoridades locales al iniciarse el presente año y cuando se dieron las primeras escaramuzas en nuestra región por la decisión adoptada por ese portafolio en relación a la creación de las microrregiones policiales que era ya una receta fracasada por lo menos en nuestra jurisdicción.

En aquella oportunidad, ante el rechazo de la sociedad civil en su conjunto, tanto de Chimbote como de Áncash, el Ministro hizo frente a este rechazo con una solución salomónica que no le permitía dar marcha atrás pero que lleve a las autoridades ancashinas a mantener el sistema que había emprendido este año bajo una condición.

Esta condición señalaba que el Ministro se comprometía a evaluar dentro de los seis primeros meses la marcha de este nueva marco región policial y luego tomaría una decisión de desactivar esta nueva estrategia o ratificarla, lo cual no se ha dado hasta el momento, por lo menos el Ministerio no ha dado a conocer documento alguno relacionado con aquella propuesta que apagó los ánimos caldeados de las autoridades locales.

Se supone que hace ya más de tres meses atrás el Ministro y su equipo de asesores deberían haber evaluado el trabajo desarrollado por la macro región policial y, de acuerdo a los parámetros del método que se ha utilizado para esta calificación, se debería haber tomado una decisión  y comunicarla oficialmente a la gobernaci0ikn y los municipios provinciales que encabezaron esta protesta.

Nada de ello ha ocurrido y todo indica, como lo sospechamos desde un principio, que aquella no fue sino una salida de ajedrez del Ministro para que las autoridades y la población se olviden un poco de este tema, pues no tenía la menor intención de desactivar la macro región, antes, ahora ni mañana o más tarde.

Así lo había dejado sentado el vice ministro del interior con ocasión de una visita a Chimbote y así lo alertamos quienes advertimos en ese vocabulario un desprecio por la posición regionalista de las autoridades locales, en aquella oportunidad ni siquiera se valoraba los criterios planteados por los ancashinos, por el contrario, señalaba el vice ministro que ni la macro región ni la desactivación de la escuela de Policía se dejarían sin efecto, cuestionando por completo la posición de los ancashinos.

Claro que el Ministro apeló a la negativa más elegante, más refinada y con promesas que finalmente no ha cumplido, como aquella de evaluar el desempeño de la macro región policial a los seis meses de su funcionamiento, lo que no ha ocurrido ahora que ya llevamos 11 meses de aquella promesa lanzada en medio de una indignación general de las autoridades que no parecían dar marcha atrás.

Ello porque, en nuestra región, ya hemos experimentado la presencia de un comando macro regional con sede en la ciudad de Trujillo y ese experimento fracasó en su momento, por lo que intentar lo mismo aunque con otro ropaje, solo representa una pérdida de tiempo, los chimbotanos sabíamos que ese modelo iba a fracasar y así ha sucedido.

No lo dice la prensa o es un chisme o rumor de callejón, lo han dejado firmado los 20 secretarios técnicos que forman parte del CORESEC y quienes están demandando la desactivación del modelo puesto en marcha por el actual Ministro del Interior.

El CORESEC no debe dejar de insistir en esta propuesta, lamentablemente los hechos registrados la semana pasada por la postergación de las obras de descolmtación y la primera visita que ha realizado a nuestra ciudad el nuevo director ejecutivo nacional de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, dejó este tema en un segundo plano y son pocos los que han rescatado la importancia que realmente tiene.

Creemos que el Gobernador Luis Gamarra Alor se debe poner al frente de esta demanda y dirigirse al Ministerio del Interior que cumplan con su palabra, de la misma manera, se debe interesar a los congresistas de la república que, en su momento, también estuvieron en desacuerdo con la creación de una macroregión policial porque realmente se despojaba, una vez más, las instituciones regionales para llevárselas a otra ciudad.

En realidad, esta pretensión no tiene pies ni cabeza, ya el propio Ministro había admitido que es una iniciativa que busca conocer nuevas alternativas en la lucha contra la delincuencia pero que se trataba de una medida sujeta a los ajustes necesarios y hasta la desactivación si ella es necesaria.

A la luz de los resultados en materia de seguridad ciudadana, creemos que se debe retornar al modelo anterior de la Región Policial Ancash con su sede en Huaraz, que se designe al Coronel que se encargará de conducir la institución tutelar en nuestra Región y que se deje a otro oficial del mismo rango para que dirija la Policía de Chimbote.

Hay un sabio adagio que dice “más vale viejo conocido que otro por conocer” y esto no parece haber reparado el Ministro Carlos Basombrío cuando decidió desmembrar a la Policía en Ancash y trasladar la sede policial a Trujillo, con la misma majadería como antes se hizo con la sede de Hidrandina.

Esperamos que en esta semana se tenga una respuesta del Ministro, este acuerdo debe ser incorporado en la plataforma de lucha de la sociedad civil para hacerla valer por todos los medios posibles ante un Gobierno que no parece escuchar las demandas del Pueblo.