Editorial

EDITORIAL ::ENCOMIABLE ESFUERZO::

La emergencia del coronavirus que ha llevado a miles de peruanos a confinarse en sus domicilios atendiendo al aislamiento obligatorio, mantiene al frente de esta enfermedad a muchas personas, entre autoridades e instituciones que se encuentran en la primera línea haciendo frente a esta pandemia.

En estas semanas el COVID 19 ya no solo se trasmite por el contacto con personas que han traído el virus de otros confines, sino que se ha vuelto comunitario, es decir, que están en las calles y se puede adquirir en la bodega, en el mercado o en vehículos de transporte, por ello salir a las calles es un real peligro por el riesgo latente de contagio.

Sin embargo, no solo al personal de salud y de las fuerzas policiales que deben atender a los pacientes confirmados y velar por el cumplimiento de la cuarentena, deben exponerse en las calles sino las autoridades que deben movilizarse permanentemente en todos los sectores a efectos de afianzar el trabajo de prevención.

Por ello es que hemos visto al Gobernador Regional, Juan Carlos Morillo Ulloa, viajando de extremo a extremo por nuestra región, monitoreando el trabajo de los funcionarios de los organismos sectoriales de su entidad y asistiendo a los sectores más golpeados con la prolongada cuarentena que afrontamos.

El gobernador tiene una responsabilidad mas extensa en la medida que es el ente coordinador con las medidas que se dictan desde el Gobierno Nacional y debe recibir a   los ministros de estado y dirigir la estrategia sanitaria que se ha establecido desde el primer día de la emergencia en los predios del Ejecutivo.

Inclusive, por allí el gobernador fue emplazado por algunos medios confrontacionales a su gestión que le reclamaban que se hiciera la prueba del Covid 19 en la medida que había viajado a Alemania poco antes desatarse la emergencia y cuando ya en ese país se habían presentado muchos casos de contagio, por lo que accedió a este pedido cuando llegaron el lote de pruebas rápidas y pudo demostrar con el resultado negativo que no estaba transmitiendo este virus como algunos mal pensados lo sostenían y dejando de lado anécdotas perniciosas que no deberían distraer su función.

De la misma manera, en lo que concierne a Chimbote, los medios de comunicación hemos podido advertir el infatigable despliegue que realiza el alcalde provincial Roberto Briceño Franco, quien llega a los sectores en donde se emprende campañas de ayuda a los sectores más desposeídos de la ciudad, así como dirige las campañas de limpieza y desinfección a efectos de prevenir el contagio del virus.

Inclusive, muchos deben convenir en el hecho que el alcalde es una autoridad que podría excusarse de salir de su domicilio en estas circunstancias en la medida que por su contextura física es una personas que esta mas propensa a adquirir el mal y sufrir consecuencias mas severas que otros, empero, lo hemos visto asistiendo a las campañas y encabezonado las reuniones de la Plataforma de Seguridad Ciudadana que preside o las sesiones de concejo en las cuales deben aprobarse los acuerdos en aras de sostener esta titánica lucha contra el coronavirus.

De la misma manera, en Nuevo Chimbote se mantienen medidas efectivas para protegerse a la población, si bien es cierto allí el alcalde Domingo Caldas ha preferido ponerse al frente de las campañas de ayuda social, ha dejado la mecánica de las acciones preventivas en manos del gerente municipal que ha cumplido hasta la fecha con una gran labor a la luz de los resultados que se observan en las últimas semanas.

De allí que no puede dejar de resaltarse la labor que realizan las autoridades ediles y regionales en la tarea de prevenir el avance del coronavirus, se trata de hombres que son conscientes que exponen su propia salud al tener que movilizarse por varios puntos de la ciudad o de la región, sino que están en contacto con personas que atienden a los casos confirmados y que hacen frente como ellos a la enfermedad, empero, tienen que cuidarse con las prevenciones que se han difundido hasta el hartazgo.

De allí que no podemos dejar de relievar este encomiable esfuerzo que vienen haciendo quienes nos representan pues, al margen de cualquier inquina de tipo político, no hay que soslayar la decidida intervención que les quepa realizar en la medida que hacen frente a un virus que se puede pegar en cualquier momento y que cuando lo hace es capaz de desatar serios estragos en el organismo de quienes presentan alguna contingencia médica que los hace propensos a sufrir males mayores.

Por el bien de la ciudad y la región tenemos que pedir al altísimo que protejan a nuestras autoridades, a nuestros funcionarios que salen a las calles a tomar medidas preventivas, a los trabajadores del sector salud que deben poner el pecho ante los pacientes infectados, a las fuerzas armadas y policiales que tienen que vigilar que los irresponsables no destruyan la estrategia sanitaria propagando el mal, en fin que se proteja a todos que desde su rol tienen que sostener las acciones de prevención para que se desvirtúe la ofensiva de este COPVID 19 que ya viene ocasionando serios estragos en el campo económico, político., social, etc.