Opinión

RECESIÓN 2023 (*)

A inicios de 2023, la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI) mencionó que, para este año, se prevé que casi un tercio de la economía mundial entre en recesión. Pero ¿qué significa recesión?

Según el FMI, no hay un consenso claro respecto a cómo definir “recesión”; sin embargo, algo que sí está claro es que, en términos generales, implica la contracción de la actividad económica. Para algunos economistas, un país entra oficialmente en recesión cuando presenta caídas en el PBI durante dos trimestres consecutivos. Aunque, por otro lado, la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBE, por sus siglas en inglés) de EE. UU. considera que una recesión no solo debe determinarse por el comportamiento del PBI, sino que también deben observase otros indicadores como el nivel de desempleo, el ingreso real, la producción industrial y las ventas de manufactura y el comercio.

LA DE 2008

Han transcurrido cerca de 15 años desde que se originó en EE. UU. la llamada Crisis Financiera: uno de los sucesos más transcendentales de la historia económica mundial. El origen de esta crisis se debió, principalmente, a la laxa política monetaria aplicada por la Reserva Federal (FED, por sus siglas en inglés), pues redujo la tasa de interés del 6.5%, a inicios de 2001, hasta apenas el 1%, en 2004.

Según estudios, el impacto de esta crisis financiera fue muy fuerte en el sector real de la economía estadounidense: i) la producción industrial, en términos anuales, fue un 10% menor a la observada en enero de 2008; ii) el PBI se redujo un 6.2% en el cuarto trimestre de 2008 y iii) la tasa de desempleo llegó al 8.5% en marzo de 2009.

Ahora bien, esta crisis terminó extendiéndose a Europa, lo que generó la recesión de la eurozona en 2009. Asimismo, los países de América Latina no fueron inmunes a este suceso internacional. La crisis económica por la que atravesaban los países industrializados se trasmitió a los países latinoamericanos a través de tres mecanismos principales: i) remesas, que se estancaron en el 2008, con lo cual el flujo de dólares se vio afectado; ii) comercio exterior, pues se contrajo el volumen de comercio mundial y el precio de las materias primas; y iii) financiero, debido a la reducción de los flujos de capital extranjero.

¿QUÉ LE ESPERARÍA AL PERÚ ESTE 2023?

En EE. UU., los elevados niveles de inflación han obligado a la FED a elevar constantemente, y de forma agresiva, su tasa de interés. Lo mismo sucede en la zona euro, la cual también se ha visto afectada fuertemente por el alza de los precios del gas natural, a causa de la guerra entre Rusia y Ucrania. Por otro lado, en China, el aumento abrupto de contagios frenaría diversas cadenas manufactureras. Es en este contexto en el que se ha previsto que los países industrializados entren en una recesión para el 2023. ¿Cómo se vería afectado el Perú?

Uno de los sectores peruanos más afectados por un posible contexto de recesión sería el comercio exterior, pues esos países son nuestros principales socios comerciales. Así, por ejemplo, según cifras de la Sunat, en el periodo enero-noviembre, China representó un 33.2% de nuestras exportaciones totales al mundo; mientras que EE. UU., un 13.5%. Asimismo, China y EE. UU. tienen una participación importante sobre las importaciones peruanas del 28.6% y el 18.7%, respectivamente, con respecto al total de nuestras importaciones del mundo.

Este impacto negativo en el comercio internacional del Perú terminaría también afectando el flujo de dólares existente, lo que se traduciría en un impacto sobre el tipo de cambio. Asimismo, ese menor volumen exportado implicaría un menor ingreso para el sector, lo cual afecta a dos factores: i) la capacidad de consumo de las familias del sector; y ii) la capacidad de pago para el personal empleado en el sector. Es decir, se verían afectados el consumo y el nivel empleo en el sector, aspectos que luego se transmitirían al resto de los sectores, con lo cual la economía en general se terminaría perjudicando.

Para amortiguar este tipo de shock externo, es necesario que el Gobierno ejecute las acciones que viene planificando; sin embargo, el gran reto también será contar con la habilidad necesaria para afrontar la escalada violentista que se vive, particularmente en el sur del país. Las intenciones del Gobierno por recuperar la senda de crecimiento por encima del 3% dependerán mucho de la estabilidad política y su efecto en el desarrollo de la economía.

(*) Por ComexPerú / Publicado en Enero 13, 2023 / Semanario 1148 – Hechos de Importancia