Editorial

::: OPORTUNA CONVALECENCIA :::

El ultimo fin de semana, tal y como lo habíamos calculado, el gobernador regional Juan Carlos Morillo Ulloa, dejó el hospital “Edgardo Rebagliati” tras haberse recuperado de las graves secuelas que le generó el Covid 19, enfermedad que adquirió en los múltiples desplazamientos que realiza en el ejercicio de sus funciones.

Visiblemente recuperado, al Gobernador se le pudo ver restablecido y, para que no queden dudas, dispuso que su personal de confianza remita a los medios de comunicación la orden de alta médica que le extendieron en el nosocomio, mediante la cual se le autorizaba a retirarse a su domicilio.

Imaginamos que esto lo hizo en el entendido que en estas difíciles semanas que le tocó vivir, existieron muchos personajes siniestros que trataron de desmerecer su proceso de recuperación y no ocultaban sus malos augurios frente a esta grave enfermedad.

Sin embargo, a pesar de las dudas sembradas por muchos, el gobernador ha superado un procedimiento médico que no ha sido sencillo, si se sacan cuentas ha debido estar internado 24 días y si recurrirnos a antecedentes médicos llegaremos a la conclusión que es el mismo periodo en el que otras personas que han adquirido el Covid han conseguido recuperarse de este mal.

En el caso de la autoridad ancashina las dudas surgieron por el hecho que tras ser trasladado a la capital de la república, apenas un día después fue llevado a la sala de cuidados intensivos (UCI) porque el virus había avanzado mucho en su organismo, especialmente en los pulmones y había que someterlo a una asistencia ventilatoria.

Los médicos son los que conocen esta materia, saben cuándo una persona debe ser sometida a una ventilación simple, a una intubación, cuando debe ser sometido a un coma inducido y en qué momentos se deben aplicar procedimientos especiales para evitar que el virus pueda derrotar a organismo del paciente.

Allí estuvo el caso del Gobernador, fue necesario aplicarle los procedimientos más delicados y se pensó que por ello no solo estaba en riesgo de muerte sino que su tratamiento tomaría mucho tiempo, los más optimistas, entre sus opositores esperaban que no retorne sino hasta dentro de dos o tres meses.

Por ello es que se dieron a conocer la existencia de pugnas entre consejeros y funcionarios, hubo intercambio de interjecciones, pues quienes no se dejaron llevar por cálculos informales o especulaciones y apelaron al conocimiento de los reportes médicos, como nuestro medio de comunicación, sabíamos que el proceso de recuperación del gobernador podría cristalizarse en poco tiempo.

Y cuando esto ocurrió, cuando se advirtió una impresionante mejoría al cabo de una o dos semanas de tratamientos agresivos, y, en la medida que el organismo de la autoridad regional respondía a los medicamentos que son apropiados para hacer frente a una enfermedad, los enemigos del gobernador insistían en un asunto trillado y absurdo, como la supuesta imposibilidad de observar una mejoría tan repentina.

En realidad esto ya cansa, repetir que el gobernador se pudo recuperar al cabo de tres semanas de internamiento era justo y necesaria, pues a pesar del escepticismo de unos cuantos, los reportes médicos fueron evacuándose con transparencia y decían de las mejoras que estaba observando el paciente.

Al margen que no se puede jugar con la salud de las personas y no se desear el mal a nadie, satisface que la Región encuentre el camino hacia su timonel, seguramente esta semana ya tendremos al gobernador en su cago y dispuesto a seguir dando batalla contra el covid 19, más aún cuando ha sido una de las víctimas de esta pandemia que sigue agobiando en todo el mundo.

Es evidente que una de las razones para esta oportuna convalecencia ha sido su edad, la juventud que lo acompaña en esta fase de su trayectoria política y que se convirtió en el elemento fundamental para su total recuperación. Estamos seguros que este desenlace pone fin a los atisbos de inestabilidad que pudo generar la enfermedad del gobernador. Hay que dar vuelta a la página y retomar las gestiones y medidas para seguir enfrentando a esta pandemia.