Ante inundación en Villa María:
Los vecinos del pueblo joven Villa María ya no saben a quién acudir en busca de solución a los sucesivos problemas que continuamente afectan a este sector de Nuevo Chimbote. Desde hace algunos días varias de sus calles y avenidas permanecen completamente inundadas, pero hasta el momento de escribir este comentario ninguna autoridad ha mostrado interés en atender y dar solución al problema.
Como lo ha dado a conocer el Diario de Chimbote en su edición de ayer, la causa de esta inundación es algo insólito e inaceptable por donde quiera que se le mire. No se sabe con autorización de quién, lo cierto es que alguien ha tenido la osadía de construir una pared de ladrillo que bloquea por completo el dren que evacúa las aguas de regadío provenientes de la zona agrícola de Tangay. Al no poder seguir su curso natural con dirección al mar, las aguas han inundado un gran sector del pueblo joven y amenazan con ingresar a las viviendas en cualquier momento.
Como es fácil deducir y tal como lo afirma un dicho popular, estas cosas solamente suceden cuando las autoridades ‘hacen’ agua, es decir cuando prefieren dormir en sus laureles y permiten que cualquier persona haga lo que le dé la gana. Otra explicación no hay.
En el supuesto caso que la construcción de la pared de marras cuente con alguna autorización municipal, quedaría claro que se han pasado por alto normas elementales de construcción, seguridad y medioambientales. En principio, ningún dren puede ser bloqueado. Hacerlo significaría exponer al vecindario a soportar una inundación permanente, como la que están viviendo en este momento los moradores de Villa María. A decir de los profesionales en ingeniería civil e hidráulica, en ocasiones como ésta primero se tendría que canalizar o cambiar el curso del dren, pero bajo ningún concepto bloquearlo. Es imposible ir en contra de las leyes de la naturaleza.
Pero asimismo, si, como todo parece indicar, estamos ante una construcción ilegal, entonces hace rato que las autoridades han debido poner el parche. Si no estamos equivocamos, nos referimos en ese orden a la Autoridad Nacional del Agua, al ministerio de Agricultura, a la municipalidad provincial del Santa, y, por supuesto, a la Fiscalía del Ambiente.
La razón de ser de estos organismos es justamente advertir, hacer frente y finalmente buscar una solución inmediata a este tipo de problemas, sin dar tantas vueltas al asunto. Para eso han sido creados y para eso tienen a su disposición el personal y las herramientas legales correspondientes. Mal harían entonces en hacerse los desentendidos y dejar que los vecinos de Villa María arreglen sus problemas por sí mismos.
Podría ser que en algunos de estos organismos existan vacíos de autoridad y ciertas limitaciones que impidan desarrollar una labor efectiva y oportuna, pero también es cierto que existen planes de contingencia. Mientras se busca una solución definitiva al problema, el objetivo de estos planes es evitar que una comunidad se vea afectada por tanto tiempo. En todo caso, es cuestión de aplicar la ley y punto.