PETROLEROS
No cabe duda que el Gobernador Juan Carlos Morillo no ha querido quemarse en el tema de la explotación petrolera que vuelve a plantearse en las costas del litoral norteño y que incumbe, por ejemplo, a Chimbote. En la visita que realizó por las fiestas patronales, los periodistas le preguntaron cuál era su posición respecto a estas pretensiones de explotación petrolera, a lo que respondió que era necesario ilustrarse un poco más para poder tomar una posición, respuesta que no agradó a un periodista que lo encimó y le dijo si estaba dispuesto a permitir la contaminación del mar lo cual asustó a la autoridad que cambió el tono de sus respuestas y dijo que para él primero está el pescador artesanal y no hará nada que lo afecte, terminando por sentenciar esa absurda frase “cebiche si, petróleo no”. En realidad es pertinente que la primera autoridad de Ancash fije una posición al respecto y no debería estar desinformado, como lo admitió la semana pasada, pues apenas un día después la gerente general de Austral Group, Adriana Giudice, le enmendaba la plana señalando que la actividad petrolera no es incompatible con la actividad pesquera, ambas podían desarrollarse en paralelo como ocurre en países adelantados como Noruega. Y es que el empresario señaló que en estos tiempos en que la tecnología nos brinda las posibilidades de manejar mejor los temas de prevención, no es posible poner reparos a las mejores alternativas de inversión y desarrollo. No le falta razón. Para ello existen los estudios de impacto ambiental, la explotación petrolera se ha afianzado en el mundo, basta darse una vuelta por Talara, en donde existen yacimientos en el mar y allí se come el mejor cebiche del norte porque tiene el mejor pescado blanco del litoral.
Los padres de familia no deben bajar la guardia en lo que concierne al control de sus hijos que utilizan las redes sociales en la medida que, a pesar que la Policía ha detenido y enviado al Penal a muchos desviados sexuales que acosan a menores de edad a través de estos mecanismos que nos ofrece la tecnología, ellos se siguen utilizando y los maleantes no cesan de apelar a los mensajes sugestivos para persuadir a las niñas. El último caso se ha registrado en el vecino distrito de Coishco, en donde fue capturado un jovenzuelo de 19 años que venía acosando a una menor de solo 12 años a través de una cuenta del Facebook. Fue la abuela de la menor que, al ser alertada por la niña, acudió a la sede policial para denunciar este ciberacoso y mostró a los agentes los mensajes sugestivos en los que se apreciaba invitaciones para acudir a un hotel. Los Policías respondieron los mensajes y transaron una cita en los alrededores de la tienda comercial Electra, entre la avenida Pardo y Aviación., allí llegó el jovencito y la menor que estaba siendo vigilada por agentes encubiertos que intervinieron “in fraganti” al mañoso. Ojo que estos casos continúan pero la pregunta que nos hacemos es ¿Qué hace una niña de 12 años metida en el facebook si sus padres saben los peligros que acechan a las niñas en estas redes sociales? Quizás esa es la clave para detener el accionar de los enfermos sexuales.
SUERTE
Hoy a partir de las 3.00 de la tarde, 30 millones de peruanos estaremos frente a las pantallas de los televisores para espectar la final de la Copa América entre Perú y Brasil. La empresa futbolística es muy difícil y complicada, estaremos nada menos que ante el pentacampeón del mundo que son locales, lo que implica el manejo del aliento y el arbitraje que siempre tira para la casa. Pero el solo hecho que nuestro combinado nacional haya llegado a esta instancia final es un motivo de alegría y orgullo para los peruanos, la fe y la confianza en nuestra selección se ha revitalizado, la esperanza se ha recobrado después que hace solo una semana termináramos decepcionados ante el mismo rival que tendremos el día de hoy, sin embargo, hay que tener en cuenta que mucho ha cambiado desde ese partido, la lesión de Farfán ha permitido al técnico hallar el equipo y eso se ha visto en el campo de juego ante Uruguay y Chile. Confiamos en nuestros jugadores, no estamos ante un cuco, son once contra once en el campo y allí se dirimirán las rivalidades. Suerte a nuestros muchachos y ¡ARRIBA PERÚ!.