El año pasado, cuando la Policía entregaba las conclusiones de las pesquisas realizadas en torno a los crímenes del alcalde de Casma José Montalbán Macedo y de la abogada Milagros Aponte Roque, las cuales involucraban al ex alcalde Rommel Meza Cerna, éste último formulaba una contradenuncia que buscaba mellar las pesquisas y ensuciar la labor que se ha realizado a lo largo de todos estos años.
Se trata de una denuncia por supuesta extorsión que formuló el ex alcalde casmeño alegando que había sido objeto de presiones por parte de efectivos policiales con la finalidad de sustraerlo de las investigaciones, señalaba en ese entonces que le habían exigido el pago de 100 mil nuevos soles o de lo contrario sería envuelto en estos crímenes, agregando que como no lo hizo lo colocaron como autor intelectual.
Esta denuncia se formuló apenas se conocieron las conclusiones ampliatorias de los crímenes del alcalde José Montalbán y de la abogada Milagros Aponte, en las cuales se concluyeron que ellos fueron víctimas de una red criminal encabezada por el ex alcalde Rommel Meza y que estaba integrada por un empresario que se benefició con las obras en el Municipio luego que Meza asumiera la alcaldía, así como una serie de delincuentes peligrosos de la vecina provincia.
Como consecuencia de las pesquisas policiales el poder judicial determinó dictar una orden de prisión de 18 meses contra Rommel Meza y, advertido de esta situación, aquel se ocultó y desde entonces se encuentra como prófugo de la justicia, habiendo planteado la denuncia contra los Policías desde la clandestinidad.
Para probar su acusación el ex alcalde adjuntó un CD que decía contener un audio en el que se escucha como es extorsionado por los policías, sindicando como responsables de este hecho al jefe de la división de Investigación Criminal de la Policía de Chimbote, coronel Jorge Pérez Llanos, así como a dos sub oficiales que estuvieron a cargo de las pesquisas en la vecina provincia.
Aun cuando el año pasado no se le tomó mayor importancia a esta denuncia teniendo en cuenta que los cargos se calibran como de quien vienen, la semana pasada este caso retomó las primeras planas al conocerse que el fiscal a cargo de la carpeta había convocado a las partes para transcribir el contenido el audio y llamó a peritos para que se pueda homologar la voz de quienes toman parte en la conversación.
En la medida que estas audiencias son privadas, ha trascendido que la diligencia se realizó sin contratiempos, con presencia de la defensa técnica de los investigados y de la procuraduría pública, en la cual se ha escuchado una conversación entre el ex alcalde Rommel Meza con un suboficial, así como otra tertulia entre dicho efectivo policial con el hermano del ex alcalde denunciante quien, curiosamente, es miembro de la Policía Nacional y aprovechaba esta condición para conocer los entretelones de las actuaciones que realizaba el equipo a cargo de la investigación.
Sin embargo, quienes han escuchado el audio, por lo menos la trascripción de las partes pertinentes en el acta levantada en dicha diligencia, han advertido que no contiene ninguna sindicación delictiva como para suponer que estaban extorsionando al ex alcalde Rommel Meza, todo se remite a conversaciones y es el sub oficial que en una oportunidad dice que estaban esperando el apoyo de parte del investigado.
Sin embargo, el argumento principal que trata de desprestigiar la labor del Jefe policial, coronel Jorge Pérez Llanos, se ha desvirtuado por completo, no mencionan su nombre, no aparece su voz y menos aún se hace referencia a que tendría algún interés en cobrar una suma de dinero para que se pueda sustraer al investigado en el atestado policial.
Y, es que el denunciante sindicaba directamente a Pérez Llanos de estar detrás de la extorsión, señaló que lo llamaban por un sobrenombre de “paco”, empero, en toda la grabación que se ha entregado a la Policía se escucha una sola vez que se menciona este apelativo y quien lo hace, curiosamente, es el mismo Rommel Meza, en lo que se podría entender que se trata de involucrarlo de alguna manera.
Por lo demás las conversaciones derivan del interés de un familiar directo, como es el hermano del alcalde, por conocer el avance de las investigaciones y teniendo en cuenta que su condición de miembro de la misma institución le facilitaba esta pretensión, se trataba de igual a igual con los agentes a cargo de las pesquisas, pero tampoco se advierte que hablen de algún pago como producto de algún soborno o chantaje.
De allí que lo que muchos sospechamos desde un principio, es decir, que se trataba de una estrategia que buscaba desacreditar a los investigadores en aras de destruir la tesis incriminatoria en contra del ex alcalde de casma, tiene asidero ahora que se ha podido escuchar el famoso audio que fue promocionado por un sector de la prensa como un trofeo de guerra, asumiendo que el acusado de un doble crimen era quien decía la verdad y que los malos de la película serían los Policías que investigaron los hechos.
Esto llama poderosamente la atención cuando existen otros elementos que hicieron sospechar mucho del ex alcalde Rommel Meza, como el famoso reportaje difundido por un canal de televisión de Lima que pudo obtener las imágenes de dicha autoridad cuando visitaba la celda de uno de los involucrados en el crimen de su antecesor, cuando fue detenido por otro hecho en la comisaría de Casma.
Esto se produjo apenas unos minutos después que el mismo detenido recibiera la visita de su abogada, Milagros Aponte Roque, quien gestionaba que se acoja a la colaboración eficaz y revele quienes fueron los autores intelectuales del crimen del alcalde “Lito” Montalbán. Â No es una exagerada coincidencia que la abogada fuera asesinada una hora después de todos estos hechos.
Es evidente que la denuncia por actos extorsivos contra los agentes de la Policía ha sido forzada por el denunciado ex alcalde de Casma, se ha tratado de sacar de contexto las conversaciones con un sub oficial y se ha pretendido presentar la alusión a un apoyo desconocido como si se tratara de un pedido de 100 mil soles de coima, de allí que estamos ante un audio discutible, que no genera convicción sobre los cargos que trata de probar y que, seguramente, será desestimado por la fiscalía en su oportunidad.