Editorial

Editorial: ::: INSTALACIONES PELIGROSAS :::

Un menor de apenas 12 años de edad falleció la semana pasada como consecuencia de un traumatismo encéfalo craneano generado por una terrible caída que sufrió en las instalaciones recreacionales del Polideportivo de Casuarinas, de propiedad de la Municipalidad distrital de Nuevo Chimbote.

Como suele ocurrir en estos casos en los cuales se trata de ocultar una desgracia, los hechos solo trascendieron tres días después cuando el menor fallece en la ciudad de Trujillo, hasta donde había sido trasladado en busca de ayuda especializada que lo saque el estado de inconsciencia en el que se hallaba.

De acuerdo a la versión policial, los hechos acontecieron el sábado 08 de este mes cuando un grupo de niños llegó a las instalaciones del Polideportivo de la urbanización Casuarinas y, como suele ocurrir, de inmediato buscaron los juegos recreativos que tiene la Municipalidad en el interior de ellos, sin tomar en cuenta que ellos se encontraban clausurados por hallarse en mal estado de conservación.

Empero, en un niño que no tiene capacidad de discernimiento, estas advertencias no le impiden seguir adelante, mas aun cuando los sellos se superaban fácilmente saltando las vallas, lo único que buscaban era un momento de diversión y si los juegos estaban dañados buscan la manera de superar esas deficiencias.

Justamente, por el mal estado en el que se encontraban estos juegos especialmente un tobogán al cual habían subido, de aproximadamente cuatro metros de altura, uno de estos menores se descolgó y cayó pesadamente al suelo que es de grass sintético.

De acuerdo a lo que dijeron sus amiguitos el menor cayó pesadamente con la cabeza, golpeándose tan fuerte que cuando fueron a verlo no respondía a sus llamados, razón por la cual corrieron en busca de ayuda ante los vigilantes que llamaron al serenazgo y se solicitó de inmediato la presencia de la ambulancia del servicio de seguridad ciudadana.

Cuando el personal de primeros auxilios llegó al lugar hallaron al menor inconsciente, el golpe había sido sumamente violento, razón por la cual lo trasladaron de inmediato al hospital Regional, en donde era poco lo que podían hacer en la medida que el niño requería de la asistencia de un especialista.

Los galenos eran conscientes que lo adecuado era trasladarlo a Trujillo, al hospital “Belén” de esa ciudad en donde existen neurólogos que podrían establecer el grado de las lesiones cerebrales que presentaba, sin embargo, ni siquiera eso lo ayudó, los galenos señalaron que el traumatismo encéfalo craneano que presentaba era grave y, lamentablemente, el menor falleció después de dos días de agonía.

Ante el dolor de sus padres y familiares fue sepultado pero tras la tragedia es pertinente que ella no quede solo para un registro o estadística, es imperativo que este hecho represente un antes y un después para desterrar los yerros y las deficiencias en la administración de los bienes públicos.

Hay que comenzar por señalar que cuando se trata de niños hay que tomar todas las providencias posibles y aun cuando los juegos se encuentren clausurados y sellados, no se puede dejar de perder de vista la invasión de los menores que no saben medir el peligro, que se aventuran e ingresan como pueden, por ende, es allí en donde el personal de vigilancia tendrían que haber advertido esta incursión de niños que estaban exponiendo su vida.

De la misma manera., no se puede soslayar el hecho que este escenario de peligro había sido advertido con anticipación por los propios vecinos de la zona, quizás los primeros usuarios de estas instalaciones que marcaron, por muchos años, el desarrollo y la alegría de muchos niños que se divirtieron en sus instalaciones, representaron siempre el punto de encuentro de muchos menores porque están hechos, precisamente, para ellos, para su diversión y recreación.

Lamentablemente los llamados de los vecinos no encontraron asidero y los juegos no recibieron el mantenimiento ni los cambios que requerían, no fueron puestos en valor para que los menores sigan divirtiéndose en ellos, procedieron a clausurarlos cuando quedaron allí como una tentación para los niños que hasta sacaban la vuelta a los vigilantes para ingresar pese a hallarse cerrados.

De allí que hay que disponer los correctivos pertinentes, ya la Municipalidad ha anunciado el mantenimiento y mejora de estos juegos y de todos los parques infantiles del distrito, pero que quede como lección que ellos deben recibir el permanente mantenimiento porque los niños no saben de cintas de peligro ni de clausuras. Hay que evitar las instalaciones peligrosas, no abandonarlas a su suerte.

INYECCIÓN LETAL

La vida es el bien mas protegido por la ley y por las personas, quienes atentan contra ella se merecen el castigo más drástico que reserva la norma, empero, este no parece haber sido el norte de un Colegiado Penal Transitorio de la Corte del Santa que la semana pasada condenó a cuatro años de pena suspendida a una mujer que inyectó insecticida a su ex pareja con intenciones de asesinarlo.

Pese a la gravedad del hecho y que el Ministerio Público ha solicitado se le imponga 10 años de carcelería, los magistrados consideraron que, si bien es cierto el hecho está probado, la mujer no merece ir al penal porque tiene hijos pequeños que cuidar y porque su acto fue impulsado por un estado emocional que le generaba el hecho de ser constantemente maltratada por el agraviado.

En realidad, los criterios que se han utilizado para reducir escandalosamente la penalidad son jalados de los cabellos, no se ha advertido el modus operandi, el aprovechamiento del agente al sorprender a la victima durmiendo y la efectividad del medio empleado, pues de no haber reaccionado a tiempo el agraviado y acudir de inmediato al hospital para que neutralicen el veneno, seguramente estuviéramos hablando de un homicidio calificado.

Quien debió pensar en los hijos menores que quedaron en la orfandad es la propia agresora, de allí que sancionar con una pena menor un hecho de tanta gravedad deja una sensación de injusticia que raya con lo irregular y suspicaz. Seguramente este fallo será revisado por la instancia superior.