Editorial

Editorial: ::: UNA GRAN NOTICIA :::

Los bochornosos actos de violencia promovidos por trabajadores de la Municipalidad Provincial del Santa que invadieron la sesión de concejo que se realizaba en el cuarto piso de la comuna provincial en la cual menudearon insultos y amenazas contra el Alcalde Roberto Briceño y sus principales funcionarios, ha dejado en un segundo plano el anuncio realizado por el mismo burgomaestre en relación al megaproyecto de saneamiento que ha sido aprobado para nuestra ciudad.

En efecto, en horas de la mañana del pasado miércoles el alcalde Roberto Briceño ofreció una conferencia de prensa para dar cuenta de los resultados de las gestiones que ha venido realizando en el Ministerio de Vivienda y que representan un primer y efectivo paso para la ejecución de un gran proyecto de agua y desagüe para 63 pueblos de Chimbote y el distrito de Nuevo Chimbote.

El alcalde explicó que se trata del proyecto “grandes ciudades” del Ministerio de Vivienda, al cual consiguió que se incluya a Chimbote entre las cinco ciudades de todo el país que se beneficiaran con este proyecto de gran envergadura.

Briceño ya había considerado a los pueblos jóvenes del cono norte y aquellos que se ubican en las 308 y 217 hectáreas de Nuevo Chimbote, para que se ejecute un proyecto integral de saneamiento que procurará solucionar el problema de la carencia de servicios de saneamiento a una gran extensión de la población.

Se trata de un ambicioso proyecto que fue anunciado hace algunos meses por el mismo alcalde y que muchos pensábamos, teniendo en cuenta la experiencia en estos temas de la burocracia estatal y municipal, se encaminaría en un año más, pues se trata de una obra que implica la inversión de ciento de millones de soles.

Sin embargo, la semana pasada el alcalde nos trajo la buena nueva de la adjudicación de la buena pro de la consultoría que ha otorgado el Ministerio de Vivienda a un consorcio denominado “Aguas del santa”, el cual se encargará de elaborar los estudios de pre inversión de nivel de perfil para este proyecto de gran envergadura.

Ello quiere decir que el saneamiento para estas decenas de pueblos jóvenes y asentamientos humanos se ha puesto en marcha, ya los canales administrativos del Ministerio de Vivienda estarán formalizando la firma del contrato y se iniciará la que se será una gran obra para Chimbote.

Para que se tenga una idea de la real dimensión de esta “megaobra” basta advertir que esta elaboración de los estudios de pre inversión tiene un costo de cuatro millones trescientos mil soles, lo que quiere decir que el monto total del proyecto superará fácilmente los 600 millones de soles.

Tal parece que en Chimbote no se ha valorado conscientemente el volumen y la dimensión de esta gran obra que ha conseguido gestionar con éxito el alcalde Roberto Briceño en los altos cielos del Ministerio de Vivienda, seguramente para el común de las gentes es uno más de la maleta de proyectos que ejecuta una entidad edil.

Sin embargo, esto no es tan sencillo, la adjudicación de estos proyectos no se hace por sorteo o porque a los Ministros le caiga bien determinado alcalde, por el contrario, estos proyectos se obtienen en base a gestión y, esencialmente, gracias a los contactos que pueda tener una autoridad en el cogollo del ejecutivo, como para que siquiera puedan leer los documentos de un proyecto.

No sabemos cuál ha sido su fórmula pero el alcalde lo ha conseguido, no tiene la misma suerte en lo que se refiere a eficiencia funcional en la sede de la comuna provincial pero si obtiene buenos resultados a niveles del ejecutivo.

Y es que un sector que si valora el real alcance que tiene la gestión que ha realizado el alcalde son los beneficiarios de estos proyectos, los pobladores de asentamientos que viven en condiciones difíciles porque carecen de servicios de saneamiento y que, aun cuando sabían que deberían esperar muchos años más, han advertido con gozo y algarabía que este gran proyecto se ha puesto en marcha gracias a las últimas gestiones del alcalde.

Justamente, hace solo unas semanas estos mismos pobladores saludaron el esfuerzo que había realizado el alcalde Roberto Briceño para rescatar el expediente de la transferencia de terrenos a efectos que se haga el saneamiento físico legal de las denominadas 308 y 217 hectáreas y de esta manera la Superintendencia Nacional de Bienes Nacionales pueda retomar el avance para que se cristalice el sueño de miles de personas que esperan por un títulos de propiedad.

Y es que paralelamente a las gestiones de la gran obra de saneamiento, el alcalde demandó que se concrete el saneamiento físico legal de los predios a efectos que no existan posteriores problemas cuando se cuente con estudios y llegue el momento de ejecutar el agua y desagüe, pedido que fue aceptado por el mismo Ministerio de Vivienda que dio las instrucciones pertinentes a Bienes Nacionales a efectos que culmine los trámites legales para ese cometido.

Precisamente, estos pobladores son los que sí han valorado las gestiones del burgomaestre ya por ello llegaron el pasado domingo llegaron a la ceremonia de izamiento del pabellón nacional a darle las muestras de su agradecimiento por este repentino avance que ha conseguido en el caro anhelo de contar con el agua y desagüe, actitud que ha sido asumida por los opositores y enemigos del alcalde como una maniobra de tipo político, empero, esta gente que tiene todo, que no padece las penurias de los pobladores de esos asentamientos, no tiene derecho a maltratarlos como lo han hecho el domingo último.

Y es que, al parecer en este caso del proyecto de “grandes ciudades” no se digiere aun su real dimensión en nuestra ciudad, no se ha tomado en cuenta que se trata de una gran obra, de un proyecto de dimensiones monumentales que beneficiará a miles de personas en nuestra ciudad,

En medio de todos los avatares que hace frente el alcalde en estos días, es evidente que nos trajo una gran noticia, el inicio de un proyecto valiosísimo que redundará en beneficio de miles de pobladores y que impactará, ciertamente, en el progreso y desarrollo de nuestra provincia.