El gobierno central dictó en el epílogo del año 2019 un decreto supremo declarando en emergencia a varias provincias de diferentes regiones del país, disponiendo medidas extraordinarias en caso se presenten fenómenos pluviales y fluviales por la temporada de lluvias que suele registrarse durante los meses de verano.
Muchos advierten en esta medida una necesidad del gobierno de turno de estar preparados para lo peor, pues antes ni siquiera los pronósticos de los organismos encargados de monitorear el clima pudieron anticiparse a fenómenos imprevistos y brutales como, por ejemplo, el Niño Costero.
Por ello ahora ha dictado un dispositivo a efectos que los gobiernos locales y regionales puedan tomar medidas preventivas, se puedan apuntalar trabajos de emergencia para la protección de los cauces de los ríos y anticiparse a cualquier desgracia que pueda deparar la naturaleza.
Sin embargo, desde la expedición de esta norma solo el alcalde de Nuevo Chimbote Domingo Caldas ha reaccionado con la diligencia que amerita esta situación y se ha desplazado hacia los puntos más vulnerables que tiene el distrito sureño a efectos de adoptar medidas preventivas en todos aquellos que lo requieran.
La visita técnica realizada por el burgomaestre se concentró en las zonas que serían las más afectadas en periodo de intensas lluvias, tales como el Río Lacramarca, los drenes de PPAO, la zona conocida como Ladrillera, el Cementerio Lomas de la Paz, Villa Sol, Av. Industrial de Tangay, Av. Brasil y la carretera Panamericana.
Al ser interrogado por la prensa el alcalde fue enfático en señalar que esta inspección se realiza a todos los canales del distrito, porque con la declaración de emergencia ya se encuentran en condiciones de empezar los trabajos de prevención, que son los llamados a menguar o impedir que se produzcan desgracias.
Sin embargo, lo que más ha sorprendido a las autoridades y al propio Alcalde son las deplorables condiciones en las que se han encontrado muchos canales debido a la gran cantidad de basura que se arroja al lecho de los mismos.
En ese sentido, Caldas Egusquiza hizo un llamado a sus vecinos a evitar contaminar los canales y promover sus desbordes arrojando basura y deshechos a los ríos, lo que tienen que hacer es dejar su basura para que lo recojan los carros compactadores y si por alguna razón los vehículos no llegan a esa zona deberían presentar una solicitud a la Municipalidad para que se hagan los despliegues necesarios, pero de ninguna manera se puede estar arrojando los desperdicios a los canales.
Es importante que el alcalde haya decidido desplazar y comprometer en esta tarea a sus gerencias de línea, pues en la visita de inspección se le vio acompañado de Gerente Municipal, la Gerencia de Desarrollo Urbano y Sub Gerencia de Defensa Civil de la comuna sureña, además de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y la Junta de Usuarios de IRCHIM.
Y es que el alcalde Domingo Caldas ha tenido malas experiencias con relación a estos temas y los desvaríos provocados por los atoros y desbordes de los canales que discurren por el distrito, de allí que si existe la posibilidad de anticiparse a una nueva emergencia con la viabilidad que les otorga el decreto de emergencia, entonces ha considerado imperativo que se comience a trabajar en estos temas.
Muchos deben recordar que el año pasado, sin que exista una emergencia de lluvias, se registraron sendos desbordes en la avenida Pardo, a la altura del P.J. Tres de Octubre en donde el nivel de las aguas de los humedales creció y se desbordó hacia la zona habitacional y comercial del P.J. Primero de Mayo, generando serios inconvenientes hasta en dos oportunidades.
En aquella ocasión el alcalde fue testigo de los trabajos que se realizaron para solucionar este problema y descubrieron que se trataba de las alcantarillas subterráneas que se ubican debajo de la avenida Pardo y que trasladan las aguas de los excedentes de la zona agrícola y las llevan hacia el mar.
Las dos alcantarillas que hacen este trabajo se obstaculizaron por la enorme cantidad de basura, desechos y palos que arrastran estos canales, de allí que para evitar cualquier contratiempo lo que se requiere es mantener limpios los cabales y protegerlos de la mano que los contamina.
Así como este, existen muchos drenes y canales que atraviesan el distrito y que evacúan aguas que bajan de las quebradas altas y que se utilizan en el riego de las zonas agrícolas, incluso hay algunos que gran parte del año se mantienen secos y allí la gente inescrupulosa aprovecha para arrojar los desperdicios, lo que representa un serio peligro cuando ese dren se active y deje discurrir agua.
Muchos deben recordar en la época del Niño Costero los desbordes del canal que pasa por un costado de la urbanización Bruce, el cual se desbordó por el A. H. Los Geranios, provocó serios daños en ese lugar y luego sus aguas discurrieron por las principales vías del distrito, llegando inclusive hasta la avenida Anchoveta.
Son estos drenes y canales los que se deben atender en caso comience una temporada de lluvias intensas, por lo menos se sabe que en algunos sectores de la zona altoandina de la regiónÂÂÂ ya arrecian las lluvias y con ello los ríos y quebradas comienzan a activarse y mostrarse amenazantes para los pueblos de la zona costera.
Ha sido una buena medida la del alcalde sureño salir al campo y observar las condiciones en las que se encuentran los puntos vulnerables ante un periodo de lluvias, mas aun cuando existe una emergencia decretada y que incluye a Nuevo Chimbote y con cuya herramienta legal se hace posible desarrollar proyectos inmediatos a efectos de estar protegidos ante una emergencia.
Justamente, este es el quid del asunto, las autoridades no solo de los municipios sino de todas las reparticiones públicas y regionales deben entender que la prevención es la clave, es la llave que puede cerrar la puerta de las amenazas y riesgos que deja una emergencia de lluvias y eso lo sabemos por experiencia propia. Esperemos que todas las autoridades ediles activen sus protocolos de emergencia y no espere a último momento.