Opinión

EL DESARROLLO DE LA AGRICULTURA EN LA CUENCA DE NEPEÑA

Por: WALTER MIGUEL QUITO REVELLO (*)

Hablar de agricultura y sobre todo de su desarrollo, es algo complejo en nuestro país, no solo por las leyes que debería servir para ordenarnos sino por la idiosincrasia de los agricultores, que lejos de organizarse para hacer frente a estos problemas, y resolver su situación jurídica de tierra y agua o pensar en temas de tecnología y mercado se ven enfrascados en conflictos de usurpaciones y lucha constante por el agua. Vamos a ver este problema desde la Cuenca de Nepeña un poco superficial, pero atacando lo más neurálgico del problema.

En nuestro país una serie de leyes regula la tierra desde la Constitución en su artículo 88°: “El Estado apoya preferentemente el desarrollo agrario. Garantiza el derecho de propiedad sobre la tierra, en forma privada o comunal o en cualquiera otra forma asociativa (…)” Y se olvida de la posesión que protegía la Constitución del 79. Hasta leyes de menor jerarquía como: la Ley de Comunidades Campesinas, Ley del Registro de Predios Rurales, COFOPRI, PETT, Ley de Promoción de las Inversiones en el Sector Agrario, etc. Que hasta la fecha no han servido para terminar con el proceso de formalización de la propiedad. Para tener una idea, ni las grandes empresas agroindustriales de la Cuenca de Nepeña han terminado su proceso de titulación con todo el poder económico, político y asesoría jurídica. Imaginemos a los pequeños agricultores. Mientras no se termine el proceso de formalización de las tierras será una limitación, al proceso de desarrollo de la agricultura en nuestra Cuenca.

Al no haber cumplido con la tarea, de saneamiento físico legal de las tierras de la Cuenca. Muchos posesionarios por la fuerza o por procesos judiciales han perdido sus tierras. El Poder Judicial en la Provincia del Santa, fiel obediente a las jurisprudencias nacionales le da más valor al título de propiedad aun cuando el poseedor demuestra tener muchos más años la tierra. Y porque no saneo en su oportunidad y otro vivo se lo adjudico le dan la razón a quien lo obtuvo ilegalmente. ¿Algún día habrá un magistrado que resuelva desarrollando estas dos grandes instituciones jurídicas en concordancia con la realidad de la Cuenca? Por ahora no lo hay. La fuerza que ejercen contra pequeños agricultores poseedores para quitarles sus tierras. Perseguibles por el delito de usurpación. Los fiscales se cierran los ojos cuando el usurpador es una gran empresa, pero cuando el usurpador son pequeños agricultores ejercen todo su poder. De ahí la urgencia del saneamiento físico legal de los terrenos de la Cuenca de Nepeña.

Por otro lado, tenemos el problema de la distribución del agua, que debería ser más sencillo, porque tenemos la Ley de Recursos Hídricos y su reglamento. En donde está regulado para acceder al agua para la agricultura que es mediante la licencia cuando no afecta derecho de agua a terceros y permisos en tiempo de superávit siendo su principal requisito para la licencia de agua según, el art 54°, apartado 7 ”acreditación de la propiedad o posesión legítima del predio donde se utilizará el agua solicitada, cuando corresponda” y para el permiso art. 60°, apartado 1: “Que el solicitante acredite ser propietario o poseedor legítimo del predio en el que hará uso eventual del recurso” de la Ley. En conclusión, si yo acredito mi propiedad o posesión lo que será verificado por la autoridad de aguas y cumplo con los demás requisitos no debería tener ningún problema para acceder al derecho de agua para la agricultura. Sin embargo, en la práctica no es así. En la parte baja o costa, las aguas del proyecto CHINECAS lo utilizan mayormente la azucarera San Jacinto y algunas empresas agroexportadoras. Obligando a los posesionarios a robar el agua. Un poco más arriba, en San Jacinto, los posesionarios ven frustrados sus deseos de cultivar la tierra porque ni en tiempos de superávit la Autoridad de Aguas, les da permiso, es más, hasta la fecha no he visto una resolución administrativa de la Autoridad local de Aguas declarando superávit pese a cuantas avenidas por fenómenos del Niño o los tiempos de lluvias, para que los que no tienen licencia puedan pedir su permiso y sembrar sus tierras. En la parte más alta la lucha es casi a muerte, por el agua.

El agua elemento importante para la agricultura. Hay muchos estudios en la Cuenca para su aprovechamiento. Que debería comenzar en las partes altas, en la cordillera con la recuperación de nuestras más de 40 lagunas que nuestros antepasados habían construido. Lo que tenemos que hacer es recuperar la ingeniería y toda la técnica empleada en las represas pre-inca e inca y con la tecnología actual poner en actividad todas las represas y lagunas de la Cuenca, y desarrollar la agricultura desde la parte más alta en la sierra hasta la costa.

Es hora de cambiar de mentalidad y dejar de lado los intereses personales y políticos y contribuir con el desarrollo del país. A veces pienso en voz alta y me pregunto: ¿Cómo terminar con todos aquellos que nos roban, la tierra, el agua, el trabajo, el derecho a la felicidad, la vida? Y me respondo. Si aplicáramos la Ley del incario, AMA SUA, no seas ladrón, y a su incumplimiento le aplicáramos la HUIYA, que consistía en hacer caer una piedra sobre el espinazo del infractor. Quizás hubiera mejores resultados. Pero en un país en democracia la concertación de los diferentes sectores debe ser la solución.

Frente a los profundos problemas de la agricultura en Nuestra Cuenca de Nepeña. La única forma de resolverlo en la actualidad, es mediante la Mancomunidad de la Cuenca de Nepeña, que debe ser impulsado e integrado por los gobiernos locales de Pamparomas, Cáceres del Perú, Moro, Nepeña y Samanco, en donde deben participar el Gobierno Regional de Áncash, el gobierno provincial del Santa y todo los Ministerios del país. Para elaborar un Plan de Desarrollo para la Cuenca Nepeña, en donde tengamos una gran visión y misión al 2030 con ejes de desarrollo, con objetivos estratégicos y específicos, y con acciones concretas en: saneamiento físico legal de la tierra, distribución equitativa del agua, tecnificación de la agricultura y ganadería, mejorar de las vías de comunicación, mercado interno y externo, comercio, turismo, investigación agropecuaria, seguridad ciudadana entre otros y con metas, para ponerla en ejecución.

Nepeña 24 de octubre del 2021

(*) Abogado CAS 2748 – DNI 32950023/ Cel 944998355