Opinión

LA REFORMA DEL SISTEMA DE JUSTICIA DE CARA AL BICENTENARIO

Dr. Edhín Campos Barranzuela

Bastante satisfacción ha causado en la comunidad jurídica nacional, la reciente publicación sobre política pública de reforma del sistema de justicia de cara al bicentenario, por parte del Consejo para Reforma del Sistema Nacional de Justicia.

Este Consejo, se encuentra conformado por el presidente de la República, el presidente de Congreso, la presidenta del Poder Judicial, la presidente del Tribunal Constitucional, la presidente de la Junta Nacional de Justicia, el Contralor General de la República y el Defensor del Pueblo.

Es preciso indicar, que mediante Ley 30942, se creó el Consejo para la Reforma del Sistema de Justicia, con el objetivo de impulsar su refundición, mediante la formulación de los criterios para la elaboración de la política nacional y la coordinación para la ejecución de políticas públicas de justicia.

En la última reunión de las autoridades gubernamentales, tuvo como finalidad de que los participantes intercambiaran ideas sobre el diagnóstico situacional de la justicia, presupuesto requerido para la ejecución de las acciones en el periodo 2021-2025 y además para realizar un seguimiento, control, implementación y ejecución de los respectivos procesos de reforma en todo el sistema de justicia.

Según se ha precisado en el documento publicado, el CRSJ tiene como función principal elaborar por consenso una Propuesta de Política Pública de Reforma del Sistema de Justicia que tome en cuenta la situación crítica en la que se encuentra y los distintos esfuerzos que se han realizado en los últimos 30 años para enfrentarla.

Se precisa, que la propuesta de política aprobada toma como base uno de los principales proyectos de Reforma del Sistema de Justicia desarrollado por la Comisión Especial para la Reforma Integral de la Administración de Justicia – CERIAJUS, cuyas propuestas tuvieron gran acogida por las autoridades y operadores del sistema de justicia. No obstante, el CERIAJUS no contó con una entidad que realizara el seguimiento, cumplimiento y supervisión de sus lineamientos, situación que se busca superar mediante la creación del CRSJ como una entidad con un mandato permanente y con participación indelegable por parte de sus miembros.

En tal sentido, se ha elaborado 9 objetivos prioritarios para que se tenga en cuenta en los próximos 5 años y estos son:

– Impulsar la gobernanza de datos e interoperabilidad del sistema de justicia.

– Facilitar el acceso a la justicia de todas las personas.

– Modernizar los procesos judiciales no penales

– Modernizar los procesos penales y el sistema penitenciario

– Fortalecer los recursos humanos de las instituciones del sistema de justicia

– Mejorar el ejercicio y formación de la abogacía.

– Fortalecimiento de las políticas anticorrupción, control disciplinario y ético.

– Combatir la violencia contra la mujer e integrantes del grupo familiar

– Fortalecer la adecuación normativa.

Asimismo, es preciso indicar que este Consejo, cuenta con un Consejo Técnico, para la ejecución de sus acuerdos y serán los propios representantes de las instituciones que conforman el sistema de justicia.

Dentro, de las funciones de esta entidad judicial, es la de impulsar la reforma judicial, realizar seguimiento, control y además formular criterios de evaluación para la elaboración de la política nacional de reforma del sistema de justicia.

Entretanto, es necesario generar debate en torno a esta nueva una agenda judicial, que marque la pauta para que se implementen algunas reformas dentro del aparato de impartición de justicia y ello parte por la asignación dentro del Programa Estratégico Institucional de cada entidad, que se le asigne de un adecuado presupuesto para la ejecución de los bienes y servicios públicos.

No cabe duda, que la agenda judicial de esta institución, se irá consensuando a medida que se genere un debate democrático con el plan de trabajo institucional, pues urge realizar cambios en la reforma judicial, a fin de que se preserve el respeto al orden constitucional, se garantice el sistema democrático y se promueva la plena autonomía e independencia del Poder Judicial.

La publicación de este nuevo documento de trabajo de la reforma del sistema de justicia de cara al bicentenario, no debe quedar en solo eso, “ un documento “, sino se debe plasmar en una buena toma de decisiones, a fin de robustecer el sistema de justicia, tan sensible y descuidado durante estos últimos años, pues si no se hace, se corre el riesgo de seguir deslegitimizando a las autoridades de cada una de las instituciones que componen esta nueva entidad estatal.

Estas propuestas realizadas pueden ser viables o no en la presente coyuntura, sin embargo permite plantear algunas consideraciones, que pueden ser materia de implementación por el Consejo para la Reforma del Sistema de Justicia.

Finalmente, las propuestas son bastante interesantes y esperamos se genere un debate público en diferentes foros judiciales y académicos, para luego que sean mejoradas y acogidas por las autoridades y así se optimice la impartición de justicia, pues urge implementar una verdadera política pública de justicia, que le cambie el rostro y todo el cuerpo a la dama de justicia.