Editorial

::: CIFRAS DE ESPANTO :::

El gobierno ha ratificado que no existe en este momento intención alguna de volver a un confinamiento absoluto, como en la primera parte de la pandemia, ni existe una evaluación que se esté haciendo en ese sentido, tal como se rumoreaba en los corrillos políticos.

Por el contrario, el Ejecutivo mantiene el monitoreo a las medidas que ha dictado al iniciarse el año y tras verificarse el rebrote de la enfermedad en todo el país, inclusive, con la verificación de la presencia de una cepa británica que ha resultado mucho más contagiosa y, sobretodo, agresiva.

Justamente, esto último es lo que se advierte en nuestra ciudad, un incremento sostenido de contagios pero, esencialmente, de pacientes fallecidos, tanto así que esta semana se ha superado la barrera de los dos mil decesos de Áncash desde que se inició la pandemia.

Esta cifra nos da una idea de la gravedad de la situación sanitaria de Ancash y, particularmente, la de Chimbote, pues se tiene que tener en cuenta que las cifras de nuestra ciudad representan el 50% de todos los contagios y decesos de la región, y, si a ellas sumamos las que corresponden a Nuevo Chimbote, loa registros del Covid en nuestra jurisdicción rebasan el 60% de todos los casos positivos de Ancash.

De allí que no puede ser sino preocupante el avance del Covid en nuestro Puerto, y en Ancash, pues a todo lo mencionado hay que añadir el ritmo de crecimiento de los contagios que tras el descenso de las cifras, desde setiembre del año pasado, han comenzado nuevamente a encumbrarse en niveles inquietantes.

Por ejemplo, en poco más de una semana los registros pasaron de 44 mil infectados a 45 mil, cifra que llegó el pasado domingo 10 de este mes y, conforme al ritmo que se tenía hasta entonces no se advertía la posibilidad que la estadística se dispare.

Sin embargo, el pasado domingo 10 se llegó a los 45 mil casos positivos y hasta el día de anteayer miércoles, pues al momento de cerrar esta columna editorial aun no llegaban las cifras de ayer jueves, ya se tenía a 45,600, quiere decir que en dos días más ya estaremos sobre los 47 mil si el ritmo de contagios no cede.

Por ello es que las autoridades han tomado medidas en todo nivel, el hospital La Caleta volvió a acondicionar sus carpas para la atención de pacientes Covid, el hospital regional no desactivó su centro de atención temporal y está en condiciones de recibir a la afluencia de contagios que se tiene a la fecha, excepción hecha de aquellos casos graves que requieren una atención en UCI, pues estas camas especializadas si están escasas.

Por su arte Essalud ya anunció la instalación de Centros de atención temporal que, en el caso de nuestra ciudad, ya no se ubicará en el Estadio Manuel Rivera Sánchez, como el año pasado, sino que lo hará en los terrenos que tiene al costado del hospital I de Essalud, en donde se tiene previsto construir desde el próximo año el Hospital de alta complejidad de nivel IV.

Allí hasta la fecha Esssalud cuenta con una unidad covid en donde atiende a los asegurados que llegan con síntomas de enfermedades respiratorias y se les hace el descarte, además de la entrega de tratamiento en los casos en los cuales se requiera.

Es evidente que existe la necesidad de afianzar los servicios de salud pues el Covid ha regresado con ganas de hacer más daño, esa ya es una verdad de perogrullo y las autoridades sanitarias tienen la responsabilidad de multiplicarse como lo hicieron en los peores momentos de la pandemia el año que pasó.

Afortunadamente, la Municipalidad Provincial del Santa ha conseguido poner en funcionamiento la planta de elaboración de oxigeno medicinal y el alcalde ha tomado la gran decisión de entregarlo gratuitamente a los centros de atención de salud y los pacientes que lo requieran con receta médica.

Este aliciente se suma a la Planta de Oxigeno Medicinal que también ha implementado el colectivo civil “Oxigeno es Vida”, bajo la batuta del padre Giovanni Sabogal, y que viene ofreciendo este importante compuesto a precios módicos, solo para obtener lo suficiente para la compra de insumos y seguir brindando este servicio a los pacientes.

De allí que por ese lado nuestra ciudad esta asistida, los pacientes tienen dónde acudir y no es como antes que se angustiaban porque no había alternativas, sin embargo, hay que entender de una buena vez que si estamos así, pasando estas penurias y momentos complicados es por la falta de responsabilidad de la gente, por no tomar las medidas preventivas y, además, incurrir en infracciones al régimen sanitario como reunirse con amigos, familiares o acudiendo a fiestas y bailes.

Esa ha sido la causa de esta disparada de contagios y decesos, al extremo que estamos viendo cifras de espanto, que nos hacen pensar que seguimos en riesgo hasta en tanto no llegue la vacuna. Que Dios nos proteja.