Editorial

Editorial: ::: QUE PRIME LA MESURA :::

La población de la vecina localidad de Caraz salió a las calles la semana pasada, para protestar contra el Decreto Supremo expedido por el gobierno y mediante el cual se ha declarado en emergencia la Laguna de Parón, ordenando trabajos de descarga de las aguas a efectos de evitar riesgos de desborde.

La norma responde a una serie de informes expedidos por organismos técnicos del Ministerio de Agricultura y de INDECI, los cuales estaban advirtiendo del peligro que existe por el elevado nivel que muestran las aguas de la mencionada laguna, lo que podría generar un riesgo de desborde con secuelas catastróficas para la población.

Por ello es que se ha ordenado un procedimiento de descarga y ello involucra el cierre de los accesos a esta zona que es eminentemente turística y cuyos recursos benefician a la misma provincia de Huaylas, de allí que los pobladores han mostrado su rechazo en la medida que no solo advierten una suerte de engaña muchachos, sino que aseguran que hay detrás de esa declaratoria poderosos intereses económicos de empresas que ambicionan quedarse con las aguas de la laguna.

Por lo menos esto es lo que ha revelado Carlos Milla Osorio, Presidente de la Comunidad Campesina de Cruz de Mayo, usuarios por naturaleza de los recursos de esta laguna, quien ha señalado que detrás de esta medida gubernamental se encuentran los poderosos intereses de las empresas que quieren quedarse con el agua.

En realidad, los enfrentamientos de la comunidad de Cruz de Mayo con la empresa que administra la central Hidroeléctrica del Cañón del Pato, no son nuevos o recientes, por el contrario se extienden en el tiempo.

Y es que la laguna de Parón por su estratégica ubicación y por la calidad del recurso que maneja, ha servido para que la central Hidroeléctrica se suministre de este importante recurso, incluso, a expensas que los comuneros usan recursos para sus sembríos y cosechas de productos de pan llevar.

Por ello es que se generó una agria disputa que se ha extendido a lo largo de los años y que tuvo su crisis principal el año 2009, cuando se advertía que por efectos de la propia naturaleza la laguna ya no generaba más agua y estuvo descendiendo peligrosamente en su nivel, por ello los comuneros decidieron tomar las instalaciones de la empresa Duke Energy, que es la que manejaba por entonces la central Hidroeléctrica.

Fue entonces que con la intervención del gobierno central, se consigue establecer una mesa de dialogo como el mecanismo idóneo para salvar las diferencias de comuneros con la empresa hidroeléctrica, llegando a firmarse un acuerdo que ha dominado el manejo sosegado a lo largo del último lustro.

La laguna recuperó su nivel y ha llegado a pasar los niveles máximos que se establecieron entre comuneros y autoridades, si la memoria no nos traiciona desde hace varios meses se viene hablando de una emergencia en esta laguna por riesgo de desborde, empero, siempre fue descartado por el gobierno y los organismos técnicos.

Inclusive, en las mesas de diálogo se estableció un nivel máximo para la emergencia de la laguna, y, justamente, ese nivel es al que se estaba llegando en estos días, por ello los organismos técnicos del gobierno reaccionaron a tiempo y decidieron establecer la declaratoria de emergencia, lo que ha generado la airada protesta de los comuneros que, al parecer, esperaban ser tomados en cuenta antes que se adopte esta medida.

Sin embargo, en la reunión que convocó el generador regional en la ciudad de Huaraz, con la presencia de los técnicos de los organismos competentes, como la ANA, el INDECI y otros, se dejó en claro que existe un peligro de desborde y cuando las cosas llegan a ese extremo hay que tomar medidas preventivas porque no se puede esperar que se registre una desgracia para recién reaccionar ante los elevados niveles que presenta la mencionada laguna.

Esto es evidente, no hay que ser un erudito en la materia para entender y comprender que los niveles de la laguna están en el límite, los propios comuneros lo han admitido, entonces lo que se tiene que hacer es adoptar los protocolos de contingencia que se han establecido al respecto y ello tiene que ver con procedimientos de descarga de agua para eliminar los riesgos.

Hay que advertir que la laguna de Parón cuenta con estos sistemas de desfogue, empero, lo que aparentemente no está establecido es quienes son los usufructuarios de los grandes volúmenes de agua que se estarán descartando.

Hay que tener en cuenta que la laguna de Parón recoge habitualmente 55 millones de metros cúbicos de agua, lo que quiere decir que una descarga para eliminar riesgos de desborde involucra una captación importante del recurso hídrico y los comuneros temen que ella se la lleve la empresa de la hidroeléctrica, e incluso, han mencionado que el proyecto especial Chavimochic estaría detrás de esta evacuación de aguas.

En realidad se trata de especulaciones que no tienen ningún sustento, los comuneros repiten lo que algunos sectores políticos promueven con la finalidad de generar inestabilidad y soliviantar el levantamiento de una población que reacciona de manera airada sin mayor conocimiento de causa.

Justamente, para evitar estas distorsiones y desinformaciones, el gobierno convocó a una mesa de dialogo con la finalidad de afinar las posiciones, con el objetivo de informar convenientemente a los comuneros de Cruz de Mayo y de la población caracina en general a efectos de impedir que los traficantes de la política los utilicen para promover paros y movilizaciones que no deben tener lugar cuando existen amenazas de un desborde en la laguna de Parón.

Lamentablemente, esta mesa de dialogo estaba a cargo del Ministro de defensa José Huertas, quien anunció que el sábado 22 estaría en Caraz para convenir una salida con los comuneros, sin embargo, esa cita se postergó y fatalmente el Ministro ha fallecido repentinamente la mañana del ultimo lunes, lo que probablemente dilatará aún más este diferendo.

Sin embargo, es pertinente señalar que, al margen de quienes sean los beneficiarios del agua que se evacuará de la laguna, los hermanos caracinos no deben ignorar que por encima de cualquier vicisitud o desencuentro está la vida y la seguridad de las personas. En la medida que exista una amenaza de desborde y teniendo en cuenta los elevados niveles que presenta la laguna, lo mejor es que adopten medidas preventivas y se evite una tragedia. No se debe olvidar que la vida está por encima de todo.