Editorial

Editorial: ::: UNA OBRA DEFICIENTE :::

Los vecinos de las urbanizaciones El Bosque, Los Cipreces, Santa Rosa y otros de la primera etapa de Buenos Aires, en el distrito de Nuevo Chimbote, vienen padeciendo los naturales contratiempos que genera la ejecución de una obra integral de cambio de las redes de agua y alcantarillado, como la acumulación de desmonte, la apertura de zanjas, el bloqueo de las vías de acceso, entre otros.

Sin embargo, a esos inconvenientes, que se entienden y comprenden como parte de las dificultades el desarrollo de los pueblos, han sumado una serie de situaciones que deberían haberse previsto y que no deberían presentarse en caso de apele a empresas de experiencia y trayectoria en estos menesteres.

Esto lo han señalado los propios afectados que se han visto, de pronto, bombardeados por las máquinas excavadoras y el desplazamiento de los peones en todas las calles de las distintas urbanizaciones, es decir, que han iniciado los trabajos sin mayor planificación, abriendo zanjas a diestra y siniestra cuando pudieron hacerlo por etapas para evitar que los vecinos vean agudizarse sus padecimientos.

Pero si esto ya es mucho, han advertido con preocupación que la empresa no utiliza los presupuestos destinados para la seguridad de los vecinos, no se han reforzado las zanjas con cintas de seguridad, no se ha apuntalado las zanjas con madera, la estrechez de las calles ha generado que la tierra que excavan en algunos sectores virtualmente “entierren” las puertas de las viviendas, mientras que el avance es realmente insufrible.

Por ejemplo, cuando se trata de obras que perjudican a los moradores se supone que se debe apelar a empresas grandes que puedan contar con planillas de trabajadores de tres turnos, de tal suerte que el avance resulte efectivo empero, el consorcio contratado por la Municipalidad Distrital de Nuevo Chimbote no solo no tiene ese régimen laboral sino que hasta puso de manifiesto su poca capacidad económica al permitir que en las últimas fiestas de fin de año los trabajos se paralicen hasta por una semana porque los peones les decían a los moradores que no les pagaban y por ello dejaron de trabajar para presionar a los responsables.

De la misma manera, las taras en el manejo de los desagües es elocuente, las inundaciones estuvieron a la orden del día en varios sectores, con el agravante que tratándose de una obra de alcantarillado los desbordes son de aguas servidas, sucias y pestilentes que generan serias molestias y repugnancia a cualquiera.

Hace solo una semana los teléfonos de la redacción de los medios de comunicación reventaban nada menos que en horas de la madrugada porque una excavadora había roto una tubería matriz y los trabajadores solucionaron el problema taponeando el hueco y se marcharon, sin advertir que en horas de la madrugada la presión del agua llega a su máximo nivel, lo que generó que la tubería afectada reviente nuevamente y provocó una escandalosa inundación que mantuvo en vela toda la madrugada a los vecinos.

Pero lo más grave ha ocurrido hace solo unos días cuando tres vecinos de la urbanización El Bosque retornaron a sus domicilios y encontraron sus muebles flotando en medio de la inmundicia, sobre aguas pestilentes y cargadas de excremento como consecuencia de un descomunal atoro generado por la obra de saneamiento y que había derivado en que las aguas servidas se expulsen por los inodoros y los sumideros de los desagües domésticos de estas viviendas.

Ello solo puede explicarse en las serias y demostradas deficiencias con las que se viene ejecutando esta obra de saneamiento, la responsabilidad de un consorcio que no se encuentra a la altura de un proyecto de gran envergadura y la indiferencia de una autoridad municipal que hasta el momento, si la memoria no nos traiciona, ni siquiera ha amonestado a los responsables de este proyecto, como si tratara de dejar pasar los reclamos porque se protege de alguna manera a los responsables.

Cierto es que problemas e inconvenientes de este tipo se ven en muchas obras de esta naturaleza, empero, los que se vienen registrando en la obra de la urbanización Santa Rosa y aledaños han superado los niveles de imaginación, tanto así que no son solo los vecinos o los medios de comunicación los que han expuesto esta dramática situación, sino que la propia empresa Sedachimbote ha reclamado públicamente mayor prudencia y profesionalismo en la ejecución de esta obra.  

Esperemos que por el bienestar de los vecinos alguna autoridad llame al orden a los ejecutores y se superen estas graves deficiencias.

                                                           FALLO INAPELABLE

La Sala Penal Liquidadora ha confirmado en parte la sentencia condenatoria que el año pasado dictó un Juzgado Penal contra los dirigentes de la llamada Comunidad Indígena de Chimbote y Coishco, denunciados por una serie de delitos derivados de la escandalosa falsificación de una acta de asamblea de socios con la cual se procuró el cambio de los directivos y el manejo discutido de la entidad.

De esta manera, la instancia superior ha confirmado la condena para los dirigentes  Carlos Alberto Rafael Andrade Cavero, Ángel Wilmer Nicolás Díaz, Liliana Tulia Rodríguez Robles y Julia Irene Mariños  quienes han sido hallado como responsables de las maniobras dolosas que permitieron desembarcar de la presidencia a Ciro Hernández Correa y colocar al frente nada menos que a Manuel Morales del Águila.

Justamente, éste último y Elizabeth Consuelo Díaz Sánchez han sido absueltos en este mismo fallo de la Sala Penal., no porque se haya establecido que son inocentes en los cargos formulados en su contra sino por la falta de pruebas que permitan al juzgador establecer una penalidad en su contra.

Empero, el fallo en estas condiciones no resta legitimidad a quienes desde el año 2009 vienen reclamando que se sancione las maniobras que dieron lugar a las agrias disputas al interior de esta Comunidad Indígena, por lo menos, esta sanción permitirá que se anulen todas las ventas y transferencias que se han realizado a partir de una dirigencia que fue espuria y responde a un nombramiento efectuado por seudo dirigentes que falsificaron documentos para sorprender a sus asociados. Esperemos que a partir de esta condena esta entidad se ordene y deje de estafar a gente a la que ofrece terrenos que son de propiedad pública.