Editorial

::: ERROR TRAS ERROR :::

Comentábamos ayer en este mismo espacio que el gerente de Essalud, Ramón de la Cruz Castillo, había corroborado que en su institución se había registrado el descenso de un 37% en el número de contagios y, consecuentemente, los hospitales se encuentran menos congestionados de lo que estaban hasta hace solo dos meses.

Sin embargo, este es un escenario que se repite en varias ciudades del país y el mismo galeno nos decía y repetía que esto no debe dar lugar a triunfalismos, por el contrario, no se puede bajar la guardia y destacábamos este hecho porque había reiterado en la clave que debe regirnos en este momento, cual es cuidarse y mantenerse a la expectativa ante el acecho y amenaza del Covid que aún se encuentra en las calles.

Ocurre que mientras escribíamos ese comentario y destacábamos las afirmaciones del funcionario de Essalud, el presidente de la república ofrecía una conferencia de prensa en la que anunciaba la decisión del Gobierno de levantar el aislamiento dominical y permitir actividades de manera restringida atendiendo a ese descenso en nivel de contagios y de decesos a nivel de todo el país.

Estas restricciones están relacionadas con el impedimento de circulación de vehículos particulares, lo que quiere decir que la población debe desplazarse necesariamente en taxis o colectivos, mientras incidía en el hecho que se mantenía completamente prohibidas las reuniones familiares y amicales.

De la misma manera, el gobierno ha decidido ampliar en horario de la inmovilización absoluta, es decir el toque de queda, de 10 de la noche hasta las 11.00 de la noche con la finalidad que los establecimientos comerciales puedan ampliar una hora más la atención al público.

Hay que hacer la salvedad que estas medidas no aplican en las regiones que se encuentran en cuarentena focalizada, es decir, en  todas aquellas que se mantienen en asilamiento social obligatorio, lo que quiere decir que en Ancash alcanza a nuestra ciudad, a las provincias de Santa, Casma, Huarmey y Huaraz.

Sin embargo, aun cuando estas medidas no nos atañen, lo que no podemos dejar de exponer es el hecho que se equivoca el Presidente Vizcarra cuando levanta una medida que se estableció, precisamente, porque había provocado el incremento de contagios, había generado que las cifras se disparen porque los peruanos tienen esa mala costumbre de hacer todo lo que le recomiendan que no hagan.

Apenas se levantó la cuarentena dominical, lo que hicieron fue organizar cuchipandas, reunirse en familia, salir con los amigos, organizar las pichanguitas, cuando estas son manifestaciones que solo procuran la propagación del virus.

Basta que solo uno sea portador asintomático para que todo el entorno adquiera la enfermedad y aquel que retorna de la reunión a su domicilio contagia a todos aquellos que están en su entorno, coronándose de esta manera una cadena de contagios que se agudiza cuando encuentra a los cuadros vulnerables.

¿Cree realmente el gobierno que haciendo la recomendación que se mantienen prohibidas las reuniones dominicales se dejará de organizarse estas actividades? ¿No es consciente que cuando existía la prohibición los peruanos se las arreglaban para organizar estas tertulias etílicas sacándole la vuelta al control policial? ¿Para qué dar muestras de un absurdo triunfalismo cuando lo que se necesita es afianzar el cuidado para que las cifras sigan descendiendo?

Aun cuando a muchos no les guste creemos que es un error levantar la cuarentena dominical en este momento que a nivel nacional las cifras comienzan a ceder, cuando las angustias del personal asistencial han cesado y cuando los peruanos comienzan a entender que cuidarse es la herramienta de prevención más eficaz.

Esperemos que el rebrote no represente una amenaza con estas medidas, los gobernantes deben decidir sobre la base de las malas costumbres de los peruanos, aquellas que son ideales para un virus tan nocivo como el Covid. Ojalá nos equivoquemos pero nos parece que vamos de error tras error, cuando lo que queremos la mayoría es salir del hoyo en el que nos encontramos y no solo un sector privilegiado.