Editorial

Editorial: ::: UN TREMENDO DESAFÍO :::

En las últimas semanas la modalidad delictiva que estuvo en boga fueron los asaltos por acción de delincuentes conocidos como “marcas”, aquellos que identifican a clientes de bancos que realizan retiros de fuertes sumas de dinero en ventanilla y los persiguen hasta despojarlos de todo ese botín.

Sin embargo, el último fin de semana el hampa se salió del cuadro, perpetró uno de los hechos de brutalidad criminal más chocantes del año y quien sabe de los últimos tiempos, el mismo que marca, además, el regreso de los crímenes por encargo y e uso de sicarios para victimar a otros.

El hecho se registró el último sábado por la noche, cuando ya las penumbras se habían apoderado de nuestra ciudad y todo apuntaba que se plasmaría un fin de semana tranquilo como los últimos, a la espera de las fiestas de la navidad y el año nuevo.

Sin embargo, el estruendo de cuatro detonaciones de arma de fuego alteró la tranquilidad de la urbanización El Bosque, y tiñó de sangre un conocido establecimiento de comida china del distrito de nuevo Chimbote, e mismo que concentró una serie de unidades policiales, del Serenazgo y albergó la llegada de los fiscales.

Se había perpetrado un alevoso crimen en contra del empresario del rubro constructor, Jaime Enrique Elías Ríos, un joven empresario, que había llegado al establecimiento acompañado de otra persona y que se encontraba dialogando distraído hasta que ingresó de manera rauda y alevosa un sujetó que portaba un arma de fuego con las cual le disparo hasta cuatro tiros en el tórax y el rostro.

Las imágenes que se han difundido a través de las redes sociales, las cuales fueron extraídas del cámaras de seguridad del propio local, nos han dado una idea de lo espantoso que es este sub mundo del sicariato y la presencia de gente sin escrúpulos que es capaz de matar a una persona de manera despiadada, como si estuviera frente a un animal cualquiera, sin la más mínima consideración a la vida humana.

Desde entonces se han comenzado a bosquejar hipótesis en la investigación policial y bosquejar posibles escenarios en los que se pueda justificar el asesinato de una persona como ha ocurrido con el empresario Elías,

Se trata de un joven empresario que en el rubro de la construcción comenzó a crecer gracias a la adquisición, junto aun grupo de socios, de una planta de asfalto, juna maquinaria que ha servido para que haga mucho dinero en la medida que tuvo la visión de acceder a estos equipos en momentos que comenzaron a forjarse los proyectos de pavimentación de carreteras y de calles urbanas.

De allí que una de las primeras premisas de trabajo que ha elaborado la policía de investigación criminal es la extorsión, las presuntas amenazas que podría haber recibido el empresario por parte de organizaciones delincuenciales que se dedican al cobro de cupos de las obras que se ejecutan en nuestra ciudad y en toda la provincia.

De allí que se estima que el occiso no le habría prestado la menor intervención a estas intimidaciones y tampoco recurrió a la Policía para denunciar estas presiones, Por lo que dejó el camino abierto parta que los maleantes concreten sus amenazas.

Empero existe otra hipótesis de trabajo de la Policía y es la que está relacionada con una serie de hechos extraños que se han registrado en la víspera de la muerte del empresario y que deberán dar lugar a una acción profesional por parte de los agentes para poder dar con los culpables.

Ella está relacionada con un incidente registrado un día antes en el vecino distrito de Nepeña, lugar en donde el empresario había realizado una obra de asfaltado en el anexo de Solivín y, aparentemente, la empresa o autoridad que lo contrató no había cumplido con los pagos, un trámite por el que había insistido varios días y que llegó a su mas alto punto de cuestionamientos con una actitud desesperada del occiso quien realizó pintas sobre las pistas que había realizado, cobrándoles la deuda a los responsables de la obra, amenazándolos con levantar el asfalto si es que no cumplían.

Lo que ha llamado la atención de la Policía es que los nombres que escribió en las pintas son los mismos con los cuales aparece en el restaurante en donde un sicario le quita la vida.

Por lo menos quien estaba junto al occiso era Pedro Carranza Loayza, un empresario que resulta ser hijo del alcalde de Nepeña Pedro Carranza López y cuyo nombre aparece junto al de su hermano Maycol Carranza, con quienes aparentemente el fallecido habría realizado tratos comerciales y le arrastraban una deuda que no estaban honrando al extremo que el empresario se vio precisado a realizar inscripciones en la vía pública.

La Policía ha encontrado una serie de reparos en el accionar del acompañante de occiso, pues se supone que luego de un atentado de estas características y ante la fuga de los asesinos, la persona que estaba con el atacado lo primero que hace es auxiliarlo, buscar ayuda y preocuparse por su estado de salud, al fin y al cabo si estaba con él era por algo, empero, el acompañante del occiso optó por retirarse del lugar. De la misma manera, se investiga como es que el empresario llega a este lugar, si fue citado por una persona en particular, por el mismo Pedro Carranza Loayza o era su local preferido, lo cierto es que optaron por tomar una mesa que podría ser reglada desde el exterior, como en efecto, ocurrió cuando en la imágenes se aprecia que alguien se acerca mirando el interior y hablando por teléfono de manera disimulada, este sujeto es el que habría informado al sicario el lugar en el que se encuentra y como podría perpetrar el ataque.

Hay mucho misterio detrás de este alevoso asesinato, sin embargo, la sangre derramada el ultimo sábado no debe quedar impune, hay allí un mensaje delictivo de quienes suelen resolver sus problemas a sangre y fuego y no se puede permitir que los brotes criminales del asesinato a sueldo vuelvan a cobrar cuerpo en nuestra ciudad.

Si es que existen muchas pistas que pueden llevar a los asesinos, que la Policía las trabaje sin pérdida de tiempo, lo peor es que las huellas de destruyan o deterioren por el tiempo. No hay que ser muy avisado para colegir que ahora que se han iniciado las obras a nivel municipal y regional comienzan los crímenes por encargo. Es un verdadero desafío el que tiene la Policía por delante para desentrañar este crimen del empresario Jaime Elías.