Por: WALTER MIGUEL QUITO REVELLO
Nuestra región recibe muchos millones del gobierno central, es una de las más ricas del Perú sin embargo, descuidamos la salud, no preservamos nuestra vida ni cuidamos la vida de nuestras futuras generaciones, al dejar que nos contaminemos con plomo y arsénico, o quizás con otros metales pesados.
El lunes 29 de enero me encontraba trabajando por el distrito de Cáceres del Perú (Jimbe) y de curiosidad ingrese a la Municipalidad y escuche que el personal de salud informaba que de doce niños, ocho niños habían dado positivo para plomo y arsénico en el caserío de Rayan, y en otro caserío de cinco niños tres dieron positivo para plomo y arsénico. Entre otras conclusiones acordaron que el alcalde se comprometía para el lunes cinco de febrero, recién llevarlos al hospital de Chimbote. Lo que ya es preocupante, la lentitud, al ser un problema de salud que quizás es de toda la Cuenca de Nepeña
Para ver lo inoperante de la administración pública en los diferentes niveles de gobierno, vamos a sus funciones. Según la Ley orgánica de municipalidades, N° 27972, en su artículo 80° son funciones de la Municipalidad distrital de Cáceres del Perú, realizar campañas locales sobre medicina preventiva, primeros auxilios, educación sanitaria y profilaxis. La Ley en referencia nos dice que son funciones compartidas entre la Municipalidad distrital de Cáceres del Perú y la Municipalidad Provincial del Santa, fiscalizar y realizar labores de control respecto de la emisión de humos, gases, ruidos y demás elementos contaminantes de la atmósfera y el ambiente. Y según la Ley Orgánica del Gobierno Regional, N° 27867, en su artículo 49°, son funciones del Gobierno Regional de Ancash, en materia de Salud, Promover y ejecutar en forma prioritaria las actividades de promoción y prevención de la salud y Promover y preservar la salud ambiental de la región. Para este trabajo desde el gobierno central le han destinado en el PIA (Presupuesto Anual Institucional), a la municipalidad de Casares del Perú (Jimbe) en el año 2023, quince millones y en el año 2024 catorce millones; a la Municipalidad Provincial del Santa, en el año 2023, quinientos veintitrés millones y para el año 2024, trescientos noventa y tres millones; al Gobierno Regional de Ancash le destinaron en el año 2023, tres mil treinta y cuatro millones y en el 2024, dos mil seiscientos sesenta y cuatro millones, y no puede realizar una prueba de descarte de metales pesados en el Valle de Nepeña, que esperar de toda la Región.
Para comprender el problema, el plomo en el cuerpo ocasiona daños permanentes en el cerebro y el sistema nervioso. Estos daños pueden provocar convulsiones, pérdida del control muscular y coma. En un niño, la exposición al plomo puede interrumpir el desarrollo durante su etapa de crecimiento. Y la exposición prolongada al arsénico a través del consumo de agua y alimentos contaminados puede causar cáncer y lesiones cutáneas. También se ha asociado a enfermedades cardiovasculares y diabetes.
Si bien, es cierto, la contaminación puede ser por los alimentos, también puede ser por el agua, y teniendo tantas mineras formales, en proceso de formalización e informales, en la cuenca, es urgente que primero se realice muestras en toda la cuenca de Nepeña tanto en la población adulta y niños como en el agua para descartar cualquier tipo de contaminación o que un personal de la materia nos diga si esos valores de plomo y arsénico son permisibles para la salud.
Esperemos que a través de esta tribuna llegue a los oídos de nuestras autoridades y tomen preocupación por la salud del pueblo y la protección de nuestras futuras generaciones sino queremos tener una generación enferma de cáncer, diabetes lleno de mongolitos, eligiendo a otros mongolitos.