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MADRE E HIJA TERMINAN CON EXCORIACIONES TRAS VIAJAR EN BUS

“Erick El Rojo” fue denunciado:

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Con el cuerpo lleno de excoriaciones, resultó una joven madre de familia, identificada como Rommy Muñoz Oncoy, ocurriendo lo mismo con su menor hija, luego de haber viajado en uno de los ómnibus de la empresa interprovincial Erik El rojo de Lima a Chimbote.

Según dijo, días atrás, viajó a la capital para hacer unos trámites de viudez, y retornó el último jueves a las 11 de la noche, cuyos boletos los compró previamente en Plaza Norte.

Llegó a Chimbote a tempranas horas de la mañana del viernes,  ya sentía algunas molestias en el cuerpo, pero no le hizo caso, de igual forma su menor hija también sentía fuertes molestias en el brazo que pensó era algo sin importancia.

“Viajé con mi menor hija y mi bebé en brazos  pensé que la picazón era algo sin importancia pero en la tarde de ayer viernes, la picazón era insoportable, y me percaté primero de mi hija que se había extendido las ronchitas en todo su brazo, le eché alcohol, crema pero seguían extendiéndose, igual pasó conmigo en todo mi cuerpo”, señaló muy asustada la denunciante.   

Como era de esperarse, ayer sábado a tempranas horas acudió al terminal terrestre, llegando a la agencia de Erik El Rojo, “me hicieron hablar con el administrador y me dijo que no podía hacer nada,  que denuncie a la empresa para que recién me hagan caso”, añadió ofuscada porque se supone que es una empresa garantizada, además no subió al vehículo a mitad de camino sino desde la agencia. 

La afectada, muy asustada, exige que la empresa se haga responsable, ya que  necesitan atención médica  de inmediato no se sabe a qué se debe la aparición de las ronchas, podría ser pulgas, chinches o falta de higiene en los asientos.

“Voy a denunciar ante Indecopi y la Municipalidad para que sancionen a esta empresa, no quieren hacerse responsable de nada”, anotó.

Este medio de comunicación, llegó a la agencia de transporte y el administrador, sólo atendió por celular, diciendo que la afectada debe pedir el libro de reclamaciones  para poner su queja, además de manera insensible dijo textualmente “de eso nadie se muere”.